Especificaciones y análisis del Mitsubishi Grandis
Potencia
136CV
Par
310Nm
Consumo
6.6l/100
Emisiones
176g/km
0-100 km/h
10.8s
Vel. Máx.
195km/h
Peso
1785kg
Precio
30,500€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
7 / 5 puertas
940 L
65 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mitsubishi Grandis 2.0 DI-D Intense · 136 CV (2005-2007)
Descripción general
El Mitsubishi Grandis 2.0 DI-D Intense de 2005 se presenta como un monovolumen familiar que busca combinar la funcionalidad con un toque de distinción. Con su motor diésel de 136 CV, promete un equilibrio entre rendimiento y eficiencia, ideal para las exigencias del día a día y los viajes largos en familia. Su diseño, aunque enfocado en la practicidad, no renuncia a una estética que lo diferencia de otros vehículos de su segmento, ofreciendo un espacio interior generoso y versátil para hasta siete ocupantes.
Experiencia de conducción
Al volante del Grandis, la sensación es de solidez y control. El motor 2.0 DI-D, con sus 136 CV y un par motor de 310 Nm disponible desde las 1750 rpm, ofrece una respuesta enérgica y progresiva, permitiendo adelantamientos seguros y una buena capacidad de recuperación. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.8 segundos y una velocidad máxima de 195 km/h son cifras respetables para un vehículo de su tamaño y peso. La caja de cambios manual de 6 velocidades es precisa y contribuye a una conducción placentera. En carretera, el Grandis se muestra estable y confortable, absorbiendo bien las irregularidades del terreno. En ciudad, su tamaño puede requerir cierta adaptación, pero la dirección, aunque no es de asistencia variable, facilita las maniobras. El consumo combinado de 6.6 l/100km es un punto a favor para la economía familiar.
Diseño y estética
El diseño del Mitsubishi Grandis se distingue por sus líneas fluidas y una silueta que, sin ser excesivamente atrevida, logra un aspecto moderno y elegante para su época. Sus 4765 mm de longitud, 1795 mm de anchura y 1655 mm de altura le confieren una presencia imponente en la carretera. Los faros delanteros, con su forma alargada, y la parrilla frontal, le otorgan una personalidad propia. En el interior, la funcionalidad es clave, con un habitáculo diseñado para maximizar el espacio y la comodidad de los siete pasajeros. La versatilidad de los asientos permite múltiples configuraciones, adaptándose a las necesidades de carga o de pasajeros. Los materiales, aunque no son de lujo, transmiten una sensación de durabilidad y buen ajuste.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Grandis 2.0 DI-D Intense de 2005 incorpora elementos que, para su tiempo, eran bastante avanzados. El motor diésel de inyección directa por bomba inyector, con turbo de geometría variable e intercooler, es un claro ejemplo de la ingeniería de Mitsubishi para optimizar el rendimiento y la eficiencia. La transmisión manual de 6 velocidades permite un mejor aprovechamiento de la potencia y contribuye a reducir el consumo. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, así como estabilizadores en ambos ejes para una mayor estabilidad. Aunque no se especifican sistemas de asistencia a la conducción modernos, su equipamiento básico cumple con las expectativas de un vehículo familiar de su generación.
Competencia
En el competitivo segmento de los monovolúmenes, el Mitsubishi Grandis se enfrentaba a duros rivales como el Renault Espace, el Ford Galaxy, el Volkswagen Sharan o el Chrysler Grand Voyager. Frente a ellos, el Grandis ofrecía un diseño distintivo, una buena relación calidad-precio y la reputación de fiabilidad de la marca japonesa. Su motor diésel de 136 CV se situaba en un punto intermedio en cuanto a potencia, ofreciendo un buen equilibrio entre prestaciones y consumo. La versatilidad de su interior y la capacidad para siete plazas eran argumentos sólidos para las familias que buscaban un vehículo espacioso y funcional.
Conclusión
El Mitsubishi Grandis 2.0 DI-D Intense de 2005 es un monovolumen que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo una opción interesante para quienes buscan un vehículo familiar espacioso, fiable y con un coste de mantenimiento razonable. Su motor diésel ofrece un buen rendimiento y un consumo contenido, mientras que su diseño, aunque discreto, mantiene una elegancia atemporal. La versatilidad de su interior y la capacidad para siete ocupantes lo convierten en un compañero ideal para las aventuras familiares. Es un coche que, sin grandes alardes, cumple con creces su función, ofreciendo confort y seguridad en cada viaje.