Especificaciones y análisis del Toyota RAV4
Potencia
116CV
Par
250Nm
Consumo
7.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
12.1s
Vel. Máx.
170km/h
Peso
1370kg
Precio
27,795€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
AWD
5 / 5 puertas
400 L
57 L
85 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Toyota Rav4 D4-D 5p Luna · 116 CV (2001-2003)
Descripción general
El Toyota RAV4 D4-D 5p Luna de 2000 es un SUV que marcó una época, combinando la versatilidad de un todoterreno con la comodidad de un turismo. Con su motor diésel de 116 CV y tracción integral, este modelo ofrecía una propuesta atractiva para quienes buscaban aventura sin renunciar a la practicidad diaria. Su diseño robusto y su fiabilidad mecánica lo convirtieron en un referente en su segmento, capturando la atención de un público que valoraba la durabilidad y el rendimiento.
Experiencia de conducción
Al volante del RAV4 D4-D, la sensación es de control y seguridad. Su motor diésel de 116 CV, con un par motor de 250 Nm disponible desde las 1800 rpm, ofrece una respuesta enérgica y progresiva, ideal tanto para la ciudad como para escapadas por carretera o caminos. La caja de cambios manual de 5 velocidades permite un manejo preciso, mientras que la tracción AWD proporciona una excelente adherencia en diversas condiciones. La suspensión, tipo McPherson en el eje delantero, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un confort de marcha notable. Aunque su aceleración de 0 a 100 km/h en 12.1 segundos no es fulgurante, es suficiente para la mayoría de las situaciones, y su velocidad máxima de 170 km/h lo hace apto para viajes largos. El consumo combinado de 7.1 l/100km es razonable para un vehículo de su tamaño y época, lo que lo convierte en un compañero de viaje eficiente y agradable.
Diseño y estética
El diseño del Toyota RAV4 D4-D 5p Luna de 2000 es un equilibrio entre robustez y funcionalidad. Sus líneas exteriores, aunque propias de su tiempo, transmiten una sensación de solidez y aventura. Con una longitud de 4245 mm y una altura de 1680 mm, su presencia en la carretera es imponente. El interior, con capacidad para cinco ocupantes, destaca por su amplitud y la calidad de sus acabados, pensados para resistir el paso del tiempo. El maletero de 400 litros ofrece suficiente espacio para el equipaje, haciendo de este RAV4 un vehículo práctico para el día a día y para viajes familiares. Los detalles como los neumáticos 215/70 R16 H y las llantas de 6.5 x 16 pulgadas refuerzan su carácter todoterreno, sin sacrificar la elegancia.
Tecnología y características
En el año 2000, el Toyota RAV4 D4-D incorporaba tecnología avanzada para su segmento. Su motor diésel de 1995 cc, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La tracción integral permanente (AWD) garantizaba una excelente capacidad de tracción en diferentes superficies, mientras que la dirección de cremallera ofrecía una respuesta precisa. Aunque carecía de algunas de las asistencias electrónicas modernas, su configuración mecánica estaba diseñada para ofrecer una experiencia de conducción segura y controlada. Los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros aseguraban una frenada eficaz, contribuyendo a la seguridad general del vehículo.
Competencia
En su momento, el Toyota RAV4 D4-D 5p Luna compitió con otros SUV compactos que buscaban un equilibrio entre capacidad todoterreno y uso urbano. Entre sus principales rivales se encontraban modelos como el Honda CR-V, el Nissan X-Trail y el Land Rover Freelander. El RAV4 se distinguía por su reputación de fiabilidad, su motor diésel eficiente y su tracción integral, que le otorgaban una ventaja en términos de durabilidad y versatilidad frente a algunos de sus competidores. Su diseño distintivo y su buen comportamiento dinámico también lo posicionaban favorablemente en el mercado.
Conclusión
El Toyota RAV4 D4-D 5p Luna de 2000 es un vehículo que ha dejado una huella imborrable en la historia de los SUV. Su combinación de un motor diésel robusto y eficiente, tracción integral, un diseño funcional y una fiabilidad legendaria lo convierten en una opción muy interesante, incluso hoy en día, para quienes buscan un coche versátil y duradero. Es un testimonio de la ingeniería japonesa, capaz de ofrecer una experiencia de conducción satisfactoria y un rendimiento consistente a lo largo del tiempo. Un coche que, sin duda, sigue siendo una elección inteligente para aquellos que valoran la calidad y la aventura.




