Especificaciones y análisis del Renault Fluence
Potencia
95CV
Par
226Nm
Consumo
-l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13s
Vel. Máx.
135km/h
Peso
1680kg
Precio
20,100€
Resumen técnico
Eléctrico
Automático 1v
FWD
5 / 4 puertas
317 L
- L
70 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Fluence Z.E. Expression · 95 CV (2012-2014)
Descripción general
El Renault Fluence Z.E. Expression de 2012 es una propuesta audaz y pionera de Renault en el segmento de los vehículos eléctricos. Con un precio de 20.100 euros, este sedán de cuatro puertas se presentaba como una alternativa ecológica y eficiente para la movilidad urbana y periurbana. Su diseño, aunque familiar, escondía una tecnología innovadora que buscaba democratizar el acceso a la propulsión eléctrica en un momento en que esta era aún una novedad. Este modelo, con sus 95 CV y una autonomía pensada para el día a día, invitaba a los conductores a experimentar una nueva forma de conducir, más silenciosa y respetuosa con el medio ambiente.
Experiencia de conducción
Al volante del Fluence Z.E., la sensación predominante es la de una calma inusual. La ausencia de ruido del motor de combustión y las vibraciones se traduce en una experiencia de conducción serena y relajante. Sus 95 CV y 226 Nm de par motor, disponibles desde el primer instante, ofrecen una aceleración suave pero suficiente para moverse con agilidad en el tráfico urbano. La velocidad máxima de 135 km/h es adecuada para la mayoría de los trayectos, aunque no invita a una conducción deportiva. La dirección asistida eléctrica y la suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, proporcionan un confort de marcha notable, absorbiendo bien las irregularidades del asfalto. La batería, ubicada en la parte trasera, contribuye a un centro de gravedad bajo, lo que se traduce en una buena estabilidad. Sin embargo, el peso de 1680 kg se hace notar en curvas más pronunciadas, donde el coche muestra una ligera tendencia al subviraje. La autonomía real, que rondaba los 100-120 km, requería una planificación cuidadosa de los viajes, generando una sensación de anticipación y gestión constante de la energía disponible.
Diseño y estética
El diseño del Renault Fluence Z.E. Expression se basa en la estética del Fluence de combustión, pero incorpora detalles distintivos que lo identifican como un vehículo eléctrico. Sus 4748 mm de longitud, 1813 mm de ancho y 1458 mm de alto le otorgan una presencia elegante y proporcionada. Las líneas fluidas y la silueta de sedán clásico se mantienen, pero se añaden elementos como los faros delanteros con detalles azules y el logotipo Z.E. (Zero Emission) que lo diferencian. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 205/55 R16 complementan su aspecto. En el interior, el habitáculo es espacioso y funcional, con capacidad para cinco ocupantes. Sin embargo, la ubicación de la batería en la parte trasera reduce significativamente la capacidad del maletero a 317 litros, un aspecto que puede resultar limitante para algunas familias. Los materiales y acabados son correctos para su segmento, priorizando la durabilidad y la ergonomía. El diseño general es discreto y busca la aceptación de un público amplio, sin estridencias, pero con la clara intención de comunicar su naturaleza eléctrica.
Tecnología y características
La tecnología es el corazón del Renault Fluence Z.E. Expression. Su motor eléctrico de 70 kW (95 CV) y 226 Nm de par se alimenta de una batería de iones de litio de 25,87 kWh de capacidad bruta (22 kWh útiles), ubicada estratégicamente en la parte trasera. Esta batería, con un voltaje de 398 V, permitía una autonomía teórica de unos 185 km según el ciclo NEDC, aunque en la práctica se situaba en torno a los 100-120 km. La recarga completa en corriente alterna (AC) tardaba aproximadamente 10 horas, lo que lo hacía ideal para recargas nocturnas en el hogar. La transmisión automática de una única marcha, sin embrague, simplifica la conducción y optimiza la eficiencia. El sistema de frenos, con discos ventilados de 280 mm delante y discos de 260 mm detrás, garantizaba una frenada eficaz. La dirección asistida eléctrica contribuía a la eficiencia y al confort. Aunque carecía de las tecnologías de carga rápida DC que hoy son comunes, en su momento representaba un paso adelante significativo en la electrificación del automóvil, ofreciendo una solución práctica para la movilidad diaria con cero emisiones directas.
Competencia
En el momento de su lanzamiento, el Renault Fluence Z.E. se enfrentaba a un panorama de vehículos eléctricos aún incipiente. Sus principales rivales eran modelos como el Nissan Leaf, que ofrecía una propuesta similar en cuanto a autonomía y prestaciones, aunque con una carrocería de tipo hatchback. Otros competidores indirectos podrían ser vehículos híbridos enchufables que comenzaban a aparecer en el mercado, ofreciendo una mayor flexibilidad en cuanto a autonomía. Sin embargo, el Fluence Z.E. se distinguía por su formato de sedán, que lo hacía atractivo para aquellos que buscaban un coche eléctrico con una estética más tradicional y un mayor espacio interior, a pesar de la limitación del maletero. Su precio competitivo, especialmente con las ayudas gubernamentales, lo posicionaba como una opción interesante para quienes deseaban dar el salto a la movilidad eléctrica.
Conclusión
El Renault Fluence Z.E. Expression fue un pionero valiente en la era de la electrificación. Aunque su autonomía y tiempos de recarga pueden parecer modestos hoy en día, en su momento representó un esfuerzo significativo por parte de Renault para ofrecer una alternativa de cero emisiones. Su conducción silenciosa y suave, junto con un diseño familiar y un interior confortable, lo convertían en un vehículo agradable para el uso diario. Sin embargo, la limitación del maletero y la necesidad de una planificación cuidadosa de los trayectos eran aspectos a considerar. A pesar de sus desafíos, el Fluence Z.E. sentó las bases para futuros desarrollos en la movilidad eléctrica, demostrando que un sedán eléctrico era una realidad tangible y accesible. Fue un coche que, con sus virtudes y limitaciones, invitó a muchos a experimentar el futuro de la automoción.




