Saab 9-5 2.3t SW Aut. · 170 CV (2000)

2000
Gasolina
FWD
Automático 4v
Saab 9-5 - Vista 1
Saab 9-5 - Vista 2
Saab 9-5 - Vista 3
Saab 9-5 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Saab 9-5

Potencia

170CV

Par

280Nm

Consumo

10.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.5s

Vel. Máx.

215km/h

Peso

1535kg

Precio

35,079

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

416 L

Depósito

75 L

Potencia

125 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima170 CV / 125 kW
Par máximo280 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito75 L
Maletero416 L

Análisis detallado del Saab 9-5 2.3t SW Aut. · 170 CV (2000)

Descripción general

El Saab 9-5 familiar 2.3t SW Aut. del año 2000 es una propuesta que evoca la esencia de la ingeniería sueca, combinando funcionalidad y un toque de distinción. Este vehículo, con su motor de gasolina de 170 CV y transmisión automática de 4 velocidades, se presenta como una opción interesante para quienes buscan un coche familiar con un carácter diferente y una historia rica en innovación.

Experiencia de conducción

Al volante del Saab 9-5 familiar, la sensación es de solidez y confort. Su motor turbo de 2.3 litros entrega una potencia de 170 CV que, aunque no lo convierte en un deportivo, sí le otorga una respuesta enérgica y una capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en 10.5 segundos, suficiente para la mayoría de las situaciones. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no es la más moderna, ofrece transiciones suaves que contribuyen a una conducción relajada. La suspensión, tipo McPherson en la parte delantera, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje placentero. El consumo combinado de 10.4 l/100km es un recordatorio de su época, pero el placer de conducir un Saab compensa este aspecto.

Diseño y estética

El diseño del Saab 9-5 familiar es inconfundiblemente sueco, con líneas limpias y funcionales que priorizan la aerodinámica y la habitabilidad. Su carrocería familiar, con 4808 mm de largo, 1792 mm de ancho y 1497 mm de alto, ofrece un espacio interior generoso y un maletero de 416 litros, ideal para viajes en familia. La estética, aunque sobria, transmite una sensación de robustez y elegancia atemporal. Los detalles, como los faros y la parrilla, reflejan la identidad de la marca, diferenciándolo de sus competidores.

Tecnología y características

En el año 2000, el Saab 9-5 familiar incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. Su motor de gasolina de 2290 cc con inyección indirecta, turbo e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La dirección asistida y los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros garantizaban un control y una seguridad adecuados. Aunque carece de las ayudas a la conducción modernas, su equipamiento de serie ofrecía un nivel de confort y seguridad que lo situaba en la vanguardia de su segmento. La construcción con bloque de hierro y culata de aluminio demuestra una ingeniería pensada para la durabilidad.

Competencia

En su época, el Saab 9-5 familiar competía con modelos de marcas premium como el Volvo V70, el Audi A6 Avant y el Mercedes-Benz Clase E Estate. Frente a ellos, el Saab ofrecía una alternativa con un enfoque más individualista, destacando por su diseño distintivo, su confort de marcha y su reputación en seguridad. Aunque quizás no alcanzaba el mismo nivel de lujo o la misma variedad de motorizaciones que algunos de sus rivales alemanes, el Saab 9-5 se ganaba a sus seguidores por su carácter único y su compromiso con la innovación.

Conclusión

El Saab 9-5 familiar 2.3t SW Aut. del año 2000 es más que un simple coche; es una declaración de intenciones. Representa una época en la que la ingeniería sueca se atrevía a ser diferente, ofreciendo vehículos con personalidad, confort y una seguridad inherente. Aunque sus cifras de consumo y aceleración pueden parecer modestas hoy en día, su encanto reside en la experiencia de conducción, en la calidad de sus materiales y en la sensación de poseer un pedazo de historia automotriz. Es un coche para quienes valoran la originalidad y la funcionalidad sin renunciar a un toque de distinción.