Mitsubishi Montero 5p 3.2 DI-D GLS Kaiteki Aut. · 165 CV (2000-2003)

2000
Gasóleo
AWD
Automático 5v

Especificaciones y análisis del Mitsubishi Montero

Potencia

165CV

Par

373Nm

Consumo

10.3l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

13.8s

Vel. Máx.

170km/h

Peso

2155kg

Precio

49,651

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 5v

Tracción

AWD

Plazas

7 / 5 puertas

Maletero

- L

Depósito

71 L

Potencia

121 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima165 CV / 121 kW
Par máximo373 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito71 L
Maletero0 L

Análisis detallado del Mitsubishi Montero 5p 3.2 DI-D GLS Kaiteki Aut. · 165 CV (2000-2003)

Descripción general

El Mitsubishi Montero 5p 3.2 DI-D GLS Kaiteki Aut. de 2000 es un todoterreno robusto y espacioso, diseñado para la aventura y la comodidad familiar. Con su motor diésel de 165 CV y tracción integral, se posiciona como una opción formidable para quienes buscan un vehículo capaz tanto en carretera como fuera de ella, ofreciendo una combinación de potencia y versatilidad.

Experiencia de conducción

Al volante del Montero, la sensación de seguridad y dominio es palpable. Su motor diésel de 3.2 litros, con 165 CV y un par motor de 373 Nm a 2000 rpm, proporciona una respuesta contundente, ideal para superar obstáculos o para un adelantamiento seguro. La transmisión automática de 5 velocidades contribuye a una conducción suave y relajada, aunque en terrenos exigentes, su peso de 2155 kg y su aceleración de 0 a 100 km/h en 13.8 segundos nos recuerdan que no es un vehículo de carreras, sino un compañero fiable para la aventura. La suspensión, con paralelogramo deformable en el eje delantero, absorbe bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un confort notable para un todoterreno de su época.

Diseño y estética

El diseño del Mitsubishi Montero de 2000 es inconfundiblemente robusto y funcional. Sus líneas cuadradas y su imponente presencia transmiten una sensación de durabilidad y capacidad. Con 4795 mm de largo, 1875 mm de ancho y 1855 mm de alto, es un vehículo de grandes dimensiones que no pasa desapercibido. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 265/70 R16 refuerzan su carácter todoterreno. El interior, aunque no destaca por lujos excesivos, es práctico y espacioso, con capacidad para siete ocupantes, lo que lo convierte en un compañero ideal para viajes largos en familia o con amigos.

Tecnología y características

En el año 2000, el Montero incorporaba una tecnología sólida para su segmento. Su motor diésel de inyección directa con turbo e intercooler era un referente en eficiencia y rendimiento. La tracción integral (AWD) y la transmisión automática de 5 velocidades garantizaban un control óptimo en diversas condiciones de conducción. Aunque carecía de las sofisticadas ayudas electrónicas de los vehículos modernos, su dirección de cremallera y los frenos de disco ventilados en ambos ejes ofrecían una respuesta fiable y segura. La construcción del motor con bloque de hierro y culata de aluminio era una muestra de ingeniería robusta y duradera.

Competencia

En su época, el Mitsubishi Montero competía con todoterrenos de la talla del Toyota Land Cruiser, el Nissan Patrol y el Land Rover Discovery. Frente a ellos, el Montero ofrecía una excelente relación calidad-precio, una fiabilidad contrastada y una capacidad todoterreno muy respetable. Su motor diésel de 3.2 litros era competitivo en potencia y par, y su habitabilidad para siete plazas lo hacía muy atractivo para familias numerosas o para quienes necesitaban espacio extra.

Conclusión

El Mitsubishi Montero 5p 3.2 DI-D GLS Kaiteki Aut. de 2000 es un todoterreno que ha dejado huella. Es un vehículo honesto, robusto y capaz, que cumple con creces su promesa de aventura y versatilidad. Su diseño atemporal, su motor fiable y su capacidad para siete pasajeros lo convierten en una opción muy interesante para aquellos que buscan un compañero de viaje duradero y con carácter. Aunque sus consumos (10.3 l/100km combinado) y su aceleración no son los de un coche moderno, su espíritu aventurero y su fiabilidad lo compensan con creces.