Especificaciones y análisis del Toyota Land Cruiser
Potencia
204CV
Par
510Nm
Consumo
9l/100
Emisiones
238g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
175km/h
Peso
2035kg
Precio
48,000€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 5v
AWD
8 / 5 puertas
620 L
87 L
150 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Toyota Land Cruiser 5p VX D-4D 204cv Aut. (2008-2009)
Descripción general
El Toyota Land Cruiser de 2003, en su versión de 5 puertas VX D-4D con 204 CV y transmisión automática, es un vehículo que encarna la robustez y la aventura. Con un precio de 48.000 euros en su lanzamiento, este todoterreno se posicionó como una opción formidable para quienes buscaban fiabilidad y capacidad tanto en carretera como fuera de ella. Su motor diésel de 3.0 litros y 204 CV, junto con su tracción integral, prometía un rendimiento excepcional en cualquier situación, consolidando su reputación como un icono de la ingeniería japonesa.
Experiencia de conducción
Conducir el Land Cruiser de 2003 es una experiencia que transmite una sensación de seguridad y dominio. Su motor diésel de 204 CV ofrece una respuesta contundente, con un par motor de 510 Nm que se siente desde bajas revoluciones, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 10.9 segundos. La transmisión automática de 5 velocidades gestiona la potencia con suavidad, aunque con la contundencia necesaria para mover sus 2035 kg de peso. En carretera, su suspensión de paralelogramo deformable delantera y eje rígido trasero, junto con los estabilizadores, proporciona una marcha cómoda y estable, absorbiendo las irregularidades del terreno con aplomo. Fuera del asfalto, su tracción AWD y su generosa altura libre al suelo lo convierten en un auténtico devorador de obstáculos, infundiendo confianza al conductor en los terrenos más desafiantes. La dirección de cremallera, aunque no es la más directa, ofrece la precisión suficiente para maniobrar este gigante con facilidad.
Diseño y estética
El diseño del Toyota Land Cruiser de 2003 es una declaración de intenciones: robustez y funcionalidad. Sus líneas son musculosas y atemporales, con una presencia imponente que denota su capacidad todoterreno. La carrocería de 5 puertas, con una longitud de 4715 mm y una anchura de 1875 mm, ofrece un espacio interior generoso y una gran versatilidad. Los detalles exteriores, como los faros y la parrilla, reflejan la estética de la época, con un enfoque en la durabilidad y la resistencia. El interior, aunque no ostentoso, está diseñado para ser práctico y confortable, con capacidad para hasta 8 ocupantes y un maletero de 620 litros, lo que lo convierte en un compañero ideal para viajes largos y aventuras familiares. La calidad de los materiales y los acabados, aunque sencillos, están pensados para soportar el paso del tiempo y el uso intensivo.
Tecnología y características
En el corazón del Land Cruiser de 2003 late un motor diésel de 2982 cc con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, una configuración que maximiza la eficiencia y el rendimiento. Sus 204 CV y 510 Nm de par motor se gestionan a través de una transmisión automática de 5 velocidades que distribuye la potencia a las cuatro ruedas mediante un sistema de tracción integral permanente. Aunque no cuenta con las últimas innovaciones tecnológicas de los vehículos actuales, su ingeniería se centra en la fiabilidad y la capacidad todoterreno. Los frenos de disco ventilados en ambos ejes (338 mm delante y 312 mm detrás) garantizan una frenada eficaz, mientras que la suspensión robusta y los neumáticos 265/65 R17 aseguran un agarre óptimo en diversas superficies. Su consumo combinado de 9 l/100km y emisiones de CO2 de 238 g/km lo sitúan en la categoría B de la DGT, reflejando su naturaleza de vehículo potente y capaz.
Competencia
En su segmento, el Toyota Land Cruiser de 2003 se enfrentaba a competidores de la talla del Mitsubishi Montero, el Nissan Patrol y el Land Rover Discovery. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, pero el Land Cruiser destacaba por su legendaria fiabilidad, su equilibrio entre capacidad todoterreno y confort en carretera, y su robustez general. Mientras que algunos rivales podían ofrecer un mayor lujo o una estética más moderna, el Land Cruiser se mantenía fiel a su esencia de vehículo utilitario y aventurero, ganándose la lealtad de sus propietarios gracias a su durabilidad y su capacidad para afrontar cualquier desafío.
Conclusión
El Toyota Land Cruiser de 2003, en su configuración VX D-4D de 204 CV, es mucho más que un simple todoterreno; es un compañero de aventuras, un vehículo que inspira confianza y que está diseñado para durar. Su combinación de un motor potente y fiable, una transmisión automática suave, un diseño robusto y un interior espacioso lo convierten en una opción excepcional para aquellos que buscan un vehículo capaz de llevarlos a cualquier parte, con la tranquilidad de saber que pueden confiar en él. Es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo un referente en su categoría, un testimonio de la ingeniería y la filosofía de Toyota.