Especificaciones y análisis del Opel Vectra
Potencia
136CV
Par
188Nm
Consumo
9.5l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11s
Vel. Máx.
212km/h
Peso
1440kg
Precio
21,336€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
5 / 5 puertas
480 L
60 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Vectra 5p Edition 2000 2.0 16v Aut. · 136 CV (1999-2000)
Descripción general
El Opel Vectra 5p Edition 2000 2.0 16v Aut. de 1999 es un vehículo que, a pesar de los años, evoca una época de solidez y funcionalidad. Con su motor de gasolina de 136 CV y transmisión automática de 4 velocidades, ofrecía una propuesta de valor interesante para la familia que buscaba comodidad y un rendimiento adecuado para el día a día. Su diseño, aunque discreto, prometía durabilidad y un viaje sin sobresaltos, características muy apreciadas en su segmento.
Experiencia de conducción
Al volante del Vectra, la sensación predominante es de confort y estabilidad. La suspensión, orientada a la comodidad, filtra bien las irregularidades del asfalto, haciendo los viajes largos más placenteros. El motor de 2.0 litros, con sus 136 CV, responde con suficiente energía para la mayoría de las situaciones, aunque la transmisión automática de cuatro marchas, si bien suave, puede sentirse algo lenta en las recuperaciones más exigentes. No es un coche que invite a una conducción deportiva, sino más bien a un estilo relajado y seguro, donde la tranquilidad es la prioridad. La dirección, sin ser la más comunicativa, cumple su función con precisión, y los frenos de disco en ambos ejes ofrecen una detención eficaz y segura.
Diseño y estética
El diseño del Opel Vectra de 1999 es un reflejo de la sobriedad y la funcionalidad que caracterizaban a los vehículos de su época. Sus líneas son limpias y discretas, sin grandes alardes estéticos, pero con una presencia robusta y atemporal. La carrocería de 5 puertas, en esta versión Edition 2000, ofrecía una versatilidad muy valorada, combinando la elegancia de una berlina con la practicidad de un portón trasero. El interior, aunque no deslumbraba por sus materiales, estaba bien ensamblado y diseñado para ser ergonómico y fácil de usar, con un enfoque claro en la durabilidad y la funcionalidad. Los detalles de la versión Edition 2000 aportaban un toque de distinción sin romper con la filosofía general del modelo.
Tecnología y características
En su momento, el Opel Vectra 5p Edition 2000 2.0 16v Aut. incorporaba una tecnología que, si bien hoy puede parecer básica, era avanzada para su tiempo. El motor de 2.0 litros y 16 válvulas, con inyección indirecta, representaba un buen equilibrio entre rendimiento y eficiencia. La transmisión automática de cuatro velocidades, aunque no tan sofisticada como las actuales, ofrecía una conducción relajada y sin esfuerzo. En cuanto a seguridad, contaba con elementos como los frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, y es probable que incluyera sistemas de seguridad pasiva que eran estándar en la época. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, proporcionaba un control adecuado. Era un coche que priorizaba la fiabilidad y la funcionalidad sobre las últimas innovaciones, ofreciendo una experiencia de conducción predecible y segura.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias de finales de los 90, el Opel Vectra se enfrentaba a duros contendientes. Modelos como el Ford Mondeo, el Volkswagen Passat, el Renault Laguna o el Peugeot 406 eran sus principales rivales. Cada uno ofrecía sus propias virtudes, desde la deportividad del Mondeo hasta la sobriedad del Passat. El Vectra se posicionaba como una opción equilibrada, destacando por su fiabilidad, su confort de marcha y su buena relación calidad-precio, atrayendo a aquellos compradores que buscaban un coche práctico y duradero para el uso familiar y diario, sin grandes pretensiones deportivas pero con la seguridad de un buen desempeño.
Conclusión
El Opel Vectra 5p Edition 2000 2.0 16v Aut. de 1999 es un testimonio de una época en la que los coches se construían para durar y para servir a la familia con honestidad. No buscaba ser el más rápido ni el más lujoso, sino un compañero fiable y confortable para el día a día. Su combinación de un motor solvente, una transmisión suave y un diseño funcional lo convertían en una opción sensata y apreciada por aquellos que valoraban la practicidad y la durabilidad. Hoy, sigue siendo un recordatorio de la ingeniería alemana enfocada en la robustez y la eficiencia, un coche que, a su manera, dejó una huella en el corazón de muchas familias.




