Especificaciones y análisis del Mitsubishi Lancer
Potencia
150CV
Par
300Nm
Consumo
5.8l/100
Emisiones
153g/km
0-100 km/h
10.1s
Vel. Máx.
204km/h
Peso
1575kg
Precio
21,630€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
330 L
59 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mitsubishi Lancer Sportback Motion 200 DI-D · 150 CV (2011-2012)
Descripción general
El Mitsubishi Lancer Sportback Motion 200 DI-D de 2009 es una propuesta audaz y distintiva en el segmento de los compactos. Con su carrocería Sportback, este Lancer se desmarca de lo convencional, ofreciendo una estética que combina la deportividad con la practicidad de un portón trasero. Es un coche que, a primera vista, promete emociones y un carácter propio, alejado de la sobriedad de otros modelos de su época.
Experiencia de conducción
Al volante, el Lancer Sportback Motion 200 DI-D ofrece una experiencia de conducción que busca el equilibrio entre confort y dinamismo. Su motor diésel de 150 CV, con 300 Nm de par, entrega una respuesta enérgica, especialmente a medio régimen, lo que facilita los adelantamientos y la conducción en carretera. La caja de cambios manual de 6 velocidades permite exprimir al máximo el potencial del motor, mientras que la suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, junto con las barras estabilizadoras, proporciona una buena estabilidad y un paso por curva ágil. La dirección asistida eléctrica, aunque no siempre transmite la mayor información, cumple su función con precisión. Es un coche que invita a disfrutar de la carretera, con una sensación de control y seguridad.
Diseño y estética
El diseño del Lancer Sportback es, sin duda, uno de sus puntos fuertes y más controvertidos. Su frontal agresivo, con la característica parrilla 'Jet Fighter', le otorga una presencia imponente. La línea del techo desciende suavemente hacia la zaga, culminando en un portón trasero que le confiere una silueta única y deportiva. Las llantas de 18 pulgadas, con neumáticos 215/45 R18, refuerzan su imagen atlética. En el interior, el diseño es funcional y sobrio, con materiales que, aunque no destacan por su lujo, son robustos y están bien ensamblados. La habitabilidad es correcta para cuatro ocupantes, y el maletero, con 330 litros, es suficiente para el uso diario, aunque no es el más grande de su categoría.
Tecnología y características
En cuanto a tecnología, el Lancer Sportback Motion 200 DI-D de 2009 incorpora elementos que, para su época, eran adecuados. El motor diésel de 1.8 litros con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La construcción del bloque y la culata en aluminio contribuye a un peso contenido. En el apartado de seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delante y discos macizos detrás, garantizando una buena capacidad de frenada. La dirección asistida eléctrica y la suspensión bien calibrada contribuyen a una conducción segura y predecible. Aunque no incorpora las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción que vemos hoy, cumple con lo esperado para un coche de su generación.
Competencia
En el competitivo segmento de los compactos, el Mitsubishi Lancer Sportback se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Golf, el Ford Focus, el Opel Astra o el Mazda 3. Frente a ellos, el Lancer ofrecía una estética más atrevida y un carácter más deportivo, especialmente en esta versión Sportback. Si bien algunos de sus competidores podían superarlo en calidad de acabados interiores o en opciones de equipamiento, el Lancer se distinguía por su fiabilidad mecánica y su propuesta de diseño diferenciadora, atrayendo a aquellos que buscaban algo más que un simple compacto.
Conclusión
El Mitsubishi Lancer Sportback Motion 200 DI-D de 2009 es un coche con personalidad. Su diseño audaz lo hace destacar, y su motor diésel de 150 CV ofrece un rendimiento satisfactorio para el día a día y para viajes largos. Es un vehículo que, sin ser el más lujoso o el más tecnológico de su segmento, cumple con creces en términos de conducción, fiabilidad y practicidad. Es una opción interesante para quienes buscan un compacto con un toque deportivo y una estética que no pasa desapercibida, ofreciendo una experiencia de conducción honesta y gratificante.




