Opel Vectra Caravan Elegance 2.2 DTI 16V · 125 CV (1999-2002)

1995
Gasóleo
FWD
Manual 5v

Especificaciones y análisis del Opel Vectra

Potencia

125CV

Par

270Nm

Consumo

6.6l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11s

Vel. Máx.

200km/h

Peso

1525kg

Precio

23,440

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

460 L

Depósito

60 L

Potencia

92 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima125 CV / 92 kW
Par máximo270 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero460 L

Análisis detallado del Opel Vectra Caravan Elegance 2.2 DTI 16V · 125 CV (1999-2002)

Descripción general

El Opel Vectra Caravan Elegance 2.2 DTI 16V de 1995 es un vehículo que encarna la esencia de la practicidad y la comodidad familiar de su época. Con una carrocería familiar que prioriza el espacio y la funcionalidad, este modelo se presentaba como una opción robusta y fiable para aquellos que buscaban un compañero de viaje para el día a día y las aventuras familiares. Su motor diésel, con una potencia de 125 CV, prometía un equilibrio entre rendimiento y eficiencia, características muy valoradas en el segmento de las berlinas familiares de finales de los 90.

Experiencia de conducción

Al volante del Vectra Caravan, la sensación predominante es de solidez y aplomo. El motor 2.2 DTI 16V, con sus 125 CV y un par motor de 270 Nm disponible desde las 1500 rpm, ofrece una respuesta contundente y progresiva, ideal para afrontar viajes largos con la familia y el equipaje. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11 segundos y una velocidad máxima de 200 km/h, aunque no lo convierten en un deportivo, sí le otorgan la agilidad necesaria para moverse con solvencia en carretera. La suspensión tipo McPherson en el eje delantero y los frenos de disco ventilados delante y macizos detrás, contribuyen a una conducción segura y confortable, absorbiendo las irregularidades del terreno con eficacia. La dirección, aunque carece de la precisión de modelos más modernos, cumple su función de manera adecuada, transmitiendo confianza al conductor. El consumo combinado de 6.6 l/100km es un punto a favor, haciendo de este Vectra una opción económica para el uso diario.

Diseño y estética

El diseño del Opel Vectra Caravan de 1995 es un reflejo de la estética automovilística de su tiempo: líneas sobrias, funcionales y con un claro enfoque en la habitabilidad. Con una longitud de 4490 mm y una anchura de 1707 mm, su silueta familiar se caracteriza por un voladizo trasero generoso que maximiza el espacio de carga. El frontal, con sus faros alargados y la parrilla característica de Opel, denota una imagen de robustez. El interior, aunque no destaca por lujos, ofrece un ambiente acogedor y bien organizado, con materiales duraderos y un diseño ergonómico que facilita la vida a bordo. La capacidad del maletero de 460 litros es uno de sus puntos fuertes, permitiendo transportar una gran cantidad de equipaje sin comprometer la comodidad de los cinco ocupantes.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Opel Vectra Caravan Elegance 2.2 DTI 16V incorpora soluciones avanzadas para su época. El motor diésel de inyección directa con turbo de geometría variable e intercooler es un claro ejemplo de ello, optimizando la entrega de potencia y la eficiencia del combustible. La transmisión manual de 5 velocidades, aunque convencional, es precisa y contribuye a un buen aprovechamiento del motor. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco en ambos ejes y estabilizadoras delanteras y traseras, elementos que mejoran la estabilidad y el control del vehículo. Aunque carece de los sistemas de asistencia a la conducción modernos, su equipamiento básico de seguridad era competitivo en su segmento.

Competencia

En el mercado de las berlinas familiares de finales de los 90, el Opel Vectra Caravan se enfrentaba a duros competidores. Modelos como el Volkswagen Passat Variant, el Ford Mondeo Wagon o el Peugeot 406 Break eran sus principales rivales. Frente a ellos, el Vectra Caravan ofrecía una propuesta equilibrada, destacando por su fiabilidad mecánica, su amplio espacio interior y un precio competitivo. Su motor diésel de 125 CV le permitía competir en prestaciones con sus homólogos, mientras que su diseño funcional y su buen comportamiento en carretera lo convertían en una opción atractiva para las familias que buscaban un coche versátil y duradero.

Conclusión

El Opel Vectra Caravan Elegance 2.2 DTI 16V de 1995 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un ejemplo de la ingeniería práctica y fiable de Opel. Su combinación de un motor diésel eficiente y potente, un diseño funcional y un interior espacioso lo convierten en una opción muy interesante para aquellos que buscan un vehículo clásico con un gran valor utilitario. Es un coche que invita a viajar, a disfrutar de la carretera con la familia y a acumular kilómetros con la tranquilidad de saber que se cuenta con un compañero de viaje robusto y fiel. Un verdadero caballo de batalla que ha dejado una huella en la historia del automóvil familiar.