Especificaciones y análisis del Volkswagen Passat
Potencia
131CV
Par
310Nm
Consumo
7.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.9s
Vel. Máx.
196km/h
Peso
1495kg
Precio
32,720€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 5v
FWD
5 / 5 puertas
495 L
62 L
96 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Passat Variant Highline 1.9 TDI 130 CV Tiptronic (2001-2005)
Descripción general
El Volkswagen Passat Variant Highline 1.9 TDI de 130 CV con cambio Tiptronic, lanzado en 2001, representa la esencia de la berlina familiar alemana de principios de siglo. Con su motor diésel de inyección directa y turbo, ofrecía una combinación de eficiencia y rendimiento que lo hizo muy popular. Su diseño sobrio y funcional, junto con un interior espacioso, lo convertían en una opción ideal para quienes buscaban un coche versátil y fiable para el día a día y los viajes largos.
Experiencia de conducción
Al volante, el Passat Variant 1.9 TDI 130 CV Tiptronic transmitía una sensación de solidez y aplomo. El motor diésel, aunque no era un derroche de potencia, ofrecía un par motor contundente desde bajas revoluciones, lo que facilitaba los adelantamientos y la conducción en carretera. La caja de cambios automática Tiptronic, con sus 5 velocidades, proporcionaba transiciones suaves y confortables, aunque no destacaba por su rapidez. La suspensión, de tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, filtraba bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un buen equilibrio entre confort y estabilidad. La dirección, de cremallera, era precisa y comunicativa, permitiendo un buen control del vehículo. En general, la experiencia de conducción era relajada y segura, ideal para largos trayectos familiares.
Diseño y estética
El diseño del Passat Variant de 2001 se caracterizaba por su elegancia discreta y atemporal. Las líneas eran limpias y funcionales, sin estridencias, lo que le confería una imagen de coche serio y bien construido. La carrocería familiar, o Variant, integraba el espacio de carga de forma armoniosa, sin sacrificar la estética. Los faros delanteros y traseros, de diseño clásico, contribuían a esa imagen de sobriedad. En el interior, la calidad de los materiales y los ajustes eran excelentes, con un salpicadero bien organizado y una ergonomía cuidada. Los asientos, cómodos y con buen soporte, invitaban a pasar horas al volante. A pesar de los años, su diseño sigue siendo reconocible y mantiene una cierta dignidad.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Passat Variant 1.9 TDI 130 CV Tiptronic de 2001 incorporaba soluciones avanzadas para su época. El motor 1.9 TDI, con inyección directa por bomba inyector, turbo de geometría variable e intercooler, era un referente en eficiencia y rendimiento diésel. La transmisión automática Tiptronic de 5 velocidades, aunque no era la más moderna, ofrecía la posibilidad de cambio manual secuencial, lo que aportaba un extra de control al conductor. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delante y macizos detrás, y es de esperar que incluyera sistemas como ABS y airbags, aunque los datos específicos no se detallan. El equipamiento Highline solía incluir elementos de confort como climatizador, elevalunas eléctricos y un sistema de sonido de calidad, haciendo la vida a bordo más agradable.
Competencia
En su segmento, el Volkswagen Passat Variant 1.9 TDI 130 CV Tiptronic se enfrentaba a duros competidores. Entre ellos destacaban el Audi A4 Avant, que ofrecía un enfoque más premium, el BMW Serie 3 Touring, con un carácter más deportivo, y el Mercedes-Benz Clase C Estate, sinónimo de lujo y confort. Otros rivales importantes eran el Ford Mondeo Wagon, el Opel Vectra Caravan y el Peugeot 406 Break, que ofrecían alternativas con diferentes enfoques en cuanto a diseño, equipamiento y precio. El Passat se posicionaba como una opción equilibrada, con una excelente relación calidad-precio, fiabilidad contrastada y un gran espacio interior.
Conclusión
El Volkswagen Passat Variant Highline 1.9 TDI 130 CV Tiptronic de 2001 fue un coche que marcó una época. Su combinación de un motor diésel potente y eficiente, una transmisión automática confortable, un diseño atemporal y un interior espacioso lo convirtieron en una opción muy atractiva para familias y profesionales. Aunque sus prestaciones no eran de infarto, su fiabilidad y su bajo consumo lo hacían un compañero de viaje incansable. Hoy en día, sigue siendo un coche valorado en el mercado de segunda mano por su robustez y su capacidad para seguir cumpliendo su función con dignidad.