Especificaciones y análisis del TATA Grand Safari
Potencia
115CV
Par
300Nm
Consumo
8.6l/100
Emisiones
232g/km
0-100 km/h
-s
Vel. Máx.
160km/h
Peso
2225kg
Precio
20,565€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
AWD
5 / 5 puertas
- L
65 L
84.6 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del TATA Grand Safari 3.0 CRD 4x4 Full Equip · 115 CV (2006-2008)
Descripción general
El Tata Grand Safari de 2006, en su versión 3.0 CRD 4x4 Full Equip, se presenta como una opción robusta y sin pretensiones para aquellos que buscan un vehículo todoterreno auténtico. Con un precio de 20.565 €, este modelo ofrecía una propuesta de valor interesante en su segmento, destacando por su capacidad para afrontar terrenos difíciles y su equipamiento completo para la época. Su motor diésel de 115 CV y su tracción integral lo posicionaban como un compañero fiable para la aventura, aunque sin las sofisticaciones de sus competidores europeos o japoneses.
Experiencia de conducción
Al volante del Grand Safari, la sensación predominante es la de conducir un vehículo con carácter. Su motor diésel de 3.0 litros, con 115 CV y un par motor de 300 Nm a 1800 rpm, ofrece una respuesta contundente desde bajas revoluciones, ideal para superar obstáculos o remolcar. La caja de cambios manual de 5 velocidades, aunque no es la más precisa, cumple su función. La suspensión, con paralelogramo deformable delante y eje rígido detrás, junto a los estabilizadores en ambos ejes, proporciona una buena absorción de irregularidades, aunque el confort en carretera no es su punto fuerte. La dirección de cremallera, sin asistencia variable, requiere un mayor esfuerzo en maniobras a baja velocidad. Su velocidad máxima de 160 km/h y la ausencia de datos de aceleración de 0 a 100 km/h sugieren que su enfoque no es la velocidad, sino la capacidad off-road. El consumo combinado de 8.6 l/100km es razonable para un vehículo de su tamaño y capacidades.
Diseño y estética
El diseño del Tata Grand Safari de 2006 es funcional y robusto, reflejando su propósito como todoterreno. Sus líneas son cuadradas y musculosas, con una altura considerable de 1925 mm que le confiere una presencia imponente. Los pasos de rueda marcados y las protecciones inferiores sugieren su aptitud para el off-road. El interior, aunque no destaca por sus materiales de lujo, es espacioso y práctico, con capacidad para 5 ocupantes. La estética general es sencilla y sin florituras, priorizando la durabilidad y la funcionalidad sobre la sofisticación. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 235/70 R16 complementan su imagen aventurera.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Tata Grand Safari de 2006 se mantiene fiel a una filosofía más tradicional. Su motor diésel de inyección directa por conducto común, turbo e intercooler, es una solución probada y eficiente para la época. La tracción integral (AWD) es un elemento clave para sus capacidades todoterreno. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y de tambor traseros, una configuración estándar para vehículos de su segmento. No incorpora sistemas avanzados de asistencia a la conducción, centrándose en lo esencial para un todoterreno puro. El equipamiento 'Full Equip' se refiere más a elementos de confort y conveniencia que a innovaciones tecnológicas de vanguardia.
Competencia
En el mercado de 2006, el Tata Grand Safari competía con otros todoterrenos de corte más rudo y precios ajustados. Sus principales rivales podrían incluir modelos como el SsangYong Rexton, el Lada Niva o incluso versiones más básicas de vehículos como el Mitsubishi Montero o el Nissan Patrol. Frente a ellos, el Grand Safari ofrecía un equilibrio entre precio, equipamiento y capacidades off-road, aunque quizás con un menor refinamiento general y una imagen de marca menos consolidada en algunos mercados.
Conclusión
El Tata Grand Safari 3.0 CRD 4x4 Full Equip de 2006 es un vehículo que cumple lo que promete: un todoterreno robusto, capaz y con un precio accesible. No busca competir en lujo o sofisticación, sino en fiabilidad y aptitud para el trabajo duro y la aventura fuera del asfalto. Su motor diésel ofrece la fuerza necesaria, y su diseño funcional refleja su propósito. Es una opción ideal para quienes valoran la practicidad y la capacidad off-road por encima de las últimas tendencias tecnológicas o el confort de marcha en carretera. Un coche honesto para un público que sabe lo que busca.




