Especificaciones y análisis del Peugeot 306
Potencia
88CV
Par
135Nm
Consumo
9.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
15.1s
Vel. Máx.
175km/h
Peso
1205kg
Precio
15,300€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
5 / 4 puertas
465 L
60 L
65 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Peugeot 306 Sedan XT 1.6 Aut. · 88 CV (2000-2002)
Descripción general
El Peugeot 306 Sedán XT 1.6 Automático de 2000 es un vehículo que, a pesar de los años, sigue evocando una sensación de confort y practicidad. Con su motor de gasolina de 88 CV y una transmisión automática de 4 velocidades, este sedán de tracción delantera se presentaba como una opción sensata para quienes buscaban un coche fiable y fácil de conducir en el día a día. Su diseño clásico y sus dimensiones compactas lo hacían ideal para la ciudad, sin renunciar a la comodidad en viajes más largos.
Experiencia de conducción
Al volante del Peugeot 306 Sedán XT 1.6 Automático, la experiencia es de suavidad y tranquilidad. Los 88 CV del motor de 1.6 litros, aunque no prometen emociones fuertes, son suficientes para mover el coche con soltura en entornos urbanos y en carretera a velocidades legales. La transmisión automática de 4 velocidades, si bien no es la más rápida, cumple su función de ofrecer una conducción relajada, sin la necesidad de cambiar de marcha manualmente. La suspensión, de tipo McPherson en la parte delantera, absorbe bien las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje confortable para todos los ocupantes. La dirección, de cremallera, ofrece una buena respuesta, haciendo que el coche se sienta ágil y fácil de maniobrar. En general, es un coche que invita a la calma, a disfrutar del trayecto sin prisas, con una sensación de seguridad y control.
Diseño y estética
El diseño del Peugeot 306 Sedán XT es un reflejo de la estética automotriz de finales de los años 90 y principios de los 2000. Sus líneas son suaves y redondeadas, con una silueta que denota elegancia y sobriedad. La carrocería sedán de 4 puertas le confiere una presencia más formal y un maletero generoso de 465 litros, ideal para el equipaje familiar. Los faros delanteros, de tamaño considerable, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la parrilla, con el emblema del león de Peugeot, le otorga un toque distintivo. En el interior, la funcionalidad prima sobre la ostentación, con un salpicadero bien organizado y materiales que, aunque sencillos, transmiten durabilidad. Es un diseño atemporal que, a pesar de los años, sigue siendo agradable a la vista y funcional en su propósito.
Tecnología y características
En el año 2000, el Peugeot 306 Sedán XT 1.6 Automático incorporaba la tecnología esperada para su segmento. Su motor de gasolina de 1.6 litros con inyección indirecta y 88 CV, aunque no era un prodigio de potencia, ofrecía una fiabilidad contrastada. La transmisión automática de 4 velocidades facilitaba la conducción, especialmente en el tráfico urbano. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados en la parte delantera y de tambor en la trasera, una configuración estándar para la época. La dirección asistida, aunque no sensible a la velocidad, contribuía a una mayor comodidad al maniobrar. En términos de confort, es probable que incluyera elementos como elevalunas eléctricos y aire acondicionado, características que, aunque hoy son comunes, en su momento eran valoradas. Su tecnología se centraba en la funcionalidad y la durabilidad, sin grandes alardes, pero con todo lo necesario para una experiencia de conducción satisfactoria.
Competencia
En su época, el Peugeot 306 Sedán XT 1.6 Automático se enfrentaba a una competencia sólida en el segmento de los sedanes compactos. Sus principales rivales incluían modelos como el Renault Mégane Classic, el Opel Astra Sedán, el Ford Focus Sedán y el Volkswagen Bora. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en diseño, equipamiento o prestaciones. El 306 se distinguía por su confort de marcha, su diseño elegante y la suavidad de su transmisión automática, lo que lo convertía en una opción atractiva para aquellos que priorizaban la comodidad y la facilidad de conducción en su día a día.
Conclusión
El Peugeot 306 Sedán XT 1.6 Automático de 2000 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, mantiene su encanto como un vehículo práctico y confortable. Su diseño clásico, su motor fiable y su transmisión automática lo convierten en una opción ideal para quienes buscan un coche sencillo de conducir, con un buen espacio interior y un maletero generoso. Es un coche que invita a la tranquilidad, a disfrutar de cada trayecto sin prisas, ofreciendo una experiencia de conducción relajada y segura. Aunque sus prestaciones no son las más deportivas, su equilibrio entre confort, funcionalidad y fiabilidad lo convierten en un compañero de viaje muy digno.