Especificaciones y análisis del Toyota RAV4
Potencia
124CV
Par
310Nm
Consumo
5.2l/100
Emisiones
136g/km
0-100 km/h
11s
Vel. Máx.
180km/h
Peso
1660kg
Precio
27,990€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
AWD
5 / 5 puertas
547 L
60 L
91 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Toyota RAV4 120D AWD Advance · 124 CV (2014-2015)
Descripción general
El Toyota RAV4 de 2013, en su versión 120D AWD Advance, se presenta como un SUV robusto y fiable, ideal para quienes buscan un compañero de viaje versátil. Con su motor diésel de 124 CV y tracción integral, este modelo promete una experiencia de conducción equilibrada, tanto en la ciudad como en escapadas fuera del asfalto. Su diseño, aunque ya con algunos años, sigue transmitiendo solidez y una presencia inconfundible en la carretera.
Experiencia de conducción
Al volante del RAV4 120D AWD Advance, la sensación predominante es de seguridad y control. El motor diésel, con sus 124 CV, ofrece una respuesta adecuada para el día a día, sin grandes alardes de deportividad, pero con la solvencia necesaria para afrontar adelantamientos y mantener cruceros cómodos. La tracción integral proporciona un extra de confianza en condiciones de baja adherencia, mientras que la suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un confort de marcha notable. La dirección asistida eléctrica es precisa y facilita las maniobras, haciendo que este SUV de 4,57 metros se sienta más ágil de lo que sus dimensiones sugieren. Es un coche que invita a viajar con tranquilidad, disfrutando del camino.
Diseño y estética
El diseño del Toyota RAV4 de 2013 se caracteriza por sus líneas marcadas y una estética que combina la robustez de un todoterreno con la elegancia de un SUV. Su frontal, con faros afilados y una parrilla prominente, le otorga una mirada decidida. Los pasos de rueda abultados y las protecciones inferiores refuerzan su carácter aventurero, mientras que la zaga, con sus pilotos verticales, mantiene una identidad propia. El interior, aunque funcional, se percibe bien construido, con materiales que, sin ser lujosos, transmiten durabilidad. La habitabilidad es generosa, tanto en las plazas delanteras como en las traseras, y el maletero, con 547 litros, es uno de sus puntos fuertes, ofreciendo una gran capacidad para el equipaje de toda la familia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el RAV4 120D AWD Advance de 2013 incorpora elementos que, para su época, eran bastante completos. Destaca su sistema de tracción integral AWD, que distribuye la fuerza entre los ejes para optimizar la adherencia. El motor diésel de 1998 cc cuenta con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, lo que contribuye a una buena eficiencia y un par motor de 310 Nm disponible desde bajas revoluciones. La transmisión manual de 6 velocidades permite un control preciso sobre la entrega de potencia. Además, cuenta con sistema Stop&Start, que ayuda a reducir el consumo en entornos urbanos. En cuanto a seguridad, incorpora frenos de disco ventilados delante y macizos detrás, y una dirección de cremallera con asistencia eléctrica. Aunque no dispone de las últimas ayudas a la conducción de los modelos actuales, ofrece un equipamiento sólido para su segmento y año.
Competencia
En el competitivo segmento de los SUV compactos, el Toyota RAV4 120D AWD Advance de 2013 se enfrentaba a duros rivales. Entre ellos, destacaban el Honda CR-V, conocido por su fiabilidad y espacio interior; el Nissan Qashqai, pionero y superventas del segmento; el Volkswagen Tiguan, con su calidad de acabados y opciones de motorización; y el Ford Kuga, que ofrecía una dinámica de conducción más deportiva. Cada uno de ellos presentaba sus propias fortalezas, pero el RAV4 se distinguía por su reputación de durabilidad, su eficiente motor diésel y su capacidad para afrontar terrenos complicados gracias a su tracción integral.
Conclusión
El Toyota RAV4 120D AWD Advance de 2013 es una opción muy interesante para aquellos que buscan un SUV fiable, espacioso y con buenas capacidades para el día a día y las escapadas. Su motor diésel, aunque no es el más potente, cumple con creces, ofreciendo un consumo contenido y un buen par motor. El diseño, aunque ya no es el más moderno, sigue siendo atractivo y funcional. La tracción integral es un plus para la seguridad y la versatilidad. En definitiva, es un coche que, a pesar de los años, mantiene su esencia de vehículo práctico y duradero, una compra inteligente para quien valora la tranquilidad y la eficiencia.