Especificaciones y análisis del Skoda Superb
Potencia
105CV
Par
250Nm
Consumo
5.8l/100
Emisiones
157g/km
0-100 km/h
12.3s
Vel. Máx.
192km/h
Peso
1540kg
Precio
23,170€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
462 L
62 L
77 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Skoda Superb 1.9 TDI 105 CV Confort (2005-2006)
Descripción general
El Skoda Superb de 2002, en su versión 1.9 TDI de 105 CV con acabado Confort, se presenta como una berlina que, aunque discreta en su apariencia, esconde un interior sorprendentemente espacioso y un enfoque práctico. Este modelo, que se mantuvo en producción entre 2005 y 2006, ofrecía una alternativa sensata y económica en el segmento de las berlinas medias, destacando por su robustez y su motor diésel de probada eficiencia.
Experiencia de conducción
Al volante del Superb 1.9 TDI de 105 CV, la sensación predominante es de solidez y confort. El motor, aunque no es un derroche de potencia, cumple con creces para un uso diario y viajes largos, ofreciendo un par motor de 250 Nm a 1900 rpm que permite una respuesta adecuada en la mayoría de situaciones. La aceleración de 0 a 100 km/h en 12.3 segundos y una velocidad máxima de 192 km/h no lo convierten en un deportivo, pero sí en un coche capaz de mantener ritmos de crucero elevados con aplomo. La suspensión, con paralelogramo deformable delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, junto a las barras estabilizadoras, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje suave y relajado. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, ofrece una buena conexión con la carretera. El consumo combinado de 5.8 l/100km es uno de sus puntos fuertes, haciendo de este Superb un compañero de viaje económico y fiable.
Diseño y estética
El diseño del Skoda Superb de 2002 es un reflejo de la filosofía de la marca en aquella época: funcional y sin estridencias. Con una longitud de 4803 mm y una anchura de 1765 mm, su silueta es clásica de berlina, con líneas limpias y una presencia sobria. El frontal, con sus faros alargados y la parrilla característica de Skoda, transmite una imagen de seriedad. La parte trasera, con pilotos discretos, completa un conjunto que, si bien no busca la espectacularidad, sí proyecta una imagen de coche bien construido y duradero. El interior, con un diseño igualmente funcional, destaca por la amplitud, especialmente en las plazas traseras, y por la calidad de los materiales, que aunque no son lujosos, sí son resistentes y agradables al tacto. El maletero, con 462 litros, es generoso y muy aprovechable.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Skoda Superb 1.9 TDI de 2002 se centra en la fiabilidad y la eficiencia. Su motor diésel de 1.9 litros, con inyección directa por bomba inyector, turbo de geometría variable e intercooler, es un propulsor ampliamente conocido y valorado por su durabilidad y bajo consumo. La transmisión manual de 5 velocidades, con un embrague monodisco en seco, es robusta y precisa. Aunque carece de las últimas innovaciones en infoentretenimiento o asistentes a la conducción que encontramos hoy en día, su equipamiento Confort incluía lo necesario para un viaje agradable, como aire acondicionado, elevalunas eléctricos y un sistema de sonido funcional. La seguridad pasiva estaba garantizada por una estructura sólida y los sistemas de frenado con discos ventilados delanteros y discos traseros, junto con los sistemas de seguridad activa de la época.
Competencia
En su momento, el Skoda Superb 1.9 TDI de 105 CV se enfrentaba a rivales de peso en el segmento de las berlinas medias, como el Volkswagen Passat, con el que compartía plataforma y muchos componentes mecánicos, el Opel Vectra, el Ford Mondeo o el Peugeot 406. Frente a ellos, el Superb se posicionaba como una opción más económica, pero sin renunciar a la calidad de construcción y al espacio interior. Su motor diésel, aunque menos potente que algunas de sus alternativas, ofrecía una eficiencia de combustible muy competitiva, lo que lo convertía en una opción atractiva para aquellos que buscaban un coche fiable y económico de mantener, con un gran espacio interior y un confort de marcha notable.
Conclusión
El Skoda Superb 1.9 TDI de 105 CV Confort de 2002 es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo una opción muy interesante en el mercado de segunda mano. Su combinación de un motor diésel robusto y eficiente, un interior espacioso y confortable, y una calidad de construcción sólida, lo convierten en una berlina ideal para quienes buscan un vehículo práctico, fiable y económico para el día a día o para largos viajes. No es un coche que enamore por su diseño o sus prestaciones deportivas, pero sí por su honestidad y su capacidad para cumplir con creces su función de transporte, ofreciendo una experiencia de conducción tranquila y segura. Es un coche que, sin grandes alardes, se gana el respeto por su funcionalidad y su durabilidad.