Especificaciones y análisis del Porsche Panamera
Potencia
400CV
Par
500Nm
Consumo
10.8l/100
Emisiones
254g/km
0-100 km/h
5s
Vel. Máx.
282km/h
Peso
1935kg
Precio
117,958€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
AWD
4 / 5 puertas
445 L
100 L
294 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Porsche Panamera 4S · 400 CV (2010-2012)
Descripción general
El Porsche Panamera 4S de 2009 irrumpió en el mercado como una declaración audaz de la marca de Stuttgart, combinando la deportividad inherente de Porsche con la versatilidad de una berlina de lujo. Con un precio de 117.958 €, este modelo no solo ofrecía prestaciones de infarto, sino también un nivel de confort y sofisticación que lo diferenciaba de sus hermanos más puristas. Su motor V8 de 4.8 litros y 400 CV, junto con la tracción integral, prometía una experiencia de conducción emocionante y segura en cualquier circunstancia.
Experiencia de conducción
Al volante del Panamera 4S, la emoción es palpable desde el primer instante. El motor V8 ruge con una melodía embriagadora, invitando a exprimir cada uno de sus 400 CV. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5 segundos es una muestra de su poderío, y la velocidad máxima de 282 km/h te pega al asiento. La dirección es precisa y comunicativa, transmitiendo fielmente lo que ocurre bajo las ruedas. A pesar de su tamaño y peso, el Panamera se siente ágil y equilibrado en curvas, gracias a una suspensión bien calibrada y la tracción integral. En viajes largos, el confort es excepcional, con un habitáculo bien insonorizado y asientos que recogen el cuerpo a la perfección, haciendo que los kilómetros pasen volando.
Diseño y estética
El diseño del Panamera 4S de 2009 fue, y sigue siendo, un punto de debate. Su silueta de coupé de cuatro puertas, aunque controvertida para algunos puristas de Porsche, buscaba ofrecer una estética deportiva sin sacrificar la habitabilidad. Las líneas fluidas y la caída del techo le otorgan una presencia imponente y elegante. En el interior, la calidad de los materiales y los acabados es soberbia, con una consola central que se extiende hasta la parte trasera, creando un ambiente exclusivo para los cuatro ocupantes. Cada detalle está pensado para el disfrute, desde los mandos ergonómicos hasta la iluminación ambiental.
Tecnología y características
El Panamera 4S de 2009 estaba a la vanguardia tecnológica de su época. Su motor V8 de inyección directa y admisión variable, junto con el sistema Stop/Start, optimizaba el rendimiento y la eficiencia. La transmisión automática de doble embrague y 7 velocidades (PDK) ofrecía cambios de marcha rapidísimos y suaves, contribuyendo a la experiencia deportiva. La tracción integral garantizaba una adherencia excepcional en cualquier condición. Además, contaba con sistemas de suspensión avanzados y frenos de disco ventilados de gran tamaño que aseguraban un control total del vehículo. La dirección asistida hidráulica, aunque sin ser sensible a la velocidad, ofrecía una respuesta directa y precisa.
Competencia
En el segmento de las berlinas deportivas de lujo, el Porsche Panamera 4S se enfrentaba a duros competidores. Entre ellos, destacaban el Mercedes-Benz CLS, el BMW Serie 6 Gran Coupé y el Audi A7 Sportback. Cada uno ofrecía su propia interpretación del lujo y la deportividad, pero el Panamera se distinguía por su enfoque más radical en la dinámica de conducción, heredada directamente del ADN de Porsche. Su motor V8 atmosférico y la tracción integral le daban una personalidad única frente a sus rivales, que a menudo optaban por motores turboalimentados o configuraciones de tracción trasera.
Conclusión
El Porsche Panamera 4S de 2009 es un coche que enamora a quienes buscan la combinación perfecta entre deportividad, lujo y practicidad. Su potente motor, su excepcional dinámica de conducción y su interior suntuoso lo convierten en una opción muy atractiva para aquellos que no quieren renunciar a nada. Aunque su diseño pudo generar controversia, su rendimiento y la calidad de su construcción son innegables. Es un coche que te invita a disfrutar de cada viaje, ya sea en un tramo de curvas o en un largo desplazamiento por autopista, dejando una huella imborrable en quien lo conduce.
