Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase M
Potencia
347CV
Par
510Nm
Consumo
14.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
6.8s
Vel. Máx.
235km/h
Peso
2300kg
Precio
85,400€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
AWD
5 / 5 puertas
633 L
83 L
255 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz ML 55 AMG · 347 CV (2001-2004)
Descripción general
El Mercedes-Benz ML 55 AMG de 2002 es una bestia todoterreno que desafía las convenciones. No es solo un SUV, es una declaración de intenciones, una fusión audaz de lujo, potencia y una capacidad que pocos esperaban de un vehículo de su estirpe. Con su motor V8 de 5.4 litros y 347 CV, este ML 55 AMG no solo te lleva a cualquier parte, sino que lo hace con una autoridad y una velocidad que te dejarán sin aliento. Es un coche para aquellos que buscan la emoción de un deportivo sin renunciar a la versatilidad y el espacio de un SUV.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del ML 55 AMG es una experiencia visceral. El rugido del motor V8 al arrancar es una sinfonía para los amantes de la gasolina, una promesa de lo que está por venir. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 6.8 segundos es impresionante para un vehículo de su tamaño y peso, pegándote al asiento con una fuerza inesperada. La velocidad máxima de 235 km/h te permite devorar kilómetros en autopista con una facilidad pasmosa. A pesar de su tamaño, la suspensión y la dirección están afinadas para ofrecer una sensación de control y agilidad que sorprende. Es un coche que te invita a pisar el acelerador, a sentir la potencia bajo tu pie derecho y a disfrutar de cada curva con una confianza inquebrantable. Sin embargo, su consumo de combustible, con 14.8 l/100km combinados, te recordará que la diversión tiene un precio.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz ML 55 AMG de 2002 es robusto y musculoso, con una presencia imponente que no pasa desapercibida. Las líneas son clásicas de la Clase M de la época, pero los toques AMG le otorgan una agresividad distintiva. Las llantas de 18 pulgadas con neumáticos anchos (285/50 R18 W) no solo mejoran el agarre, sino que también contribuyen a su postura atlética. Los detalles cromados y los paragolpes específicos AMG refuerzan su carácter deportivo. En el interior, el lujo y la funcionalidad se dan la mano. Los asientos de cuero, los acabados de alta calidad y un salpicadero bien organizado crean un ambiente sofisticado y confortable. A pesar de ser un modelo de principios de los 2000, su diseño interior sigue transmitiendo una sensación de solidez y calidad que perdura en el tiempo.
Tecnología y características
Aunque el ML 55 AMG de 2002 no cuenta con la tecnología de conectividad de los vehículos modernos, en su época representaba la vanguardia en ingeniería automotriz. Su motor V8 de 5.4 litros con inyección indirecta y 347 CV es una obra maestra de la mecánica, ofreciendo una entrega de potencia suave y contundente. La transmisión automática de 5 velocidades, combinada con la tracción integral (AWD), garantiza una tracción óptima en diversas condiciones. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con las barras estabilizadoras, proporciona un equilibrio entre confort y dinamismo. Los frenos de disco ventilados de gran tamaño (345 mm delante y 331 mm detrás) aseguran una capacidad de frenado excepcional, vital para controlar tanta potencia. La dirección de cremallera ofrece una respuesta precisa, contribuyendo a la sensación de control que transmite el vehículo.
Competencia
En su momento, el Mercedes-Benz ML 55 AMG se enfrentaba a un selecto grupo de SUV de altas prestaciones. Entre sus principales rivales se encontraban el BMW X5 4.6is, con una filosofía similar de combinar lujo y deportividad, y el Porsche Cayenne Turbo, que llegaría poco después para redefinir el segmento. Otros competidores podrían incluir el Range Rover Sport, aunque con un enfoque más orientado al lujo y las capacidades todoterreno puras. El ML 55 AMG se distinguía por su motor AMG de gran cilindrada y su equilibrio entre prestaciones en carretera y una sorprendente capacidad fuera del asfalto, ofreciendo una alternativa robusta y potente a sus rivales europeos.
Conclusión
El Mercedes-Benz ML 55 AMG de 2002 es un clásico moderno, un SUV que desafió las expectativas y sentó las bases para la categoría de los SUV de alto rendimiento. Es un vehículo que combina la practicidad de un todoterreno con la emoción de un deportivo, todo ello envuelto en el lujo y la ingeniería de Mercedes-Benz. Su potente motor V8, su diseño imponente y sus capacidades dinámicas lo convierten en una opción fascinante para aquellos que buscan un coche con carácter y una presencia inconfundible. Aunque su consumo de combustible es elevado y su tecnología interior es de otra época, la experiencia de conducción que ofrece es atemporal y profundamente gratificante. Es un coche para disfrutar, para sentir la carretera y para hacer una declaración audaz en cada viaje.