Toyota Avensis 1.6 SD Luna · 110 CV (1998-2000)

1997
Gasolina
FWD
Manual 5v
Toyota Avensis - Vista 1
Toyota Avensis - Vista 2
Toyota Avensis - Vista 3
Toyota Avensis - Vista 4

Especificaciones y análisis del Toyota Avensis

Potencia

110CV

Par

145Nm

Consumo

7.7l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11.7s

Vel. Máx.

195km/h

Peso

1195kg

Precio

16,955

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

60 L

Potencia

81 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima110 CV / 81 kW
Par máximo145 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Toyota Avensis 1.6 SD Luna · 110 CV (1998-2000)

Descripción general

El Toyota Avensis 1.6 SD Luna de 1997 es un sedán que marcó una época, ofreciendo una propuesta equilibrada y fiable para las familias. Con su motor de gasolina de 110 CV y una transmisión manual de 5 velocidades, se presentaba como una opción sensata y duradera en el segmento de las berlinas medias.

Experiencia de conducción

Al volante del Avensis, la sensación predominante es de confort y suavidad. Su motor de 1.6 litros, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 110 CV de manera lineal y predecible, ideal para una conducción tranquila y sin sobresaltos. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.7 segundos y una velocidad máxima de 195 km/h demuestran que, si bien no es un deportivo, cumple con creces para el día a día y los viajes largos. La suspensión tipo McPherson en ambos ejes contribuye a un rodar cómodo, absorbiendo bien las irregularidades del camino, lo que lo convierte en un compañero agradable para cualquier trayecto. La dirección, aunque carece de la inmediatez de modelos más modernos, es precisa y facilita las maniobras.

Diseño y estética

El diseño del Toyota Avensis de 1997 es un reflejo de la sobriedad y funcionalidad que caracterizaba a la marca en esa época. Sus líneas son limpias y atemporales, sin estridencias, buscando la elegancia discreta. Con una longitud de 4490 mm, una anchura de 1710 mm y una altura de 1430 mm, ofrece una presencia equilibrada en la carretera. El interior, aunque no destaca por lujos, está bien resuelto, con materiales duraderos y un diseño ergonómico que prioriza la facilidad de uso. El maletero de 500 litros es generoso, lo que lo hace muy práctico para el uso familiar.

Tecnología y características

En su momento, el Avensis 1.6 SD Luna incorporaba la tecnología necesaria para ofrecer una experiencia de conducción segura y eficiente. Su motor de gasolina de 1587 cc con inyección indirecta y 4 válvulas por cilindro, junto con una relación de compresión de 9.5, garantizaba un rendimiento óptimo para su categoría. La transmisión manual de 5 velocidades era la norma, ofreciendo un control directo sobre la potencia. En cuanto a seguridad, los frenos de disco ventilados delanteros y de tambor traseros, junto con la suspensión bien calibrada, proporcionaban una frenada adecuada y una buena estabilidad. Aunque carecía de las ayudas electrónicas modernas, su construcción sólida y su diseño pensado en la seguridad pasiva lo convertían en un coche fiable.

Competencia

En el competitivo segmento de las berlinas medias de finales de los 90, el Toyota Avensis se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Opel Vectra y el Renault Laguna. Frente a ellos, el Avensis destacaba por su reputación de fiabilidad inquebrantable y su enfoque en la durabilidad y el confort, ofreciendo una alternativa sólida y sin complicaciones para aquellos que buscaban un coche para muchos años.

Conclusión

El Toyota Avensis 1.6 SD Luna de 1997 es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo un testimonio de la ingeniería japonesa enfocada en la durabilidad y la funcionalidad. Es un vehículo que no busca impresionar con lujos o prestaciones extremas, sino que se centra en ofrecer un transporte fiable, cómodo y espacioso para la familia. Su consumo combinado de 7.7 l/100km lo hacía eficiente para su época, y su diseño atemporal le permite envejecer con dignidad. Es una elección excelente para quien valora la tranquilidad y la longevidad en un automóvil.