Especificaciones y análisis del Renault Mégane
Potencia
80CV
Par
160Nm
Consumo
5.5l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.8s
Vel. Máx.
170km/h
Peso
1140kg
Precio
16,300€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
348 L
60 L
59 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Megane Berlina 1.9 dTi 80 CV Privilege (2001)
Descripción general
El Renault Mégane de 1999, en su versión Berlina 1.9 dTi de 80 CV Privilege, se presentaba como una opción sólida y equilibrada en el competitivo segmento de los compactos. Con un precio de 16.300 euros en su lanzamiento, este modelo buscaba conquistar a aquellos que valoraban la funcionalidad, la economía de uso y un confort de marcha adecuado para el día a día. Su motor diésel, conocido por su eficiencia, prometía ser un aliado en los trayectos largos y en el consumo urbano.
Experiencia de conducción
Al volante del Mégane 1.9 dTi, la sensación predominante era de solidez y previsibilidad. Sus 80 CV, entregados por un motor diésel de inyección directa y turbo, ofrecían una respuesta adecuada para la mayoría de las situaciones, aunque sin grandes alardes deportivos. La aceleración de 0 a 100 km/h en 13.8 segundos y una velocidad máxima de 170 km/h lo situaban en la media de su categoría. La suspensión, de tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, estaba configurada para priorizar el confort, absorbiendo bien las irregularidades del asfalto. La dirección, de cremallera, proporcionaba una buena conexión con la carretera, haciendo que la conducción fuera relajada y segura. El consumo combinado de 5.5 l/100km era uno de sus puntos fuertes, invitando a recorrer kilómetros sin preocuparse excesivamente por el repostaje.
Diseño y estética
El diseño del Renault Mégane de 1999 mantenía las líneas suaves y redondeadas que caracterizaban a la marca en esa época. La versión de 5 puertas ofrecía una silueta práctica y funcional, con un frontal amable y una zaga bien integrada. Aunque no era un coche que buscara la extravagancia, su estética era agradable y atemporal, lo que le permitía envejecer con dignidad. El interior, con capacidad para cinco ocupantes, estaba diseñado con un enfoque en la ergonomía y la facilidad de uso, con materiales que, sin ser lujosos, transmitían una sensación de durabilidad. El maletero, con 348 litros, ofrecía un espacio suficiente para el equipaje de una familia pequeña.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mégane 1.9 dTi Privilege incorporaba las soluciones habituales para su época. El motor diésel de 1.870 cc, con inyección directa y turbo, era un ejemplo de eficiencia y fiabilidad. La transmisión manual de 5 velocidades, con tracción delantera, era la configuración estándar para este tipo de vehículos. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y tambores traseros, una combinación efectiva para su peso y prestaciones. Aunque no disponía de los sistemas de asistencia a la conducción que conocemos hoy en día, ofrecía un equipamiento básico pero completo para garantizar la seguridad y el confort de los ocupantes.
Competencia
En su segmento, el Renault Mégane 1.9 dTi Privilege se enfrentaba a duros competidores como el Volkswagen Golf, el Opel Astra, el Ford Focus o el Peugeot 306. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, pero el Mégane se distinguía por su equilibrio general, su confort de marcha y su probada fiabilidad mecánica, especialmente en lo que respecta a su motor diésel. Su relación calidad-precio también era un factor a tener en cuenta, posicionándolo como una alternativa muy atractiva para aquellos que buscaban un coche práctico y económico.
Conclusión
El Renault Mégane Berlina 1.9 dTi 80 CV Privilege de 1999 fue un coche que supo ganarse un lugar en el corazón de muchos conductores. Su combinación de un motor diésel eficiente, un diseño funcional y un confort de marcha notable lo convertían en una opción muy sensata para el día a día. Aunque no era el más potente ni el más deportivo, su fiabilidad y su bajo consumo lo hacían un compañero ideal para la vida familiar y los viajes. Un coche que, sin grandes pretensiones, cumplía con creces su cometido y dejaba un buen sabor de boca a sus propietarios.