Especificaciones y análisis del Nissan Primera
Potencia
126CV
Par
279Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
194km/h
Peso
1494kg
Precio
21,434€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
450 L
62 L
93 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Nissan Primera 2.2Di Visia 4p · 126 CV (2002-2003)
Descripción general
El Nissan Primera 2.2Di Visia de 2002 es una berlina que, a primera vista, prometía ser una opción sensata y funcional para la familia. Con su motor diésel de 126 CV y una caja de cambios manual de 6 velocidades, se presentaba como un compañero de viaje eficiente y capaz de afrontar largos trayectos con solvencia. Su precio de 21.434 € lo situaba en un segmento competitivo, buscando atraer a aquellos que valoraban la economía de combustible y la practicidad por encima de todo.
Experiencia de conducción
Al volante del Primera 2.2Di Visia, la sensación predominante es de solidez y confort. El motor diésel, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 126 CV de forma lineal y con un par motor de 279 Nm a 2000 rpm que permite recuperaciones decentes. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.9 segundos y una velocidad máxima de 194 km/h lo hacen adecuado para la mayoría de situaciones en carretera. La suspensión, tipo McPherson delante y eje rígido detrás, filtra bien las irregularidades del asfalto, ofreciendo un viaje suave. La dirección de cremallera, aunque carece de la precisión de otros modelos, cumple su función. El consumo combinado de 5.9 l/100km es uno de sus puntos fuertes, haciendo de este coche una opción económica para el día a día y los viajes largos. Sin embargo, no esperes una experiencia de conducción emocionante; su enfoque es claramente práctico y confortable.
Diseño y estética
El diseño del Nissan Primera de 2002 es funcional y discreto, sin grandes alardes estéticos. Sus líneas son limpias y su silueta de berlina de 4 puertas es clásica y atemporal. Con una longitud de 4567 mm, una anchura de 1760 mm y una altura de 1482 mm, ofrece un buen equilibrio entre presencia en carretera y facilidad de maniobra. El interior, aunque no destaca por materiales lujosos, es espacioso y está bien organizado, con un maletero de 450 litros que lo hace muy práctico para el equipaje familiar. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 205/60 R16 contribuyen a una estética sobria y a un buen agarre en carretera.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Nissan Primera 2.2Di Visia de 2002 se mantiene en un nivel adecuado para su época. Su motor diésel de inyección directa por conducto común, turbo con geometría variable e intercooler, es un ejemplo de eficiencia mecánica. La caja de cambios manual de 6 velocidades permite un mejor aprovechamiento del motor y contribuye a un consumo contenido. En cuanto a seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros de 280 mm y discos traseros de 278 mm, lo que asegura una buena capacidad de frenado. Sin embargo, no esperes las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción que encontramos en vehículos más modernos; su tecnología se centra en la fiabilidad y la funcionalidad básica.
Competencia
En su segmento, el Nissan Primera 2.2Di Visia competía con berlinas como el Ford Mondeo, el Opel Vectra o el Volkswagen Passat. Frente a ellos, el Primera ofrecía una alternativa con un enfoque más práctico y una buena relación calidad-precio, destacando por su eficiencia de combustible y su fiabilidad mecánica. Aunque quizás no alcanzaba el refinamiento o la imagen de marca de algunos de sus rivales europeos, se posicionaba como una opción sólida para aquellos que buscaban un coche familiar sin complicaciones y con un coste de mantenimiento razonable.
Conclusión
El Nissan Primera 2.2Di Visia de 2002 es un coche que cumple con lo que promete: una berlina diésel espaciosa, eficiente y fiable, ideal para el uso familiar y los viajes largos. Su diseño discreto, su confort de marcha y su bajo consumo lo convierten en una opción sensata para quienes buscan un vehículo práctico y económico. Aunque no es un coche que despierte pasiones, su honestidad y su buen hacer mecánico lo hacen un compañero de viaje digno de consideración. Es un coche para disfrutar de la carretera sin preocupaciones, con la tranquilidad de saber que te llevará a tu destino de forma cómoda y eficiente.