Suzuki Samurai Gasolina T. lona Lujo · 69 CV (1998-2001)

1998
Gasolina
AWD
Manual 5v
Suzuki Samurai - Vista 1
Suzuki Samurai - Vista 2
Suzuki Samurai - Vista 3
Suzuki Samurai - Vista 4

Especificaciones y análisis del Suzuki Samurai

Potencia

69CV

Par

103Nm

Consumo

8.5l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

-s

Vel. Máx.

130km/h

Peso

955kg

Precio

9,976

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

AWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

- L

Depósito

40 L

Potencia

51 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima69 CV / 51 kW
Par máximo103 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito40 L
Maletero0 L

Análisis detallado del Suzuki Samurai Gasolina T. lona Lujo · 69 CV (1998-2001)

Descripción general

El Suzuki Samurai de 1998, en su versión de lona y acabado Lujo, es un vehículo que evoca una época de aventura y simplicidad. Con su motor de gasolina de 1.3 litros y 69 CV, este todoterreno compacto se presentaba como una opción accesible y robusta para quienes buscaban escapar del asfalto. Su diseño sin pretensiones y su capacidad para sortear terrenos difíciles lo convirtieron en un icono, un compañero fiel para explorar caminos inexplorados y disfrutar de la libertad al aire libre.

Experiencia de conducción

Conducir un Suzuki Samurai es una experiencia visceral y auténtica. La dirección de recirculación de bolas, aunque precisa, requiere un esfuerzo consciente, conectándote directamente con la carretera o el sendero. La suspensión de eje rígido en ambos trenes, sin estabilizadoras, transmite cada imperfección del terreno, pero a cambio ofrece una robustez inigualable y una capacidad todoterreno sorprendente. El motor, aunque modesto en potencia, entrega su par a bajas revoluciones, permitiendo superar obstáculos con determinación. La velocidad máxima de 130 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h no especificada, sugieren que su hábitat natural no son las autopistas, sino los caminos secundarios y las pistas de tierra. La capota de lona añade un toque de aventura, permitiendo disfrutar del viento y el sol, pero también exponiendo a los ocupantes a los elementos y al ruido del motor. Es un coche que te hace sentir vivo, que te invita a la aventura y te recompensa con una conexión genuina con el entorno.

Diseño y estética

El diseño del Suzuki Samurai es puramente funcional y atemporal. Sus líneas cuadradas y compactas, con una longitud de 3470 mm y una anchura de 1530 mm, lo hacen ágil y fácil de maniobrar en espacios reducidos. La versión de lona, con sus tres puertas y cuatro plazas, enfatiza su carácter lúdico y aventurero. Los neumáticos 205/70 R15 Q, montados en llantas de 6x15, le otorgan una presencia robusta y una buena tracción. El diseño interior es espartano, centrado en la durabilidad y la facilidad de limpieza, con los elementos esenciales al alcance de la mano. No busca la sofisticación, sino la practicidad y la resistencia, reflejando su propósito como un vehículo de trabajo y ocio.

Tecnología y características

La tecnología del Suzuki Samurai de 1998 es sencilla y probada. Su motor de gasolina de 1.3 litros, con inyección indirecta y 69 CV, es un bloque de aluminio con culata de aluminio, diseñado para ser fiable y fácil de mantener. La transmisión manual de cinco velocidades, combinada con la tracción total (AWD), le confiere una excelente capacidad todoterreno. Los frenos de disco delanteros y de tambor traseros, junto con la dirección de recirculación de bolas, son componentes mecánicos robustos y eficaces para su peso y prestaciones. No hay lujos electrónicos ni asistencias a la conducción, lo que lo convierte en un coche donde la habilidad del conductor es primordial. Su tecnología se centra en la durabilidad y la funcionalidad en entornos exigentes.

Competencia

En su época, el Suzuki Samurai competía con otros todoterrenos compactos y económicos, aunque pocos ofrecían su combinación de ligereza, agilidad y capacidad off-road. Rivales como el Lada Niva compartían una filosofía similar de robustez y simplicidad, aunque el Samurai destacaba por su mayor fiabilidad y una imagen más juvenil. Otros vehículos como el Daihatsu Feroza o el Jeep Wrangler (en sus versiones más básicas) se posicionaban en un segmento ligeramente superior en precio y prestaciones, pero el Samurai mantenía su nicho como el todoterreno más accesible y divertido para el uso recreativo y el trabajo ligero en el campo.

Conclusión

El Suzuki Samurai de 1998 es mucho más que un simple coche; es una declaración de intenciones. Es un vehículo que te invita a desconectar de la rutina y a conectar con la naturaleza. Su simplicidad mecánica, su robustez inquebrantable y su capacidad todoterreno lo convierten en un clásico atemporal, apreciado por aquellos que valoran la autenticidad y la aventura por encima de la comodidad y la sofisticación. Aunque no es el coche más rápido ni el más refinado, su encanto reside precisamente en su carácter indomable y en la libertad que ofrece. Es un coche para disfrutar, para explorar y para crear recuerdos inolvidables.