Opel Vectra 4p Sport 2.0 16v Aut. · 136 CV (1999-2000)

1995
Gasolina
FWD
Automático 4v
Opel Vectra - Vista 1
Opel Vectra - Vista 2
Opel Vectra - Vista 3
Opel Vectra - Vista 4

Especificaciones y análisis del Opel Vectra

Potencia

136CV

Par

188Nm

Consumo

9.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11s

Vel. Máx.

212km/h

Peso

1425kg

Precio

21,540

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

60 L

Potencia

100 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima136 CV / 100 kW
Par máximo188 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Opel Vectra 4p Sport 2.0 16v Aut. · 136 CV (1999-2000)

Descripción general

El Opel Vectra 4 puertas Sport 2.0 16v Automático de 1995 es un vehículo que, en su momento, representó una opción equilibrada y atractiva para quienes buscaban una berlina con un toque deportivo y la comodidad de una transmisión automática. Con su motor de 136 CV, ofrecía un rendimiento adecuado para la época, combinando la funcionalidad de un coche familiar con la capacidad de disfrutar de la carretera. Su diseño, aunque sobrio, transmitía una sensación de solidez y fiabilidad, características muy valoradas en el segmento.

Experiencia de conducción

Al volante del Vectra Sport, la sensación predominante es de confort y estabilidad. La suspensión, tipo McPherson en el eje delantero, absorbía bien las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje suave. El motor de 2.0 litros y 136 CV, aunque no era un derroche de potencia, ofrecía una respuesta lineal y suficiente para la mayoría de las situaciones, especialmente en combinación con la caja automática de 4 velocidades, que priorizaba la suavidad en los cambios. La dirección, de cremallera, transmitía una buena conexión con la carretera, y los frenos de disco en ambos ejes (ventilados delante) garantizaban una detención segura. En general, era un coche que invitaba a viajes largos con tranquilidad, sin renunciar a una cierta agilidad en carreteras secundarias.

Diseño y estética

El diseño del Opel Vectra de 1995 se caracterizaba por sus líneas limpias y funcionales, típicas de la estética automovilística de mediados de los 90. La versión de 4 puertas presentaba una silueta clásica de berlina, con un frontal que integraba los faros de forma armoniosa y una parrilla discreta. Las dimensiones, con 4495 mm de largo y 1707 mm de ancho, le otorgaban una presencia sólida en la carretera. Aunque no era un coche que buscara la extravagancia, su diseño atemporal le permitía envejecer con dignidad, manteniendo una imagen de coche serio y bien construido. El acabado Sport añadía sutiles detalles que realzaban su carácter dinámico sin caer en excesos.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Opel Vectra 2.0 16v Automático de 1995 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo. El motor de 16 válvulas era un claro ejemplo de la búsqueda de eficiencia y rendimiento. La inyección indirecta de gasolina aseguraba una combustión optimizada. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque hoy pueda parecer básica, ofrecía una comodidad de conducción muy apreciada, especialmente en el tráfico urbano. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco en las cuatro ruedas, siendo ventilados los delanteros, lo que mejoraba la capacidad de frenado. La dirección asistida de cremallera facilitaba las maniobras, y la presencia de barras estabilizadoras tanto delante como detrás contribuía a una mayor estabilidad en curva. Era un coche que, sin ser un escaparate de la última tecnología, ofrecía un conjunto bien resuelto y fiable.

Competencia

En el competitivo segmento de las berlinas medias de los años 90, el Opel Vectra 4 puertas Sport 2.0 16v Automático se enfrentaba a duros rivales. Modelos como el Ford Mondeo, el Volkswagen Passat, el Renault Laguna o el Peugeot 406 eran sus principales competidores. Cada uno ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en diseño, equipamiento o dinámica de conducción. El Vectra se posicionaba como una opción sólida y equilibrada, destacando por su fiabilidad mecánica y su confort general, buscando un público que valoraba la practicidad y la durabilidad por encima de la ostentación.

Conclusión

El Opel Vectra 4 puertas Sport 2.0 16v Automático de 1995 fue un coche que cumplió con creces su cometido. Ofrecía una combinación de confort, rendimiento adecuado y fiabilidad que lo convirtió en una opción popular en su segmento. Su diseño sobrio pero elegante, junto con una mecánica probada, lo hacían ideal para el uso diario y los viajes familiares. Aunque los años han pasado, su legado perdura como un ejemplo de la ingeniería alemana de la época, un coche honesto y bien construido que proporcionó muchas satisfacciones a sus propietarios.