Especificaciones y análisis del Opel Signum
Potencia
177CV
Par
370Nm
Consumo
7.7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.9s
Vel. Máx.
218km/h
Peso
1735kg
Precio
30,930€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 5v
FWD
5 / 5 puertas
365 L
60 L
130 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Signum Design 3.0 V6 CDTI 24V Active Select · 177 CV (2003-2005)
Descripción general
El Opel Signum Design 3.0 V6 CDTI 24V Active Select de 2003 es una propuesta audaz de Opel, un vehículo que buscaba redefinir el concepto de berlina de lujo con un toque de versatilidad. Con su motor diésel de 177 CV y una transmisión automática de 5 velocidades, prometía un viaje confortable y potente. Este modelo se posicionó como una alternativa interesante para aquellos que buscaban algo diferente en el segmento, combinando la elegancia de una berlina con la practicidad de un familiar, aunque con una estética que generó opiniones divididas.
Experiencia de conducción
Al volante del Signum, la sensación predominante es de solidez y confort. El motor 3.0 V6 CDTI entrega una potencia suave y constante, ideal para largos viajes por carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 9.9 segundos es respetable para su tamaño y peso, y la velocidad máxima de 218 km/h permite mantener ritmos elevados sin esfuerzo. La suspensión, con McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un rodar aplomado. La dirección, sensible a la velocidad, contribuye a una conducción precisa y segura. Sin embargo, su peso de 1735 kg se hace notar en curvas cerradas, donde no es el más ágil, pero su enfoque está claramente en el confort y la estabilidad.
Diseño y estética
El diseño del Opel Signum es, sin duda, uno de sus puntos más distintivos y controvertidos. Con una longitud de 4636 mm y una distancia entre ejes de 2830 mm, se presenta como una berlina de gran tamaño, pero su silueta trasera, más elevada y con un portón, le confiere un aire de 'hatchback' grande o incluso de monovolumen. Las líneas son limpias y funcionales, con una parrilla frontal que denota la identidad de Opel de la época. El interior, con sus 5 plazas y un maletero de 365 litros, está diseñado para maximizar el espacio y la modularidad, aunque estéticamente puede resultar algo sobrio para algunos gustos. La elección de neumáticos 215/55 R16 V en ambos ejes complementa su imagen robusta.
Tecnología y características
En 2003, el Opel Signum incorporaba tecnología avanzada para su segmento. El motor 3.0 V6 CDTI con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, era un referente en eficiencia y rendimiento diésel. La transmisión automática Active Select de 5 velocidades ofrecía cambios suaves y la posibilidad de un control manual secuencial. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 314 mm delante y 292 mm detrás, garantizando una buena capacidad de frenado. La dirección de cremallera con asistencia sensible a la velocidad mejoraba la experiencia de conducción. Aunque no se especifican detalles de infoentretenimiento, es de esperar que incluyera los sistemas de audio y climatización habituales en vehículos de su categoría en ese momento.
Competencia
El Opel Signum se enfrentaba a rivales de peso en el segmento de berlinas medias-grandes, aunque su concepto híbrido lo hacía un tanto único. Competía con modelos como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Renault Laguna o el Peugeot 406, e incluso con algunas versiones de entrada de berlinas premium como el BMW Serie 3 o el Audi A4. Su propuesta de mayor espacio interior y modularidad lo diferenciaba, buscando atraer a clientes que valoraban la versatilidad sin renunciar al confort de una berlina. Sin embargo, su diseño particular y su posicionamiento en el mercado hicieron que su éxito fuera más limitado frente a competidores más tradicionales.
Conclusión
El Opel Signum Design 3.0 V6 CDTI 24V Active Select de 2003 fue un coche con una personalidad marcada, que intentó ofrecer una alternativa diferente en el mercado. Su potente y refinado motor diésel, junto con un interior espacioso y confortable, lo convertían en un excelente compañero de viaje. Aunque su diseño no fue del agrado de todos y su concepto no terminó de cuajar en el mercado, representó un esfuerzo de Opel por innovar y ofrecer soluciones prácticas. Hoy en día, es un coche que puede ofrecer un gran valor como vehículo de segunda mano para aquellos que buscan espacio, confort y un motor diésel robusto a un precio asequible.