Especificaciones y análisis del Renault Fluence
Potencia
110CV
Par
240Nm
Consumo
4.6l/100
Emisiones
120g/km
0-100 km/h
11s
Vel. Máx.
185km/h
Peso
1389kg
Precio
22,130€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
530 L
60 L
81 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Fluence Sportway dCi 110 · 110 CV (2011-2012)
Descripción general
El Renault Fluence Sportway dCi 110 de 2010 se presenta como una berlina compacta que busca ofrecer un equilibrio entre confort, eficiencia y un diseño sobrio. Con su motor diésel de 110 CV, se posiciona como una opción práctica para el día a día y viajes largos, destacando por su amplitud interior y un consumo contenido. Es un vehículo que, sin grandes alardes, cumple con las expectativas de quienes buscan un coche funcional y económico.
Experiencia de conducción
Al volante del Fluence, la sensación predominante es de suavidad y confort. El motor dCi de 110 CV, aunque no es un derroche de potencia, responde con solvencia en la mayoría de situaciones, ofreciendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 11 segundos y una velocidad máxima de 185 km/h. La caja de cambios manual de 6 velocidades permite un manejo eficiente del propulsor, manteniendo los consumos a raya, con un combinado de 4.6 l/100km. La suspensión, de tipo McPherson delante y eje torsional detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, contribuyendo a un viaje placentero. La dirección asistida eléctrica, aunque no es la más comunicativa, facilita las maniobras en ciudad. En general, es un coche que invita a una conducción relajada, sin sobresaltos, ideal para quienes valoran la tranquilidad al volante.
Diseño y estética
El diseño del Renault Fluence Sportway dCi 110 es discreto y funcional, sin caer en estridencias. Sus líneas fluidas y su silueta de berlina clásica le otorgan una presencia elegante pero sin pretensiones. Con 4618 mm de largo, 1809 mm de ancho y 1479 mm de alto, ofrece unas proporciones equilibradas. Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 205/55 R17 le confieren un toque de dinamismo. El interior, aunque no destaca por materiales de lujo, es espacioso y está bien resuelto, con un maletero de 530 litros que lo convierte en un compañero ideal para familias o para quienes necesitan un buen espacio de carga. La disposición de los elementos es lógica y ergonómica, priorizando la facilidad de uso.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Fluence Sportway dCi 110 de 2010 incorpora lo esencial para la época. Su motor diésel de 1.5 litros con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de eficiencia mecánica. La transmisión manual de 6 velocidades optimiza el rendimiento del motor. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros de 280 mm y discos traseros de 260 mm, garantizando una frenada eficaz. La dirección asistida eléctrica contribuye a una conducción más cómoda. Aunque no incorpora las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción que vemos hoy en día, cumple con lo esperado para un vehículo de su segmento y año, ofreciendo una experiencia de conducción sencilla y fiable.
Competencia
En el mercado de las berlinas compactas de su época, el Renault Fluence Sportway dCi 110 se enfrentaba a competidores como el Opel Astra Sedán, el Ford Focus Sedán o el Volkswagen Jetta. Frente a ellos, el Fluence destacaba por su relación calidad-precio, su confort de marcha y su generoso espacio interior, especialmente en el maletero. Si bien algunos rivales podían ofrecer una dinámica de conducción más deportiva o un interior con acabados ligeramente superiores, el Fluence se posicionaba como una alternativa muy sensata para quienes buscaban un coche práctico, económico y fiable para el día a día y los viajes familiares.
Conclusión
El Renault Fluence Sportway dCi 110 de 2010 es un coche que, sin ser un referente en ningún aspecto concreto, cumple con creces su cometido. Es una berlina cómoda, espaciosa y eficiente, ideal para quienes buscan un vehículo funcional y económico para el uso diario y los viajes. Su motor diésel ofrece un buen equilibrio entre prestaciones y consumo, y su diseño sobrio no pasa de moda. Es una opción inteligente para aquellos que valoran la practicidad y la fiabilidad por encima de las grandes emociones al volante. Un compañero de viaje honesto y cumplidor.