Especificaciones y análisis del Opel Vectra
Potencia
125CV
Par
270Nm
Consumo
6.5l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.5s
Vel. Máx.
207km/h
Peso
1465kg
Precio
22,540€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
480 L
60 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Vectra 5p Elegance 2.2 DTI 16V · 125 CV (1999-2002)
Descripción general
El Opel Vectra de 1995, en su versión 5p Elegance 2.2 DTI 16V, se presenta como una berlina que marcó una época. Con un motor diésel de 125 CV, este vehículo prometía eficiencia y un rendimiento adecuado para el día a día, posicionándose como una opción sensata y fiable en el segmento de las berlinas medias.
Experiencia de conducción
Al volante del Vectra, la sensación es de solidez y confort. Su motor diésel, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 125 CV de forma lineal, con un par motor de 270 Nm disponible desde las 1500 rpm que facilita los adelantamientos y la conducción en carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.5 segundos y una velocidad máxima de 207 km/h lo hacían competitivo en su momento. La suspensión, tipo McPherson en el eje delantero, ofrece un buen equilibrio entre comodidad y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del terreno sin sacrificar la confianza en curvas. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, proporciona una respuesta predecible. El consumo combinado de 6.5 l/100km era un punto fuerte, haciendo de los viajes largos una experiencia económica.
Diseño y estética
El diseño del Opel Vectra de 1995 es un reflejo de la estética automovilística de finales de los 90: líneas sobrias, funcionales y un perfil que prioriza la aerodinámica sin estridencias. La carrocería berlina de 5 puertas ofrece una silueta elegante y práctica. Sus dimensiones, con 4495 mm de largo y 1707 mm de ancho, le otorgan una presencia discreta pero robusta en la carretera. El interior, aunque no destaca por lujos, es espacioso y funcional, con capacidad para cinco ocupantes y un maletero de 480 litros, ideal para las necesidades familiares o de viaje. La estética general es atemporal, sin elementos que lo hagan parecer excesivamente anticuado hoy en día.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Opel Vectra 2.2 DTI 16V incorporaba un motor diésel de inyección directa con turbo de geometría variable e intercooler, una configuración avanzada para su época que optimizaba la entrega de potencia y la eficiencia. El bloque de hierro y la culata de aluminio eran una combinación robusta. La transmisión manual de 5 velocidades era la opción estándar, ofreciendo un control directo sobre la potencia. Aunque carecía de sistemas de asistencia a la conducción modernos, su tecnología se centraba en la fiabilidad mecánica y la eficiencia del motor, elementos clave para el consumidor de entonces. La suspensión delantera tipo McPherson y los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros aseguraban un comportamiento dinámico seguro.
Competencia
En su segmento, el Opel Vectra competía con modelos de gran calado como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo y el Renault Laguna. Frente a ellos, el Vectra ofrecía una propuesta equilibrada, destacando por su fiabilidad mecánica, su buen espacio interior y un consumo de combustible contenido, especialmente en esta versión diésel. Aunque quizás no era el más emocionante en cuanto a diseño o el más lujoso en acabados, su relación calidad-precio y su reputación de coche robusto lo convertían en una alternativa muy atractiva para quienes buscaban un vehículo práctico y duradero.
Conclusión
El Opel Vectra 5p Elegance 2.2 DTI 16V de 1995 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un ejemplo de ingeniería práctica y fiable. Su motor diésel ofrece un rendimiento adecuado y un consumo muy razonable, ideal para el uso diario y los viajes largos. Su diseño sobrio y funcional, junto con un interior espacioso, lo convierten en una opción sensata para quienes buscan un vehículo sin pretensiones pero con una probada durabilidad. Es un coche que cumple con lo que promete, sin sorpresas, y que ha sabido envejecer con dignidad, manteniendo su esencia de berlina robusta y eficiente.




