Especificaciones y análisis del Renault Laguna
Potencia
120CV
Par
270Nm
Consumo
5.6l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.7s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1385kg
Precio
21,550€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
430 L
70 L
88 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Laguna 1.9 dCi 120cv Expression (2001-2005)
Descripción general
El Renault Laguna 1.9 dCi 120cv Expression de 2001 se presenta como una berlina que buscaba conquistar el segmento medio-alto con una propuesta equilibrada entre confort, equipamiento y eficiencia. En un mercado donde la competencia era feroz, este Laguna intentaba destacar por su suavidad de marcha y su motor diésel de inyección directa, una tecnología que empezaba a consolidarse como la opción preferida para muchos conductores.
Experiencia de conducción
Al volante del Laguna 1.9 dCi, la sensación predominante es de tranquilidad y confort. El motor diésel de 120 CV, aunque no es un derroche de potencia, ofrece una respuesta adecuada para el día a día y para viajes largos, con un par motor de 270 Nm que se siente desde bajas revoluciones. La caja de cambios manual de seis velocidades permite un buen aprovechamiento de la mecánica, contribuyendo a una conducción relajada y eficiente. La suspensión, de tipo McPherson en el eje delantero y de rueda tirada con elemento torsional en el trasero, filtra bien las irregularidades del asfalto, proporcionando un viaje placentero para todos los ocupantes. La dirección, de cremallera, ofrece una asistencia que facilita las maniobras en ciudad, aunque podría sentirse algo menos comunicativa en carreteras más exigentes. En general, es un coche que invita a devorar kilómetros con una sensación de seguridad y bienestar.
Diseño y estética
El diseño del Renault Laguna de 2001 es un reflejo de la estética de principios de los 2000, con líneas suaves y fluidas que buscan la elegancia y la aerodinámica. Su carrocería berlina de cinco puertas, con una longitud de 4576 mm, una anchura de 1772 mm y una altura de 1429 mm, le confiere una presencia discreta pero distinguida. Los faros delanteros, de formas redondeadas, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la zaga, con sus pilotos alargados, contribuye a una imagen de solidez. El interior, aunque no es ostentoso, está diseñado para ser funcional y acogedor, con materiales que, sin ser premium, cumplen su cometido y ofrecen una sensación de calidad adecuada para su segmento. El maletero, con 430 litros de capacidad, es suficiente para las necesidades de una familia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Laguna 1.9 dCi de 2001 incorporaba soluciones que eran punteras para su época. Su motor diésel de 1.870 cc con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La culata de aluminio y el bloque de hierro combinaban ligereza y robustez. En cuanto a la seguridad, aunque los datos específicos no se detallan, Renault ya apostaba por sistemas como el ABS y múltiples airbags, que eran cada vez más comunes en el segmento. La transmisión manual de seis velocidades era un plus para la época, permitiendo un mejor control del consumo y una conducción más adaptada a diferentes situaciones. La suspensión, con estabilizadoras tanto delante como detrás, contribuía a una buena estabilidad en carretera.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Renault Laguna 1.9 dCi 120cv Expression se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Peugeot 406 o el Opel Vectra. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en términos de calidad de acabados, dinamismo de conducción o espacio interior. El Laguna buscaba diferenciarse por su confort de marcha, su equipamiento y una relación calidad-precio atractiva, intentando captar a aquellos que valoraban la suavidad y la eficiencia en sus desplazamientos.
Conclusión
El Renault Laguna 1.9 dCi 120cv Expression de 2001 fue una propuesta sólida en su segmento, ofreciendo un equilibrio notable entre confort, eficiencia y un diseño discreto pero elegante. Si bien no destacaba por una deportividad extrema, su motor diésel y su puesta a punto lo convertían en un compañero ideal para viajes largos y para el uso diario, proporcionando una experiencia de conducción relajada y segura. Fue un coche que, sin grandes alardes, cumplió con las expectativas de muchos conductores que buscaban una berlina fiable y cómoda para su día a día.




