Especificaciones y análisis del Opel Astra
Potencia
68CV
Par
132Nm
Consumo
6.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
17.5s
Vel. Máx.
158km/h
Peso
1200kg
Precio
13,637€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
480 L
52 L
50 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Astra Caravan Club 1.7 TD · 68 CV (1998-2000)
Descripción general
El Opel Astra Caravan Club 1.7 TD de 1998 es un vehículo que, a pesar de los años, sigue evocando una sensación de practicidad y fiabilidad. Este modelo, con su carrocería familiar, fue diseñado para aquellos que buscaban un coche espacioso y económico para el día a día, sin grandes pretensiones, pero con la solidez que caracterizaba a Opel en esa época. Su motor diésel de 68 CV, aunque modesto, prometía un consumo contenido y una durabilidad notable, convirtiéndolo en una opción sensata para familias y profesionales.
Experiencia de conducción
Al volante del Astra Caravan Club 1.7 TD, la experiencia es honesta y sin artificios. No esperes aceleraciones fulgurantes (17.5 segundos de 0 a 100 km/h) ni una velocidad punta de vértigo (158 km/h), pero sí una conducción predecible y cómoda. El motor diésel, con sus 132 Nm de par a 1800 rpm, ofrece una respuesta adecuada para moverse con soltura en el tráfico urbano y mantener cruceros razonables en carretera. La suspensión, aunque no es la más sofisticada, absorbe bien las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje confortable. La dirección, de cremallera, transmite una sensación de control, aunque sin la precisión de sistemas más modernos. Es un coche que te lleva del punto A al B de forma eficiente y sin sobresaltos, ideal para quienes valoran la tranquilidad y la economía de uso por encima de las prestaciones deportivas.
Diseño y estética
El diseño del Opel Astra Caravan Club de 1998 es un reflejo de su época: funcional y sin estridencias. La carrocería familiar, con sus 4288 mm de longitud, 1709 mm de anchura y 1465 mm de altura, prioriza el espacio interior y la capacidad de carga. Las líneas son limpias y sencillas, con una estética que busca la atemporalidad más que la vanguardia. El frontal presenta los rasgos característicos de Opel de finales de los 90, con faros de tamaño generoso y una parrilla discreta. Las llantas de 14 pulgadas con neumáticos 175/70 R14 son acordes a su enfoque práctico. En el interior, la disposición de los mandos es lógica y ergonómica, con materiales que, aunque no son lujosos, se perciben robustos y duraderos. El maletero, con 480 litros, es uno de sus puntos fuertes, ofreciendo una gran versatilidad para el transporte de equipaje o carga.
Tecnología y características
En 1998, la tecnología del Opel Astra Caravan Club 1.7 TD se centraba en la eficiencia y la fiabilidad mecánica. Su motor diésel de 1.7 litros, con inyección indirecta, turbo e intercooler, era una solución probada para ofrecer un buen equilibrio entre potencia y consumo. La caja de cambios manual de 5 velocidades, de accionamiento suave y preciso, contribuía a optimizar el rendimiento. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y tambores traseros, una configuración estándar para la época. La dirección asistida, aunque no se especifica el tipo exacto, facilitaba las maniobras. No esperes grandes alardes tecnológicos como pantallas táctiles o sistemas de asistencia a la conducción avanzados, ya que este modelo se enfoca en lo esencial, ofreciendo lo necesario para una conducción segura y funcional.
Competencia
En su segmento y época, el Opel Astra Caravan Club 1.7 TD se enfrentaba a una competencia sólida. Entre sus principales rivales se encontraban modelos como el Volkswagen Golf Variant, el Ford Focus Wagon, el Renault Mégane Break o el Peugeot 306 Break. Cada uno ofrecía sus propias virtudes, pero el Astra destacaba por su equilibrio general, su reputación de fiabilidad y su buena relación calidad-precio. Mientras que algunos rivales podían ofrecer motores más potentes o un diseño más atrevido, el Astra se mantenía como una opción sensata y práctica, ideal para quienes buscaban un compañero de viaje duradero y sin complicaciones.
Conclusión
El Opel Astra Caravan Club 1.7 TD de 1998 es un coche que, a pesar de su edad, sigue siendo un testimonio de la ingeniería práctica y duradera de Opel. Es un vehículo que no busca impresionar con lujos o prestaciones extremas, sino que se enfoca en ofrecer un transporte fiable, espacioso y económico. Su motor diésel, aunque modesto en potencia, es un ejemplo de eficiencia y resistencia. Para aquellos que valoran la funcionalidad, la economía de uso y la robustez por encima de todo, este Astra Caravan sigue siendo una opción digna de consideración, un clásico que cumple su cometido con una honestidad admirable.




