Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase M
Potencia
150CV
Par
220Nm
Consumo
12.7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.2s
Vel. Máx.
177km/h
Peso
1860kg
Precio
34,889€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
AWD
5 / 5 puertas
633 L
70 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz ML 230 · 150 CV (1997-2000)
Descripción general
El Mercedes-Benz ML 230 de 1998 marcó un hito en la historia de la marca, siendo uno de los pioneros en el segmento de los SUV de lujo. Con su robusta presencia y el prestigio de la estrella de tres puntas, este modelo buscaba ofrecer una combinación de confort, capacidad todoterreno y la elegancia característica de Mercedes-Benz. Su lanzamiento generó gran expectación, posicionándose como una alternativa sofisticada para aquellos que buscaban aventura sin renunciar al lujo.
Experiencia de conducción
Al volante del ML 230, la sensación es de solidez y seguridad. Su motor de gasolina de 2.3 litros y 150 CV, aunque no es un derroche de potencia, ofrece una respuesta adecuada para la conducción diaria y alguna escapada fuera del asfalto. La aceleración de 0 a 100 km/h en 13.2 segundos y una velocidad máxima de 177 km/h sugieren un ritmo tranquilo, más enfocado en el confort que en la deportividad. La tracción integral permanente (AWD) proporciona una confianza extra en diversas condiciones, mientras que el consumo combinado de 12.7 l/100km nos recuerda que estamos ante un vehículo de otra época, con un apetito considerable por el combustible. La experiencia de conducción es suave, con una suspensión que absorbe bien las irregularidades del terreno, aunque la dirección puede sentirse algo menos precisa en comparación con vehículos más modernos.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz ML 230 de 1998 es inconfundiblemente robusto y funcional, con líneas que denotan su capacidad todoterreno. Sus dimensiones generosas, con 4587 mm de largo, 1833 mm de ancho y 1813 mm de alto, le otorgan una presencia imponente. El frontal, con la parrilla característica de Mercedes-Benz y sus faros grandes, proyecta una imagen de fuerza. El interior, aunque sobrio para los estándares actuales, ofrecía materiales de calidad y un buen nivel de acabados, con espacio suficiente para cinco ocupantes y un maletero de 633 litros, ideal para viajes largos o para transportar equipaje voluminoso. Su estética, aunque ha envejecido, mantiene un cierto encanto clásico que lo distingue de los SUV contemporáneos.
Tecnología y características
En su época, el ML 230 incorporaba tecnología avanzada para un SUV. Su motor de cuatro cilindros en línea, con 2295 cc y 150 CV, utilizaba inyección indirecta y una relación de compresión de 10.4, lo que era un estándar respetable. La transmisión manual de 5 velocidades, combinada con la tracción integral permanente, ofrecía un control sólido en diferentes superficies. Aunque carecía de las sofisticadas ayudas a la conducción actuales, su enfoque en la seguridad pasiva y la robustez mecánica eran sus pilares tecnológicos. La construcción del motor con bloque de hierro y culata de aluminio era una combinación probada para la durabilidad. No obstante, la ausencia de sistemas como el Stop/Start o una mayor eficiencia en el consumo de combustible lo sitúan claramente en su contexto temporal.
Competencia
En el mercado de finales de los 90, el Mercedes-Benz ML 230 se enfrentaba a competidores como el BMW X5 (que llegaría poco después), el Lexus RX, el Range Rover y el Jeep Grand Cherokee. Cada uno ofrecía una propuesta diferente, pero el ML 230 se distinguía por su equilibrio entre el lujo de Mercedes-Benz y una capacidad todoterreno genuina, algo que no todos sus rivales podían igualar con la misma solvencia. Su precio de 34.889 € lo situaba en la parte alta del segmento, compitiendo directamente con las opciones más premium.
Conclusión
El Mercedes-Benz ML 230 de 1998 es un vehículo que, a pesar del paso del tiempo, sigue evocando una sensación de aventura y lujo. Fue un pionero en su segmento, sentando las bases para la popularidad de los SUV de alta gama. Aunque sus prestaciones y consumo no son comparables a los modelos actuales, su robustez, su diseño atemporal y la calidad de construcción de Mercedes-Benz lo convierten en un clásico con un encanto particular. Es un coche para quienes valoran la historia, la comodidad y la capacidad de explorar más allá del asfalto, sin prisas y disfrutando del camino.