Especificaciones y análisis del Rover 45
Potencia
103CV
Par
123Nm
Consumo
7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.9s
Vel. Máx.
185km/h
Peso
1105kg
Precio
14,390€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
370 L
55 L
76 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Rover 45 5p 1.4 Comfort (103 CV) · 103 CV (2000-2004)
Descripción general
El Rover 45 de 2000, en su versión 5p 1.4 Comfort de 103 CV, se presenta como una opción que buscaba combinar la elegancia británica con una funcionalidad accesible. Este modelo, con su motor de gasolina de 1.4 litros, ofrecía una propuesta interesante para quienes buscaban un coche compacto pero con cierto aire distinguido en el cambio de milenio.
Experiencia de conducción
Al volante del Rover 45, la sensación es de un coche honesto y sin grandes pretensiones deportivas. Sus 103 CV, gestionados por una caja manual de 5 velocidades, permiten una conducción ágil en entornos urbanos y suficiente para trayectos interurbanos, aunque sin grandes alardes. La suspensión, de paralelogramo deformable tanto delante como detrás, busca un equilibrio entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del asfalto con una dignidad notable para su segmento. La dirección, de cremallera, ofrece una respuesta adecuada, aunque sin la inmediatez de modelos más modernos. En general, es un coche que invita a una conducción relajada, donde el confort prima sobre la deportividad.
Diseño y estética
El diseño del Rover 45 es un claro reflejo de la estética de la marca en la época, con líneas que evocan una elegancia clásica británica. Su carrocería de 4 puertas, con una longitud de 4362 mm, una anchura de 1700 mm y una altura de 1394 mm, le confiere una presencia equilibrada. Los detalles, como los faros y la parrilla, buscan transmitir una imagen de distinción, aunque sin caer en excesos. El interior, aunque funcional, intenta mantener esa atmósfera de sobriedad y buen gusto, con materiales que, para su tiempo, ofrecían una calidad aceptable. Es un diseño que, si bien no revoluciona, sí que aporta un toque de personalidad en un segmento muy competido.
Tecnología y características
En el año 2000, el Rover 45 incorporaba una tecnología que, aunque no puntera, era funcional y cumplía con las expectativas de la época. Su motor de gasolina de 1.4 litros, con inyección indirecta y 103 CV, era un propulsor probado y fiable. La transmisión manual de 5 velocidades era el estándar, ofreciendo un control directo sobre la potencia. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco delanteros de 262 mm y tambores traseros de 203 mm, una configuración común en su segmento. La dirección de cremallera y la suspensión independiente en ambos ejes contribuían a un comportamiento dinámico predecible. No esperemos grandes pantallas táctiles o asistentes a la conducción, sino una tecnología enfocada en la mecánica y la funcionalidad básica.
Competencia
En su momento, el Rover 45 competía en un segmento muy reñido con modelos como el Volkswagen Golf, el Ford Focus, el Opel Astra o el Renault Mégane. Frente a ellos, el Rover 45 intentaba diferenciarse con un toque de elegancia y un confort de marcha que a menudo se asociaba a vehículos de mayor categoría. Si bien no destacaba por su deportividad o por una tecnología de vanguardia, su propuesta de valor residía en una estética más clásica y una experiencia de conducción más suave, buscando atraer a un público que valoraba la distinción por encima de las prestaciones puras.
Conclusión
El Rover 45 5p 1.4 Comfort de 2000 es un coche que, a pesar de los años, mantiene un encanto particular. No es el más rápido, ni el más tecnológico, pero ofrece una experiencia de conducción agradable y un diseño que aún hoy puede resultar atractivo para quienes aprecian la estética clásica. Es un vehículo que, en su momento, buscó un hueco en el mercado ofreciendo una alternativa con un toque de distinción británica. Para aquellos que buscan un coche con carácter y una conducción sin estridencias, el Rover 45 puede ser una opción interesante, siempre y cuando se valoren sus virtudes de confort y diseño por encima de las prestaciones puras.




