Especificaciones y análisis del Opel Astra
Potencia
125CV
Par
280Nm
Consumo
6.3l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.9s
Vel. Máx.
203km/h
Peso
1310kg
Precio
21,159€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 3 puertas
370 L
52 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Astra 3p Sport 2.2 DTi 16V · 125 CV (2002-2004)
Descripción general
El Opel Astra 3p Sport 2.2 DTi 16V, fabricado entre 2002 y 2004, es un compacto que, a pesar de los años, aún evoca una sensación de robustez y fiabilidad. Con su motor diésel de 125 CV, prometía un equilibrio entre rendimiento y eficiencia, ideal para quienes buscaban un coche práctico pero con un toque deportivo. Su precio de 21.159 € en su momento lo posicionaba como una opción atractiva en el segmento.
Experiencia de conducción
Al volante de este Astra, la sensación es de solidez. El motor 2.2 DTi, con sus 125 CV y un par motor de 280 Nm a solo 1500 rpm, ofrece una respuesta contundente desde bajas revoluciones, lo que se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.9 segundos y una velocidad máxima de 203 km/h. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, proporciona un buen compromiso entre confort y estabilidad, aunque sin llegar a la agilidad de otros deportivos de la época. La dirección de cremallera, aunque carece de asistencia variable, transmite una conexión decente con la carretera. El consumo combinado de 6.3 l/100km era bastante bueno para su época, permitiendo viajes largos sin demasiadas paradas en la gasolinera. En general, es un coche que invita a la conducción relajada pero que no se arruga si se le exige un poco más.
Diseño y estética
El diseño del Opel Astra de 1998, en su versión de 3 puertas, es un reflejo de la estética de finales de los 90 y principios de los 2000. Sus líneas son limpias y funcionales, con una silueta compacta y un aire deportivo que se acentúa en la versión Sport. Los faros delanteros son grandes y envolventes, y la parrilla frontal incorpora el logo de Opel de forma prominente. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 205/50 R16 V le otorgan una presencia más robusta. En el interior, la funcionalidad prima sobre el lujo, con un salpicadero bien organizado y materiales duraderos. A pesar de su edad, el diseño sigue siendo reconocible y, para algunos, incluso atemporal dentro de su segmento.
Tecnología y características
En cuanto a tecnología, el Opel Astra 3p Sport 2.2 DTi 16V de esta generación se sitúa en un punto intermedio. Su motor diésel de inyección directa con turbo de geometría variable e intercooler era una tecnología avanzada para la época, ofreciendo una buena combinación de potencia y eficiencia. La transmisión manual de 5 velocidades es robusta y fiable. En términos de seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 280 mm delante y discos de 264 mm detrás, lo que garantizaba una frenada eficaz. Sin embargo, carecía de muchas de las ayudas a la conducción y sistemas de infoentretenimiento que hoy consideramos estándar. Su tecnología se centraba en la mecánica y la durabilidad, más que en la conectividad o la digitalización.
Competencia
En su momento, el Opel Astra 3p Sport 2.2 DTi 16V se enfrentaba a duros competidores en el segmento de los compactos diésel deportivos. Entre sus principales rivales se encontraban el Volkswagen Golf TDI, el Ford Focus TDCi y el Peugeot 307 HDi. Cada uno ofrecía sus propias virtudes: el Golf destacaba por su calidad de acabados y su imagen premium, el Focus por su dinamismo de conducción y el 307 por su confort y espacio interior. El Astra se posicionaba como una opción equilibrada, con un motor diésel potente y eficiente, un diseño atractivo y una reputación de fiabilidad que lo hacía muy competitivo en el mercado.
Conclusión
El Opel Astra 3p Sport 2.2 DTi 16V es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo un testimonio de la ingeniería de Opel de principios de siglo. Ofrece un motor diésel robusto y con buen rendimiento, un diseño funcional y una fiabilidad que lo ha mantenido en las carreteras durante mucho tiempo. Es un coche honesto, sin grandes pretensiones de lujo, pero que cumple con creces su función de transporte diario con un toque de deportividad. Para aquellos que buscan un clásico moderno, con un mantenimiento relativamente sencillo y un consumo contenido, este Astra sigue siendo una opción a considerar.