Opel Vectra 4p GL 1.8 16v Aut. · 116 CV (1999-2000)

1995
Gasolina
FWD
Automático 4v
Opel Vectra - Vista 1
Opel Vectra - Vista 2
Opel Vectra - Vista 3
Opel Vectra - Vista 4

Especificaciones y análisis del Opel Vectra

Potencia

116CV

Par

170Nm

Consumo

8.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

12.5s

Vel. Máx.

198km/h

Peso

1378kg

Precio

17,043

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

60 L

Potencia

85 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima116 CV / 85 kW
Par máximo170 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Opel Vectra 4p GL 1.8 16v Aut. · 116 CV (1999-2000)

Descripción general

El Opel Vectra de 1995, en su versión de 4 puertas GL 1.8 16v Automático, se presentaba como una berlina media que buscaba conquistar a las familias y profesionales de la época. Con un precio de 17.043 euros, ofrecía una propuesta equilibrada entre confort y funcionalidad, aunque su motor de 116 CV y su transmisión automática de 4 velocidades prometían una experiencia de conducción más relajada que deportiva. Era un coche pensado para el día a día, para viajes cómodos y para aquellos que valoraban la practicidad por encima de las prestaciones puras.

Experiencia de conducción

Al volante del Vectra, la sensación predominante era de suavidad y confort. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, ofrecía una respuesta predecible, ideal para una conducción tranquila. La suspensión tipo McPherson en el eje delantero, junto con las barras estabilizadoras en ambos ejes, filtraba bien las irregularidades del asfalto, proporcionando un viaje placentero. Sin embargo, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 12.5 segundos y una velocidad máxima de 198 km/h, no era un coche que invitara a las emociones fuertes. Su consumo combinado de 8.4 l/100km era razonable para la época, pero en ciudad, los 11.9 l/100km podían ser un factor a considerar. Era un coche para disfrutar del camino sin prisas, con una respuesta dócil y predecible.

Diseño y estética

El diseño del Opel Vectra de 1995 era sobrio y funcional, con líneas que buscaban la elegancia sin estridencias. Sus 4.495 mm de longitud, 1.707 mm de anchura y 1.425 mm de altura le conferían una presencia discreta pero sólida en la carretera. La carrocería de 4 puertas, con un maletero de 500 litros, destacaba por su practicidad y capacidad de carga, ideal para las necesidades familiares. Las llantas de 15 pulgadas con neumáticos 195/65 R15 H contribuían a una estética equilibrada y a una buena estabilidad. Era un diseño que envejecía con dignidad, sin grandes alardes pero con una clara vocación de servicio.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Vectra de 1995 incorporaba lo esencial para la época. Su motor de gasolina de 1.8 litros y 16 válvulas, con inyección indirecta, ofrecía una potencia de 116 CV a 5400 rpm y un par motor de 170 Nm a 3400 rpm. La transmisión automática de 4 velocidades era un punto clave para la comodidad en la conducción urbana y en carretera. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, un estándar para el segmento. Aunque no destacaba por innovaciones revolucionarias, su tecnología estaba orientada a ofrecer una experiencia de conducción fiable y sin complicaciones.

Competencia

En el mercado de las berlinas medias de 1995, el Opel Vectra se enfrentaba a duros competidores. Modelos como el Ford Mondeo, el Volkswagen Passat, el Renault Laguna o el Peugeot 406 ofrecían alternativas con diferentes enfoques en cuanto a diseño, prestaciones y equipamiento. El Vectra se posicionaba como una opción sensata y equilibrada, quizás sin el dinamismo de algunos de sus rivales, pero con una reputación de fiabilidad y un buen espacio interior que lo hacían atractivo para un público que buscaba un coche práctico y duradero.

Conclusión

El Opel Vectra 4 puertas GL 1.8 16v Automático de 1995 fue un coche que cumplió con su cometido: ofrecer una berlina media cómoda, espaciosa y fiable para el día a día. No buscaba ser el más rápido ni el más lujoso, sino un compañero de viaje honesto y funcional. Su diseño atemporal, su confort de marcha y su practicidad lo convirtieron en una opción popular para muchas familias. Aunque sus prestaciones no eran de infarto y su consumo en ciudad podía ser elevado, su equilibrio general y su reputación de durabilidad lo hacían una compra inteligente para aquellos que valoraban la tranquilidad y la eficiencia en el uso cotidiano.