Especificaciones y análisis del Peugeot 1007
Potencia
109CV
Par
240Nm
Consumo
4.8l/100
Emisiones
125g/km
0-100 km/h
10.6s
Vel. Máx.
185km/h
Peso
1348kg
Precio
16,670€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
4 / 3 puertas
178 L
40 L
80 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Peugeot 1007 Sporty 1.6 HDi 110 FAP · 109 CV (2007)
Descripción general
El Peugeot 1007 Sporty 1.6 HDi 110 FAP de 2007 es un coche que, a primera vista, despierta curiosidad. Con su diseño compacto y sus puertas correderas eléctricas, se presentaba como una propuesta audaz y diferente en el segmento de los urbanos. No era un coche para pasar desapercibido, sino para aquellos que buscaban un toque de originalidad y practicidad en su día a día.
Experiencia de conducción
Al volante, el 1007 con su motor diésel de 109 CV ofrecía una respuesta enérgica y un consumo contenido, ideal para la ciudad y escapadas ocasionales. La agilidad era su punto fuerte, permitiendo moverse con soltura en el tráfico. Sin embargo, su peso y altura podían restarle algo de aplomo en carreteras más reviradas, donde se sentía más como un monovolumen pequeño que como un utilitario deportivo. La dirección asistida eléctrica facilitaba las maniobras, pero la sensación general era de un coche práctico y funcional, más que emocionante.
Diseño y estética
El diseño del Peugeot 1007 era, sin duda, su rasgo más distintivo. Sus puertas correderas eléctricas, denominadas 'Sésamo', eran una declaración de intenciones, ofreciendo un acceso inigualable en espacios reducidos. La estética exterior, con sus líneas redondeadas y su frontal característico de Peugeot, le otorgaba una personalidad única. En el interior, la modularidad era clave, con asientos traseros deslizantes y abatibles que permitían adaptar el espacio a las necesidades del momento. Los materiales, aunque correctos, no destacaban por su lujo, priorizando la funcionalidad y la durabilidad.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el 1007 incorporaba elementos que buscaban facilitar la vida a bordo. Las puertas correderas eléctricas eran el elemento estrella, un avance práctico para la época. El motor 1.6 HDi con filtro antipartículas (FAP) era un ejemplo de la apuesta de Peugeot por la eficiencia diésel. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco en ambos ejes y una suspensión bien calibrada para un coche de su segmento. La dirección asistida eléctrica contribuía a una conducción más cómoda en entornos urbanos.
Competencia
En su momento, el Peugeot 1007 se enfrentaba a rivales como el Renault Modus o el Opel Meriva, monovolúmenes pequeños que también buscaban ofrecer versatilidad en un tamaño compacto. Sin embargo, el 1007 se desmarcaba con sus puertas correderas, un elemento que lo hacía único en su categoría. Otros utilitarios como el Ford Fiesta o el Volkswagen Polo, aunque más convencionales, también competían por el mismo público que buscaba un coche urbano y práctico.
Conclusión
El Peugeot 1007 Sporty 1.6 HDi 110 FAP fue un coche valiente, una propuesta diferente que buscaba innovar en el segmento urbano. Sus puertas correderas eran un acierto en términos de practicidad, y su motor diésel ofrecía un buen equilibrio entre prestaciones y consumo. Aunque no fue un superventas, dejó una huella por su originalidad y su enfoque en la funcionalidad. Es un coche para quienes valoran la comodidad de acceso y un diseño que se atreve a ser distinto.




