Saab 9-5 Aero 2.3 TS · 230 CV (2000-2001)

2000
Gasolina
FWD
Manual 5v
Saab 9-5 - Vista 1
Saab 9-5 - Vista 2
Saab 9-5 - Vista 3
Saab 9-5 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Saab 9-5

Potencia

230CV

Par

350Nm

Consumo

8.1l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

6.9s

Vel. Máx.

247km/h

Peso

1520kg

Precio

38,176

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

75 L

Potencia

169 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima230 CV / 169 kW
Par máximo350 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito75 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Saab 9-5 Aero 2.3 TS · 230 CV (2000-2001)

Descripción general

El Saab 9-5 Aero 2.3 TS del año 2000 es una berlina que encarna la esencia de la marca sueca: seguridad, innovación y un toque de deportividad. Con su motor de 230 CV, este modelo prometía una experiencia de conducción emocionante y distintiva, alejada de las propuestas más convencionales de la época. Se posicionaba como una alternativa sofisticada para aquellos que buscaban algo más que un simple medio de transporte, un coche con carácter y una personalidad inconfundible.

Experiencia de conducción

Al volante del Saab 9-5 Aero, la sensación es de control y potencia contenida. El motor 2.3 TS, con su turbo, entrega una aceleración contundente, pasando de 0 a 100 km/h en solo 6.9 segundos, lo que para una berlina de su tamaño y año era realmente impresionante. La dirección, aunque no es la más comunicativa, ofrece precisión, y la suspensión, tipo McPherson en el eje delantero, proporciona un buen equilibrio entre confort y estabilidad. Es un coche que invita a disfrutar de la carretera, con un aplomo notable y una capacidad de respuesta que sorprende. La caja de cambios manual de 5 velocidades permite exprimir al máximo el potencial del motor, haciendo cada adelantamiento una tarea sencilla y gratificante. Es un coche que te hace sentir seguro y capaz, con una pisada firme y un sonido de motor que, sin ser estridente, acompaña la experiencia con una nota deportiva.

Diseño y estética

El diseño del Saab 9-5 Aero es un reflejo de la filosofía de la marca: elegante, funcional y con un toque de originalidad. Sus líneas son fluidas y aerodinámicas, con una silueta que, a pesar de los años, mantiene una presencia distinguida. Los faros, con su característica forma, y la parrilla frontal, le otorgan una identidad inconfundible. En el interior, la ergonomía es clave, con un salpicadero orientado al conductor y una disposición de los mandos intuitiva. Los materiales, aunque no siempre los más lujosos, son de buena calidad y el ensamblaje es robusto. El espacio interior es generoso, tanto en las plazas delanteras como en las traseras, y el maletero de 500 litros es muy práctico para el día a día o para viajes largos. Es un diseño que prioriza la funcionalidad sin renunciar a la estética, un coche que envejece con dignidad.

Tecnología y características

En el año 2000, el Saab 9-5 Aero incorporaba tecnología avanzada para su segmento. El motor 2.3 TS con inyección indirecta, turbo e intercooler era un ejemplo de ingeniería, ofreciendo una potencia considerable con una entrega de par de 350 Nm a solo 1900 rpm, lo que se traducía en una gran elasticidad. La tracción delantera y la caja de cambios manual de 5 velocidades eran la configuración estándar. En cuanto a seguridad, Saab siempre fue pionera, y este modelo no era una excepción, con sistemas de frenado de disco ventilado en el eje delantero y disco en el trasero, y una estructura de carrocería diseñada para proteger a los ocupantes. Aunque no contaba con las pantallas táctiles y la conectividad de los coches actuales, su tecnología se centraba en la mecánica y la seguridad activa y pasiva, elementos que eran punteros en su momento.

Competencia

En su época, el Saab 9-5 Aero 2.3 TS competía con berlinas premium de marcas como BMW, Mercedes-Benz y Audi. Modelos como el BMW Serie 5, el Mercedes-Benz Clase E o el Audi A6 eran sus principales adversarios. Sin embargo, el Saab ofrecía una alternativa con un carácter más distintivo y una filosofía diferente. Mientras que sus rivales alemanes apostaban por una imagen más tradicional y un enfoque más directo en el lujo o la deportividad pura, el Saab combinaba un rendimiento notable con una personalidad más excéntrica y un énfasis en la seguridad y la innovación práctica. Era el coche para aquellos que querían salirse de lo establecido sin renunciar a las prestaciones y la calidad.

Conclusión

El Saab 9-5 Aero 2.3 TS del año 2000 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un referente de lo que Saab representaba: una marca con alma, que ofrecía vehículos con un carácter único y una ingeniería sólida. Es una berlina potente, segura y con un diseño atemporal que aún hoy atrae miradas. Para los amantes de la conducción y de los coches con personalidad, este modelo es una joya que ofrece una experiencia diferente y gratificante. Es un coche que te invita a disfrutar de cada viaje, a sentir la carretera y a apreciar la ingeniería que hay detrás de cada detalle. Un verdadero clásico moderno que merece ser recordado y, si es posible, conducido.