Especificaciones y análisis del Renault Scenic
Potencia
116CV
Par
190Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
135g/km
0-100 km/h
11.7s
Vel. Máx.
185km/h
Peso
1395kg
Precio
19,930€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
437 L
60 L
85 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Scénic Expression Energy Tce 115 Stop&Start · 116 CV (2012-2013)
Descripción general
El Renault Scénic de 2012, en su versión Expression Energy Tce 115 Stop&Start, se presenta como un monovolumen familiar que busca combinar funcionalidad y eficiencia. Con un motor de gasolina de 1.2 litros y 116 CV, este vehículo promete ser un compañero fiable para el día a día, ofreciendo un equilibrio entre prestaciones y consumo. Su diseño, aunque no rompedor, se enfoca en la practicidad y el confort para todos los ocupantes, manteniendo la esencia de un coche pensado para la familia.
Experiencia de conducción
Al volante del Scénic, la sensación predominante es de suavidad y confort. El motor de 116 CV, aunque no es un derroche de potencia, se muestra suficiente para mover el conjunto con soltura en la mayoría de situaciones, especialmente en entornos urbanos y carreteras secundarias. La dirección asistida eléctrica, sensible a la velocidad, facilita las maniobras y ofrece una respuesta adecuada. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, contribuyendo a un viaje placentero. Sin embargo, en aceleraciones más exigentes, como adelantamientos en autopista, se puede echar en falta un poco más de brío. El sistema Stop&Start ayuda a reducir el consumo en ciudad, aportando una sensación de eficiencia.
Diseño y estética
El diseño exterior del Renault Scénic de 2012 es funcional y discreto, sin grandes alardes estéticos. Sus líneas son suaves y redondeadas, buscando maximizar el espacio interior. La carrocería de 5 puertas y sus dimensiones (4366 mm de largo, 1845 mm de ancho y 1640 mm de alto) lo posicionan como un monovolumen compacto pero espacioso. En el interior, la prioridad es la habitabilidad y la modularidad. Los asientos son cómodos y el maletero, con 437 litros, ofrece una buena capacidad para el equipaje familiar. La visibilidad es buena gracias a la amplia superficie acristalada, y la disposición de los mandos es intuitiva, aunque el diseño general del salpicadero puede parecer algo sobrio para algunos gustos.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Scénic Expression Energy Tce 115 Stop&Start de 2012 incorpora elementos que buscan mejorar la eficiencia y la comodidad. El motor 1.2 Gasolina de 116 CV con inyección directa, turbo e intercooler, junto con el sistema Stop&Start, es un claro ejemplo de la búsqueda de un consumo contenido (5.9 l/100km combinado NEDC). La transmisión manual de 6 velocidades permite un control preciso sobre la entrega de potencia. En cuanto a seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros. La dirección asistida eléctrica sensible a la velocidad es un plus para la maniobrabilidad. Aunque no incorpora las últimas innovaciones de conectividad de modelos más recientes, cumple con lo esperado para su época en términos de equipamiento funcional.
Competencia
El Renault Scénic de 2012 se enfrenta a una competencia sólida en el segmento de los monovolúmenes compactos. Entre sus principales rivales se encuentran modelos como el Citroën C4 Picasso, el Ford C-MAX, el Opel Zafira o el Volkswagen Touran. Cada uno de ellos ofrece sus propias ventajas en términos de espacio, equipamiento o dinámica de conducción. El Scénic se distingue por su enfoque en el confort de marcha, la modularidad interior y una buena relación calidad-precio, buscando atraer a familias que valoran la practicidad y la eficiencia en su día a día.
Conclusión
El Renault Scénic Expression Energy Tce 115 Stop&Start de 2012 es un monovolumen honesto y funcional, ideal para familias que buscan un vehículo espacioso, cómodo y con un consumo razonable. Su motor de 116 CV ofrece un rendimiento adecuado para la mayoría de situaciones, y su diseño interior prioriza la habitabilidad y la versatilidad. Aunque no es el coche más emocionante de conducir ni el más vanguardista en tecnología, cumple con creces su propósito como vehículo familiar. Es una opción sensata para quienes valoran la practicidad y la economía de uso por encima de las prestaciones deportivas o un diseño arriesgado.




