Especificaciones y análisis del Subaru Legacy
Potencia
137CV
Par
187Nm
Consumo
7.7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.5s
Vel. Máx.
193km/h
Peso
1450kg
Precio
25,225€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
AWD
5 / 5 puertas
459 L
64 L
101 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Subaru Legacy 2.0i SW · 137 CV (2004-2005)
Descripción general
El Subaru Legacy 2.0i SW de 2004 es un familiar que, a primera vista, podría pasar desapercibido, pero esconde una propuesta de valor muy interesante para quienes buscan algo más que un simple coche. Con su tracción integral permanente y un motor bóxer de gasolina, este Legacy se posiciona como una alternativa robusta y fiable, ideal para afrontar cualquier tipo de carretera y condición climática. Su precio de 25.225 € en su momento lo situaba en un segmento competitivo, ofreciendo una combinación de practicidad, seguridad y un toque de exclusividad que pocos rivales podían igualar.
Experiencia de conducción
Al volante del Legacy 2.0i SW, la sensación de seguridad es inmediata. La tracción integral AWD de Subaru proporciona un agarre excepcional, transmitiendo una confianza inquebrantable tanto en curvas como en superficies deslizantes. El motor bóxer de 137 CV, aunque no es un derroche de potencia, ofrece una entrega suave y progresiva, con un sonido característico que añade un toque de personalidad. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.5 segundos y una velocidad máxima de 193 km/h son cifras adecuadas para un uso familiar, permitiendo adelantamientos seguros y viajes cómodos. La suspensión, tipo McPherson en ambos ejes, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un buen equilibrio entre confort y estabilidad. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, es precisa y comunica bien lo que sucede bajo las ruedas. En definitiva, es un coche que invita a disfrutar de la carretera con tranquilidad y control.
Diseño y estética
El diseño del Subaru Legacy SW de 2004 es funcional y discreto, sin grandes alardes estéticos, pero con una elegancia atemporal. Sus líneas son limpias y proporcionadas, con una silueta familiar que prioriza la habitabilidad y la capacidad de carga. Los faros delanteros, de tamaño generoso, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la parrilla, con el logo de Subaru en el centro, le confiere una identidad clara. En la parte trasera, los pilotos se extienden hacia los laterales, enfatizando la anchura del vehículo. El interior, aunque sobrio, está bien resuelto, con materiales de calidad y un diseño ergonómico que facilita el acceso a los mandos. La habitabilidad es buena tanto en las plazas delanteras como en las traseras, y el maletero de 459 litros es muy aprovechable, ideal para las necesidades de una familia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Subaru Legacy 2.0i SW de 2004 se centra en la funcionalidad y la fiabilidad. Su motor bóxer de 1994 cc, con 4 cilindros y 4 válvulas por cilindro, destaca por su bajo centro de gravedad, lo que contribuye a la estabilidad del vehículo. La inyección indirecta y una relación de compresión de 10:1 son características de una mecánica probada y eficiente. La transmisión manual de 5 velocidades, combinada con la tracción integral permanente, es el corazón de su sistema de propulsión, garantizando una distribución óptima de la fuerza en todo momento. En cuanto a frenos, equipa discos ventilados de 277 mm delante y discos de 274 mm detrás, asegurando una frenada eficaz. Aunque no cuenta con las últimas innovaciones en infoentretenimiento o asistentes a la conducción que vemos hoy en día, su tecnología se enfoca en lo esencial: un rendimiento mecánico sólido y una seguridad activa de primer nivel gracias a su tracción integral.
Competencia
En su época, el Subaru Legacy 2.0i SW se enfrentaba a rivales de peso en el segmento de los familiares, como el Volkswagen Passat Variant, el Audi A4 Avant, el Ford Mondeo Sportbreak o el Opel Vectra Caravan. Sin embargo, el Legacy se desmarcaba de la competencia por su distintiva tracción integral permanente, una característica que pocos de sus rivales ofrecían de serie en esta categoría y que le otorgaba una ventaja clara en condiciones de baja adherencia. Mientras que otros se centraban más en el lujo o la deportividad, el Legacy apostaba por la robustez, la seguridad y una capacidad todoterreno ligera, lo que lo convertía en una opción muy atractiva para quienes vivían en zonas con climas adversos o buscaban un coche versátil para actividades al aire libre.
Conclusión
El Subaru Legacy 2.0i SW de 2004 es un coche que, a pesar de su discreción estética, ofrece una experiencia de conducción muy gratificante y segura. Su combinación de motor bóxer, tracción integral permanente y una carrocería familiar lo convierte en un vehículo extremadamente versátil y fiable. Es la elección perfecta para aquellos que valoran la seguridad, la durabilidad y la capacidad de afrontar cualquier desafío en la carretera, sin renunciar a la comodidad y el espacio. Un coche honesto, bien construido y con un carácter propio que lo distingue de la multitud.