Especificaciones y análisis del Volkswagen Passat
Potencia
90CV
Par
210Nm
Consumo
5.3l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.5s
Vel. Máx.
184km/h
Peso
1324kg
Precio
21,318€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
475 L
62 L
66 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Passat Comfortline 1.9 TDI 90 CV (1996-2000)
Descripción general
El Volkswagen Passat Comfortline 1.9 TDI de 1996 es un coche que marcó una época, ofreciendo una combinación de fiabilidad, eficiencia y confort que lo convirtió en una opción muy popular para las familias y profesionales de la época. Este modelo, con su motor diésel de 90 CV, prometía viajes largos con un consumo contenido y una durabilidad envidiable, características muy valoradas en su segmento.
Experiencia de conducción
Al volante del Passat de 1996, la sensación es de solidez y aplomo. El motor 1.9 TDI, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 90 CV de forma lineal y con un par motor de 210 Nm a 1900 rpm que permite una conducción relajada y eficiente. La aceleración de 0 a 100 km/h en 13.5 segundos y una velocidad máxima de 184 km/h son cifras adecuadas para la época, permitiendo afrontar viajes por carretera con solvencia. La suspensión, con paralelogramo deformable delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, junto con las barras estabilizadoras, proporciona un buen equilibrio entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del terreno sin sacrificar la seguridad en curva. La dirección, aunque carece de la precisión de sistemas más modernos, cumple su función, transmitiendo confianza al conductor. El consumo combinado de 5.3 l/100km es una de sus grandes bazas, haciendo de este Passat un compañero ideal para el día a día y los viajes largos.
Diseño y estética
El diseño del Volkswagen Passat de 1996 es un reflejo de la sobriedad y funcionalidad alemana. Sus líneas son clásicas y atemporales, con una carrocería berlina de cuatro puertas que prioriza la habitabilidad y la aerodinámica. Con una longitud de 4675 mm, una anchura de 1740 mm y una altura de 1459 mm, ofrece un espacio interior generoso para cinco ocupantes. El maletero, con 475 litros de capacidad, es amplio y muy aprovechable, ideal para viajes familiares. La estética general es discreta pero elegante, sin estridencias, lo que le ha permitido envejecer con dignidad y mantener una imagen de coche serio y fiable a lo largo de los años.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Passat de 1996 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo, especialmente en su motorización. El motor 1.9 TDI de 90 CV destacaba por su inyección directa, turbo e intercooler, elementos que contribuían a su excelente eficiencia y rendimiento. La transmisión manual de cinco velocidades era la opción estándar, ofreciendo un manejo preciso y duradero. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, proporcionando una capacidad de frenado adecuada. Aunque no disponía de los sistemas de asistencia a la conducción actuales, su chasis bien equilibrado y su construcción robusta ofrecían una base sólida para la seguridad pasiva.
Competencia
En su segmento, el Volkswagen Passat Comfortline 1.9 TDI de 1996 se enfrentaba a duros competidores como el Opel Vectra, el Ford Mondeo, el Peugeot 406 y el Renault Laguna. Frente a ellos, el Passat destacaba por su reputación de fiabilidad, la eficiencia de su motor TDI y la calidad de sus acabados, que a menudo se percibían como superiores. Su diseño sobrio y su buen valor de reventa también eran puntos a su favor en un mercado muy competitivo.
Conclusión
El Volkswagen Passat Comfortline 1.9 TDI de 1996 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un referente de lo que un buen sedán familiar debe ser. Su combinación de un motor diésel eficiente y duradero, un diseño atemporal, un interior espacioso y un comportamiento en carretera equilibrado lo convierten en una opción muy interesante para quienes buscan un vehículo práctico y fiable. Es un coche que evoca nostalgia por una época en la que la ingeniería mecánica y la durabilidad eran pilares fundamentales en la construcción automotriz, dejando una huella imborrable en la historia de Volkswagen.