Renault Laguna 1.9 dCi 100cv Expression (2001-2005)

2001
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Renault Laguna - Vista 1
Renault Laguna - Vista 2
Renault Laguna - Vista 3
Renault Laguna - Vista 4

Especificaciones y análisis del Renault Laguna

Potencia

101CV

Par

200Nm

Consumo

5.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

13s

Vel. Máx.

185km/h

Peso

1380kg

Precio

20,450

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

430 L

Depósito

70 L

Potencia

74 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima101 CV / 74 kW
Par máximo200 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito70 L
Maletero430 L

Análisis detallado del Renault Laguna 1.9 dCi 100cv Expression (2001-2005)

Descripción general

El Renault Laguna de 2001, en su versión berlina 1.9 dCi de 100 CV, se presentaba como una opción equilibrada y confortable en el segmento de las berlinas medias. Con un diseño que buscaba la elegancia y la funcionalidad, este modelo prometía ser un compañero de viaje fiable y agradable para el día a día y los trayectos largos.

Experiencia de conducción

Al volante, el Laguna 1.9 dCi de 100 CV ofrecía una experiencia de conducción suave y relajada. Su motor diésel, aunque no destacaba por una potencia desbordante, entregaba su par de 200 Nm a bajas revoluciones (1500 rpm), lo que se traducía en una respuesta ágil en ciudad y una buena capacidad de recuperación en carretera. La suspensión, de tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, estaba configurada para priorizar el confort, absorbiendo eficazmente las irregularidades del asfalto. La dirección, de cremallera, contribuía a una sensación de control predecible, aunque sin la deportividad de otros modelos. En general, era un coche que invitaba a la calma, ideal para quienes valoraban la comodidad por encima de las prestaciones puras.

Diseño y estética

El diseño del Renault Laguna de 2001 se caracterizaba por sus líneas fluidas y redondeadas, que le otorgaban una estética moderna y aerodinámica para su época. La carrocería berlina de 5 puertas combinaba la elegancia de una berlina tradicional con la practicidad de un portón trasero. Los faros delanteros, de formas suaves, se integraban armoniosamente en el frontal, mientras que la zaga mantenía una imagen sobria y funcional. En el interior, la disposición de los elementos era ergonómica, con materiales que, sin ser lujosos, ofrecían una sensación de calidad y durabilidad. El espacio interior era generoso, tanto para los ocupantes como para el equipaje, con un maletero de 430 litros que lo hacía muy versátil.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Laguna 1.9 dCi de 2001 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo. El motor diésel de inyección directa por conducto común y turbo, con 101 CV, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La transmisión manual de 5 velocidades, bien escalonada, permitía aprovechar al máximo las capacidades del motor. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delante y discos macizos detrás, garantizando una buena capacidad de frenado. Aunque no se especifican todos los sistemas de asistencia, Renault ya apostaba por la seguridad activa y pasiva en sus modelos. El confort a bordo se veía mejorado por elementos como la dirección asistida y una insonorización cuidada, que contribuían a una experiencia de viaje más placentera.

Competencia

El Renault Laguna 1.9 dCi de 100 CV se enfrentaba a una dura competencia en el segmento de las berlinas medias diésel. Sus principales rivales incluían modelos como el Peugeot 406, el Ford Mondeo, el Opel Vectra y el Volkswagen Passat. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en diseño, prestaciones o equipamiento, pero el Laguna se distinguía por su enfoque en el confort de marcha, su habitabilidad y una relación calidad-precio atractiva.

Conclusión

El Renault Laguna 1.9 dCi de 100 CV de 2001 fue un coche que supo ganarse un lugar en el mercado gracias a su equilibrio. Ofrecía un diseño agradable, un interior espacioso y confortable, y un motor diésel eficiente y solvente para el uso diario y los viajes. Si bien no era el más deportivo ni el más lujoso de su categoría, supo conquistar a aquellos que buscaban una berlina práctica, cómoda y con un buen nivel de equipamiento para la época. Un coche que, sin grandes alardes, cumplía con creces su cometido como vehículo familiar y de representación.