Especificaciones y análisis del Nissan Almera
Potencia
114CV
Par
158Nm
Consumo
7.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
12.8s
Vel. Máx.
173km/h
Peso
1305kg
Precio
17,338€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
5 / 5 puertas
355 L
60 L
84 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. · 114 CV (2000-2002)
Descripción general
El Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. del año 2000 es un coche que, a primera vista, puede parecer discreto, pero que esconde una propuesta interesante para quienes buscan un vehículo práctico y fiable. Con su carrocería de cinco puertas, se presenta como una opción versátil para el día a día, combinando un tamaño compacto con una habitabilidad sorprendente para su segmento. Este modelo, con su motor de gasolina de 1.8 litros y 114 CV, acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades, promete una conducción cómoda y sin complicaciones, ideal para la ciudad y escapadas ocasionales. Su diseño, aunque no rompedor, es funcional y atemporal, buscando la durabilidad y la eficiencia por encima de las modas pasajeras. Es un coche que, sin grandes alardes, busca ganarse la confianza de sus propietarios a través de la solidez y la sencillez.
Experiencia de conducción
Al volante del Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut., la sensación predominante es la de una conducción suave y relajada. El motor de 114 CV, aunque no es un derroche de potencia, responde con suficiente brío para el uso diario, especialmente en entornos urbanos. La transmisión automática de cuatro velocidades, si bien no es la más rápida del mercado, cumple su función con transiciones fluidas, contribuyendo a una experiencia de manejo sin estrés. La suspensión, de tipo McPherson en la parte delantera y eje rígido en la trasera, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un confort de marcha notable. La dirección, de cremallera, es precisa y facilita las maniobras en espacios reducidos, mientras que los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros proporcionan una detención segura. En carretera, el Almera se muestra estable y predecible, invitando a viajes tranquilos más que a una conducción deportiva. Es un coche que te acompaña, sin exigirte más de lo necesario, haciendo que cada trayecto sea una experiencia agradable y sin sobresaltos.
Diseño y estética
El diseño del Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. es un reflejo de la filosofía de la marca en aquella época: funcionalidad y sobriedad. Sus líneas son limpias y sencillas, sin estridencias, buscando una estética que perdure en el tiempo. La carrocería de cinco puertas le confiere una silueta equilibrada y práctica, con un acceso cómodo a las plazas traseras y un maletero de 355 litros que, sin ser el más grande, es suficiente para las necesidades cotidianas. Los faros delanteros, de tamaño generoso, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la parrilla, con el logo de Nissan en el centro, le otorga una identidad clara. En el interior, la disposición de los elementos es lógica y ergonómica, con materiales que, aunque no son lujosos, transmiten una sensación de robustez y durabilidad. Cada detalle está pensado para la practicidad, desde los mandos de la consola central hasta la visibilidad general desde el puesto de conducción. Es un diseño que no busca impresionar, sino servir fielmente a su propósito.
Tecnología y características
En el año 2000, el Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. incorporaba una tecnología que, si bien hoy puede parecer básica, era adecuada para su segmento y época. Su motor de gasolina de 1.8 litros, con inyección indirecta y admisión variable, buscaba optimizar la entrega de potencia y el consumo de combustible. La transmisión automática de cuatro velocidades, aunque no ofrecía la sofisticación de las cajas modernas, proporcionaba una conducción relajada y sin la necesidad de cambiar de marcha manualmente. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco en ambos ejes, siendo ventilados los delanteros, lo que contribuía a una mayor eficacia de frenado. La dirección de cremallera, asistida, facilitaba las maniobras. En el interior, aunque no se especifican grandes alardes tecnológicos, se esperaba un equipamiento funcional que incluía elementos básicos de confort y entretenimiento. La tecnología del Almera estaba orientada a la fiabilidad y la facilidad de uso, priorizando la durabilidad de sus componentes sobre las innovaciones más punteras.
Competencia
En el competitivo segmento de los compactos del año 2000, el Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. se enfrentaba a una dura competencia. Entre sus principales rivales se encontraban modelos como el Volkswagen Golf, un referente por su calidad de construcción y comportamiento dinámico; el Ford Focus, alabado por su agilidad y diseño innovador; el Opel Astra, que ofrecía una buena relación calidad-precio y una gama de motores variada; y el Renault Mégane, con su confort y un diseño distintivo. Otros contendientes importantes eran el Honda Civic, conocido por su fiabilidad y motores eficientes, y el Toyota Corolla, otro peso pesado en cuanto a durabilidad. Frente a ellos, el Almera se posicionaba como una alternativa sólida y fiable, quizás menos llamativa en diseño o prestaciones puras, pero con la promesa de una mecánica robusta y un mantenimiento contenido, apelando a un público que valoraba la practicidad y la tranquilidad por encima de todo.
Conclusión
El Nissan Almera 1.8 Luxury 5p Aut. del año 2000 es un coche que, a pesar de no ser un icono de diseño o un portento de prestaciones, cumple con creces su cometido como vehículo práctico y fiable. Su motor de 114 CV y su transmisión automática ofrecen una conducción cómoda y sin complicaciones, ideal para el día a día y para aquellos que buscan un transporte eficiente. Su diseño sobrio y funcional, junto con un interior espacioso y bien pensado, lo convierten en una opción sensata para familias o para quienes necesitan un coche versátil. Aunque no destacaba por su tecnología de vanguardia en su momento, su enfoque en la durabilidad y la sencillez lo hacía un compañero de viaje digno de confianza. En definitiva, el Almera es un coche honesto, que no promete más de lo que ofrece, y que se gana el respeto por su solidez y su capacidad para cumplir con las expectativas de un uso cotidiano sin sorpresas desagradables. Es un coche que, con el paso del tiempo, ha demostrado ser un fiel compañero de viaje.