Especificaciones y análisis del MINI MINI Clubman
Potencia
109CV
Par
240Nm
Consumo
4.1l/100
Emisiones
109g/km
0-100 km/h
10.4s
Vel. Máx.
193km/h
Peso
1250kg
Precio
22,110€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
260 L
40 L
80 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del MINI Clubman Cooper D · 109 CV (2010)
Descripción general
El MINI Clubman Cooper D de 2007 es una propuesta audaz y distintiva dentro del segmento de los compactos, ofreciendo una alternativa con un toque de originalidad y un espíritu inconfundiblemente MINI. Con su motor diésel de 109 CV, este modelo busca combinar la eficiencia con el placer de conducción que caracteriza a la marca, todo ello envuelto en una carrocería que rompe con lo convencional.
Experiencia de conducción
Al volante del Clubman Cooper D, la sensación es de agilidad y diversión. El motor diésel, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 240 Nm de par desde bajas revoluciones, lo que se traduce en una respuesta enérgica y una buena capacidad de recuperación. La dirección asistida eléctrica es precisa y comunicativa, invitando a enlazar curvas con confianza. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, ofrece un equilibrio notable entre confort y firmeza, absorbiendo las irregularidades del asfalto sin sacrificar el dinamismo. Es un coche que se siente pegado a la carretera, transmitiendo una seguridad que invita a disfrutar de cada trayecto.
Diseño y estética
El diseño del MINI Clubman es, sin duda, su carta de presentación más llamativa. Mantiene la esencia del MINI clásico, pero lo estira y le añade una puerta trasera de apertura lateral en el lado derecho, la 'Clubdoor', que facilita el acceso a las plazas traseras, y un portón trasero de doble hoja que evoca a las furgonetas clásicas. Sus dimensiones compactas, con 3945 mm de largo, 1683 mm de ancho y 1426 mm de alto, le otorgan una presencia única. Las llantas de 15 pulgadas con neumáticos 175/65 R15 contribuyen a su estética retro-moderna, mientras que los detalles cromados y la posibilidad de personalizar el techo y los retrovisores refuerzan su carácter exclusivo. Es un coche que no deja indiferente, un icono de estilo que se atreve a ser diferente.
Tecnología y características
A pesar de su estética retro, el MINI Clubman Cooper D incorpora tecnología pensada para la eficiencia y el confort. Su motor diésel de 1.6 litros y 109 CV cuenta con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, lo que le permite ofrecer un consumo combinado de tan solo 4.1 l/100km y unas emisiones de CO2 de 109 g/km. La transmisión manual de 6 velocidades optimiza el rendimiento y el consumo. Además, cuenta con sistema Stop&Start, una característica avanzada para la época que contribuye a reducir el gasto de combustible en ciudad. La dirección asistida eléctrica sensible a la velocidad mejora la maniobrabilidad y la estabilidad en carretera. En el interior, aunque el diseño es clásico, la instrumentación y los controles están dispuestos de forma ergonómica, ofreciendo una experiencia de usuario intuitiva.
Competencia
En el mercado de 2007, el MINI Clubman Cooper D se enfrentaba a rivales que, si bien no ofrecían su peculiar diseño, competían en el segmento de los compactos premium o con un enfoque más dinámico. Podríamos considerar como competidores a modelos como el Audi A3 Sportback, el Volkswagen Golf Variant o incluso el Alfa Romeo 147, aunque ninguno de ellos replicaba la propuesta de carrocería del Clubman. Su principal diferenciador era su estilo y la experiencia de conducción 'go-kart' que MINI siempre ha prometido, lo que lo situaba en un nicho muy particular para aquellos que buscaban algo más que un simple coche familiar.
Conclusión
El MINI Clubman Cooper D de 2007 es un coche con alma, una declaración de intenciones para aquellos que valoran el diseño, la personalidad y una conducción divertida sin renunciar a una cierta practicidad. Su motor diésel ofrece un equilibrio excelente entre prestaciones y eficiencia, convirtiéndolo en una opción atractiva para el día a día y para escapadas. Es un vehículo que, a pesar de sus años, sigue conservando ese encanto especial que solo MINI sabe imprimir a sus creaciones. Un coche para disfrutar, para ser visto y para marcar la diferencia en la carretera.




