Especificaciones y análisis del Renault Latitude
Potencia
150CV
Par
340Nm
Consumo
5.3l/100
Emisiones
140g/km
0-100 km/h
10.3s
Vel. Máx.
210km/h
Peso
1610kg
Precio
30,200€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
477 L
70 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Latitude Privilege dCi 150 · 150 CV (2012-2014)
Descripción general
El Renault Latitude Privilege dCi 150 de 2011 se presenta como una berlina que busca ofrecer un equilibrio entre confort, espacio y eficiencia. Con un diseño sobrio y elegante, este modelo se posiciona como una alternativa interesante en el segmento de las berlinas medias-grandes, destacando por su motor diésel de 150 CV y un equipamiento enfocado en el bienestar a bordo.
Experiencia de conducción
Al volante del Latitude dCi 150, la sensación predominante es de suavidad y aplomo. El motor diésel de 150 CV, con sus 340 Nm de par, ofrece una respuesta adecuada para la mayoría de situaciones, permitiendo adelantamientos seguros y una conducción relajada en carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.3 segundos no es fulgurante, pero sí suficiente para un coche de su tamaño y enfoque. La velocidad máxima de 210 km/h es más que respetable. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, está orientada al confort, absorbiendo bien las irregularidades del asfalto y proporcionando un viaje placentero. La dirección electrohidráulica, sensible a la velocidad, contribuye a una conducción precisa y cómoda, especialmente en trayectos largos. El consumo combinado de 5.3 l/100km es un punto fuerte, haciendo de este Latitude un compañero de viaje económico.
Diseño y estética
El diseño del Renault Latitude es de líneas clásicas y elegantes, buscando una imagen de distinción y sobriedad. Sus 4897 mm de longitud le confieren una presencia imponente en la carretera. La parte frontal se caracteriza por una parrilla prominente y faros que se integran armoniosamente en el conjunto. La silueta es fluida, con una línea de techo que desciende suavemente hacia la zaga, donde encontramos unos pilotos de diseño horizontal que enfatizan la anchura del vehículo. Aunque no es un diseño que busque la deportividad, transmite una sensación de robustez y madurez. El interior, con sus 477 litros de maletero, está diseñado para ofrecer el máximo espacio y confort a sus ocupantes, con materiales que buscan la calidad y la durabilidad.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Renault Latitude Privilege dCi 150 incorpora elementos que, para su época, eran considerados avanzados y que contribuyen a una experiencia de conducción más segura y confortable. El motor diésel de 1995 cc cuenta con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, lo que optimiza la entrega de potencia y la eficiencia. La transmisión manual de 6 velocidades permite un control preciso sobre el motor. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delante y discos macizos detrás, garantizando una buena capacidad de frenado. La dirección asistida electrohidráulica con sensibilidad a la velocidad es un detalle que mejora la maniobrabilidad y la estabilidad. Aunque no se especifican sistemas de asistencia a la conducción de última generación, el equipamiento Privilege suele incluir elementos de confort y seguridad activa y pasiva.
Competencia
El Renault Latitude Privilege dCi 150 compitió en un segmento con rivales de peso como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Opel Insignia o el Citroën C5. Frente a ellos, el Latitude ofrecía un enfoque más centrado en el confort y la habitabilidad, con un diseño que, si bien no era tan atrevido como el de algunos de sus competidores, transmitía una imagen de solidez. Su relación calidad-precio y su eficiencia en el consumo de combustible eran argumentos sólidos para aquellos que buscaban una berlina espaciosa y económica de mantener.
Conclusión
El Renault Latitude Privilege dCi 150 es una berlina que, a pesar de no haber sido un superventas, ofrece una propuesta muy interesante para quienes valoran el confort, el espacio y la eficiencia. Su motor diésel de 150 CV es solvente y económico, y su diseño, aunque discreto, transmite una sensación de elegancia. Es un coche ideal para viajes largos, donde su aplomo y su bajo consumo se hacen notar. Un vehículo que, sin grandes alardes, cumple con creces su función de transporte familiar o ejecutivo, ofreciendo una experiencia de conducción relajada y placentera.




