Especificaciones y análisis del Saab 9-5
Potencia
170CV
Par
280Nm
Consumo
10.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.5s
Vel. Máx.
215km/h
Peso
1510kg
Precio
38,114€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
5 / 5 puertas
416 L
75 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Saab 9-5 SE 2.3t SW Aut. · 170 CV (2000)
Descripción general
El Saab 9-5 familiar de 2000, en su versión SE 2.3t SW Aut., es un vehículo que evoca una época dorada de la ingeniería sueca. Con su motor de gasolina de 170 CV y transmisión automática de 4 velocidades, este familiar no solo prometía espacio y confort, sino también un toque de distinción y seguridad que pocos rivales podían igualar. Su precio de 38.114 € en su lanzamiento lo posicionaba en un segmento premium, ofreciendo una alternativa diferente a las berlinas familiares alemanas.
Experiencia de conducción
Al volante del Saab 9-5, la sensación es de solidez y aplomo. El motor 2.3t, con sus 170 CV y un par motor de 280 Nm disponible desde las 1800 rpm, ofrece una respuesta contundente y progresiva, ideal para viajes largos y adelantamientos seguros. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no es la más rápida, contribuye a una conducción suave y relajada. La suspensión McPherson delantera y la trasera, aunque no especificada en detalle, junto con las barras estabilizadoras, proporcionan un buen equilibrio entre confort y estabilidad. La velocidad máxima de 215 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 10.5 segundos demuestran que, a pesar de su tamaño, el 9-5 no carece de brío. El consumo combinado de 10.4 l/100km es razonable para un coche de su época y características.
Diseño y estética
El diseño del Saab 9-5 familiar es inconfundiblemente sueco, con líneas limpias y funcionales que priorizan la aerodinámica y la habitabilidad. Su carrocería de 4808 mm de largo, 1792 mm de ancho y 1497 mm de alto, junto con una distancia entre ejes de 2705 mm, le confieren una presencia imponente y elegante. Las 5 puertas y 5 plazas, junto con un maletero de 416 litros, lo convierten en un coche práctico para la familia. Los neumáticos 215/55 R16 en llantas de 6.5 x 16 pulgadas complementan su estética robusta y segura. El diseño interior, aunque no detallado, se caracterizaba por la ergonomía y la calidad de los materiales, con un enfoque en la seguridad y el confort de los ocupantes.
Tecnología y características
En el año 2000, el Saab 9-5 incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. El motor de gasolina de 2.3 litros con inyección indirecta, turbo e intercooler era un ejemplo de ingeniería eficiente. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque hoy pueda parecer limitada, ofrecía una experiencia de conducción cómoda. En cuanto a seguridad, Saab siempre fue pionero, y el 9-5 no era una excepción, con sistemas de frenado de disco ventilado en el eje delantero y disco en el trasero, y una dirección asistida que facilitaba las maniobras. Aunque no se especifican los sistemas de seguridad activa y pasiva, es de esperar que incluyera airbags y ABS, elementos ya comunes en vehículos de su categoría.
Competencia
En su segmento, el Saab 9-5 familiar competía con modelos como el Volvo V70, el Audi A6 Avant, el BMW Serie 5 Touring y el Mercedes-Benz Clase E Estate. Frente a ellos, el Saab ofrecía una alternativa con un enfoque más individualista, destacando por su seguridad, su diseño distintivo y su motorización turboalimentada. Mientras que los rivales alemanes se centraban en la deportividad o el lujo más tradicional, el Saab apelaba a un público que valoraba la innovación, la funcionalidad y una cierta excentricidad escandinava.
Conclusión
El Saab 9-5 familiar de 2000 es un coche que, a pesar de los años, sigue manteniendo un encanto especial. Es un testimonio de la filosofía de Saab: vehículos seguros, innovadores y con un carácter propio. Su combinación de un motor potente y eficiente, un diseño práctico y elegante, y un confort de marcha notable lo convierten en una opción interesante para quienes buscan un clásico moderno con un toque diferente. Aunque su consumo no es el más bajo y su transmisión automática de 4 velocidades puede parecer anticuada, su fiabilidad y la experiencia de conducción que ofrece compensan estos aspectos. Es un coche para disfrutar de los viajes, con espacio para toda la familia y la seguridad que siempre caracterizó a la marca sueca.




