Renault Vel Satis Privilege 2.2 dCi 16v · 150 CV (2002-2005)

2002
Gasóleo
FWD
Manual 6v
Renault Vel Satis - Vista 1
Renault Vel Satis - Vista 2
Renault Vel Satis - Vista 3
Renault Vel Satis - Vista 4

Especificaciones y análisis del Renault Vel Satis

Potencia

150CV

Par

320Nm

Consumo

7.1l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.9s

Vel. Máx.

200km/h

Peso

1660kg

Precio

37,350

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

460 L

Depósito

80 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo320 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero460 L

Análisis detallado del Renault Vel Satis Privilege 2.2 dCi 16v · 150 CV (2002-2005)

Descripción general

El Renault Vel Satis Privilege 2.2 dCi 16v de 2002 es una propuesta audaz y diferente en el segmento de las berlinas de lujo. Con un diseño que rompe moldes y una clara apuesta por el confort, este vehículo buscaba ofrecer una experiencia de viaje distinta, alejada de las convenciones de sus competidores alemanes. Su motor diésel de 150 CV prometía un equilibrio entre prestaciones y eficiencia, ideal para largos trayectos.

Experiencia de conducción

Al volante del Vel Satis, la sensación predominante es de calma y aislamiento. La suspensión, orientada al confort, filtra eficazmente las irregularidades del asfalto, proporcionando un viaje suave y relajado. El motor 2.2 dCi, aunque no es un derroche de potencia, mueve el conjunto con solvencia, especialmente en carretera, donde su par motor se hace notar. La dirección, aunque precisa, no busca la deportividad, sino la facilidad de manejo. Es un coche para disfrutar del trayecto, no para buscar los límites en cada curva. El habitáculo es espacioso y luminoso, contribuyendo a una atmósfera de bienestar.

Diseño y estética

El diseño del Renault Vel Satis es, sin duda, su rasgo más distintivo y polarizador. Con sus líneas voluminosas, su elevada altura y su zaga abrupta, se desmarcaba por completo de la estética tradicional de las berlinas de su época. No buscaba la elegancia clásica, sino una presencia imponente y original. El frontal, con sus faros grandes y su parrilla prominente, le otorgaba una personalidad única. En el interior, la amplitud y la calidad de los materiales eran evidentes, con un salpicadero de diseño fluido y asientos generosos que invitaban a la relajación.

Tecnología y características

En su momento, el Vel Satis incorporaba tecnología avanzada para mejorar la seguridad y el confort. Contaba con un completo equipamiento de seguridad activa y pasiva, incluyendo múltiples airbags y sistemas de asistencia a la frenada. En el apartado de confort, ofrecía elementos como el climatizador automático, el sistema de sonido de alta fidelidad y, en esta versión Privilege, tapicerías de calidad y ajustes eléctricos para los asientos. La transmisión manual de 6 velocidades permitía un buen aprovechamiento del motor diésel, contribuyendo a una conducción eficiente.

Competencia

El Renault Vel Satis se enfrentaba a rivales de peso en el segmento de las berlinas de lujo, como el Mercedes-Benz Clase E, el BMW Serie 5 o el Audi A6. Sin embargo, su enfoque era diferente. Mientras sus competidores apostaban por la deportividad y la sobriedad, el Vel Satis ofrecía una alternativa más orientada al confort, la originalidad y un cierto aire de exclusividad francesa. También podría considerarse rival de modelos como el Citroën C6 o el Lancia Thesis, que también buscaban diferenciarse con propuestas de diseño y confort distintivas.

Conclusión

El Renault Vel Satis Privilege 2.2 dCi 16v fue un coche valiente, una declaración de intenciones por parte de Renault para ofrecer algo diferente en un segmento muy competitivo. Su diseño atrevido y su enfoque en el confort lo convirtieron en un vehículo único, aunque no apto para todos los gustos. Para aquellos que buscaban una berlina espaciosa, cómoda y con personalidad, el Vel Satis ofrecía una alternativa muy interesante. Su motor diésel, aunque no destacaba por sus prestaciones puras, cumplía con creces para un uso diario y en carretera, ofreciendo un consumo razonable para su tamaño.