Especificaciones y análisis del Renault Mégane
Potencia
107CV
Par
148Nm
Consumo
7.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.2s
Vel. Máx.
193km/h
Peso
1160kg
Precio
17,020€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
485 L
60 L
79 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Megane Break 1.6 16v Expression · 107 CV (2000-2003)
Descripción general
El Renault Mégane Break 1.6 16v Expression de 1999 es un vehículo que, a pesar de los años, sigue evocando una sensación de practicidad y fiabilidad. Este modelo, con su carrocería familiar, fue diseñado para satisfacer las necesidades de aquellos que buscaban espacio y confort sin renunciar a un tamaño compacto. Su motor de 1.6 litros y 107 CV, combinado con una transmisión manual de 5 velocidades, ofrecía un equilibrio adecuado entre rendimiento y eficiencia para la época. Era un coche pensado para el día a día, para la familia y para los viajes, un compañero fiel en la carretera.
Experiencia de conducción
Al volante del Mégane Break, la sensación es de una conducción suave y predecible. No es un coche que busque emociones fuertes, sino que prioriza la comodidad y la facilidad de manejo. La suspensión tipo McPherson en el eje delantero contribuye a un rodar confortable, absorbiendo bien las irregularidades del terreno. La dirección, aunque carece de la precisión de modelos más modernos, cumple su función de manera adecuada. El motor de 107 CV, con su bloque de hierro y culata de aluminio, ofrece una respuesta progresiva, ideal para una conducción relajada. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.2 segundos y una velocidad máxima de 193 km/h son cifras respetables para un familiar de su segmento y año, permitiendo afrontar viajes largos con solvencia. El consumo combinado de 7.2 l/100km era competitivo en su momento, haciendo de este Mégane una opción económica en el uso diario.
Diseño y estética
El diseño del Renault Mégane Break de 1999 es funcional y atemporal. Sus líneas son suaves y redondeadas, sin estridencias, lo que le confiere una estética que ha envejecido con dignidad. La carrocería familiar se integra armoniosamente con el resto del conjunto, ofreciendo un generoso espacio de carga de 485 litros en el maletero, una de sus grandes bazas. Las dimensiones compactas para un familiar, con 4437 mm de largo y 1699 mm de ancho, facilitan la maniobrabilidad en entornos urbanos. El interior, aunque sobrio, está diseñado para ser práctico y ergonómico, con materiales que, si bien no son lujosos, son duraderos y fáciles de mantener. La visibilidad es buena en todas las direcciones, lo que contribuye a una conducción segura y relajada.
Tecnología y características
En el ámbito tecnológico, el Mégane Break 1.6 16v Expression de 1999 incorporaba las soluciones habituales para su época. Su motor de gasolina de 1.6 litros y 16 válvulas, con inyección indirecta, representaba un buen equilibrio entre rendimiento y eficiencia. La transmisión manual de 5 velocidades era la opción estándar, ofreciendo un control directo sobre la potencia. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados en el eje delantero y discos en el trasero, una configuración que proporcionaba una frenada eficaz. La suspensión delantera tipo McPherson y las barras estabilizadoras en ambos ejes contribuían a una buena estabilidad en carretera. Aunque carecía de las ayudas a la conducción modernas, su tecnología estaba orientada a ofrecer una experiencia de conducción segura y fiable.
Competencia
En su segmento, el Renault Mégane Break 1.6 16v Expression competía con otros familiares compactos de la época, como el Opel Astra Caravan, el Ford Focus Wagon o el Peugeot 306 Break. Frente a ellos, el Mégane destacaba por su confort de marcha, su amplio maletero y una estética que, aunque discreta, resultaba agradable. Su motor de 107 CV ofrecía un rendimiento competitivo, y su consumo de combustible era similar al de sus rivales directos. La fiabilidad de Renault en aquella época era un punto a su favor, lo que lo convertía en una opción atractiva para las familias que buscaban un coche práctico y duradero.
Conclusión
El Renault Mégane Break 1.6 16v Expression de 1999 es un coche que, a pesar de su edad, sigue siendo una opción interesante para quienes buscan un vehículo familiar económico y funcional. Su diseño atemporal, su amplio espacio interior y su motor fiable lo convierten en un compañero ideal para el día a día y para los viajes. No es un coche que destaque por su deportividad o por su tecnología de vanguardia, pero sí por su practicidad, su confort y su capacidad para cumplir con las expectativas de un coche familiar. Es un testimonio de una época en la que la sencillez y la funcionalidad eran valores primordiales en el diseño automotriz.