Especificaciones y análisis del Volkswagen Polo
Potencia
75CV
Par
195Nm
Consumo
4.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.6s
Vel. Máx.
170km/h
Peso
1090kg
Precio
15,820€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 3 puertas
270 L
45 L
55 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Polo 3p 1.4 TDI 75 CV Highline (2002-2005)
Descripción general
El Volkswagen Polo 3p 1.4 TDI de 75 CV, lanzado en 2002, se presenta como una opción compacta y eficiente dentro del segmento utilitario. Con su carrocería de tres puertas y el acabado Highline, este modelo buscaba combinar la practicidad urbana con un toque de distinción. Su motor diésel prometía un consumo ajustado, ideal para el día a día y escapadas ocasionales, consolidando la reputación de Volkswagen en ofrecer vehículos robustos y fiables.
Experiencia de conducción
Al volante, el Polo 1.4 TDI de 75 CV ofrece una experiencia de conducción equilibrada. La dirección es precisa y la suspensión, de tipo McPherson en el eje delantero y de rueda tirada con elemento torsional en el trasero, filtra bien las irregularidades del asfalto, proporcionando un confort notable para su segmento. El motor, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 75 CV de forma lineal, con un par motor de 195 Nm a 2200 rpm que permite una buena respuesta en marchas cortas y una recuperación adecuada en carretera. La caja de cambios manual de cinco velocidades es suave y precisa, contribuyendo a una sensación de control y agilidad en el tráfico urbano. La velocidad máxima de 170 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 13.6 segundos lo posicionan como un coche competente para la mayoría de las situaciones, sin pretensiones deportivas, pero con la solvencia necesaria para el uso diario.
Diseño y estética
El diseño del Volkswagen Polo de 2002, en su versión de tres puertas, es un reflejo de la sobriedad y funcionalidad que caracterizan a la marca. Sus líneas son limpias y atemporales, con una estética que, aunque no arriesgada, resulta elegante y bien proporcionada. Los faros delanteros, de formas suaves, se integran armoniosamente con la parrilla frontal, mientras que la zaga mantiene una coherencia visual con el resto del conjunto. Las dimensiones compactas, con 3897 mm de largo, 1650 mm de ancho y 1465 mm de alto, lo hacen ideal para la ciudad, facilitando las maniobras y el estacionamiento. El acabado Highline añade detalles que realzan su atractivo, sin caer en excesos, manteniendo la esencia de un coche práctico y con un toque de calidad percibida.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Polo 1.4 TDI de 2002 incorpora soluciones probadas y eficientes para su época. El motor diésel de 1.4 litros y tres cilindros, con inyección directa por bomba inyector, turbo e intercooler, es un ejemplo de la ingeniería de Volkswagen para lograr un buen equilibrio entre prestaciones y consumo. La transmisión manual de cinco velocidades es un componente fiable y de fácil manejo. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados en el eje delantero y discos sólidos en el trasero, garantizando una frenada efectiva. Aunque no dispone de las avanzadas ayudas a la conducción de los modelos actuales, su equipamiento básico cumple con las expectativas de un vehículo de su segmento y año, ofreciendo lo necesario para una conducción segura y confortable.
Competencia
En el competitivo segmento de los utilitarios, el Volkswagen Polo 1.4 TDI de 75 CV se enfrentaba a duros rivales como el Ford Fiesta, el Opel Corsa, el Peugeot 206 y el Renault Clio. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, desde la agilidad del Fiesta hasta el confort del Corsa o el diseño atrevido del 206. Sin embargo, el Polo se distinguía por su calidad de construcción, la eficiencia de su motor diésel y una imagen de marca que transmitía solidez y fiabilidad, aspectos muy valorados por los compradores de la época. Su consumo combinado de 4.4 l/100km era un argumento de peso frente a sus competidores, posicionándolo como una opción muy atractiva para quienes buscaban economía de uso sin renunciar a la calidad.
Conclusión
El Volkswagen Polo 3p 1.4 TDI de 75 CV de 2002 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un referente de lo que un utilitario bien hecho debe ser. Su combinación de un diseño atemporal, un motor diésel eficiente y una calidad de construcción sólida lo convierten en una opción muy sensata para aquellos que buscan un vehículo compacto, económico de mantener y fiable. Es un coche que cumple con creces su propósito, ofreciendo una experiencia de conducción agradable y un consumo muy contenido. Un clásico moderno que sigue demostrando la maestría de Volkswagen en el segmento de los coches pequeños.




