Volkswagen Polo 3p Trendline 1.4 100 CV (1999-2002)

2000
Gasolina
FWD
Manual 5v
Volkswagen Polo - Vista 1
Volkswagen Polo - Vista 2
Volkswagen Polo - Vista 3
Volkswagen Polo - Vista 4

Especificaciones y análisis del Volkswagen Polo

Potencia

101CV

Par

126Nm

Consumo

6.7l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.4s

Vel. Máx.

188km/h

Peso

987kg

Precio

13,102

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 3 puertas

Maletero

245 L

Depósito

45 L

Potencia

74 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima101 CV / 74 kW
Par máximo126 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito45 L
Maletero245 L

Análisis detallado del Volkswagen Polo 3p Trendline 1.4 100 CV (1999-2002)

Descripción general

El Volkswagen Polo 3p Trendline 1.4 100 CV, un vehículo que marcó una época entre 1999 y 2002, se presenta como una opción compacta pero con un espíritu vibrante. Con su motor de gasolina de 101 CV y una transmisión manual de 5 velocidades, este Polo de tres puertas prometía agilidad y eficiencia para el día a día, manteniendo la calidad y el diseño sobrio característicos de Volkswagen.

Experiencia de conducción

Al volante, el Polo 1.4 de 100 CV ofrecía una experiencia de conducción equilibrada. Su motor de 1.390 cc, con 101 CV a 6000 rpm, proporcionaba una respuesta enérgica, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 10.4 segundos y una velocidad máxima de 188 km/h. La suspensión tipo McPherson delantera y de rueda tirada con elemento torsional trasera, junto con los frenos de disco ventilados delanteros, aseguraban un comportamiento dinámico y seguro. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, ofrecía una conexión directa con la carretera, transmitiendo confianza al conductor. El consumo combinado de 6.7 l/100km era razonable para la época, haciendo de este Polo un compañero fiel tanto en ciudad como en trayectos más largos.

Diseño y estética

El diseño del Volkswagen Polo de tres puertas de esta generación se caracterizaba por sus líneas limpias y funcionales, un sello distintivo de la marca. Con una longitud de 3743 mm, una anchura de 1632 mm y una altura de 1418 mm, su tamaño compacto lo hacía ideal para la vida urbana. Las tres puertas le conferían un aspecto más deportivo y juvenil, mientras que el interior, aunque sobrio, estaba bien rematado y ofrecía un espacio adecuado para cinco ocupantes, con un maletero de 245 litros. Las llantas de 6x14 pulgadas con neumáticos 185/55 R14 H completaban una estética discreta pero elegante.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Polo 3p Trendline 1.4 100 CV incorporaba soluciones mecánicas probadas y eficientes. Su motor de gasolina de cuatro cilindros con inyección indirecta y culata de aluminio, junto con 4 válvulas por cilindro, optimizaba la combustión y el rendimiento. Aunque carecía de las sofisticaciones electrónicas de los modelos actuales, su fiabilidad mecánica era un punto fuerte. La transmisión manual de cinco velocidades, precisa y robusta, contribuía a una experiencia de conducción directa y participativa. Los sistemas de suspensión y frenado, aunque convencionales, estaban bien ajustados para ofrecer un buen compromiso entre confort y seguridad.

Competencia

En su segmento, el Volkswagen Polo 3p Trendline 1.4 100 CV se enfrentaba a competidores como el Opel Corsa, el Ford Fiesta o el Renault Clio. Si bien estos rivales ofrecían alternativas interesantes, el Polo se distinguía por su reputación de calidad de construcción, su comportamiento dinámico equilibrado y su diseño atemporal. Su motor de 100 CV lo posicionaba como una opción potente dentro de los compactos de la época, atrayendo a aquellos que buscaban un coche pequeño pero con buenas prestaciones.

Conclusión

El Volkswagen Polo 3p Trendline 1.4 100 CV fue un coche que supo combinar la practicidad de un compacto con un rendimiento notable para su tamaño. Su diseño funcional, su motor enérgico y su fiabilidad mecánica lo convirtieron en una opción muy atractiva en su momento. Aunque los años han pasado, este Polo sigue siendo un testimonio de la ingeniería alemana, un vehículo que ofrecía una experiencia de conducción honesta y satisfactoria, ideal para quienes valoraban la calidad y la eficiencia en un formato compacto.