Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC · 585 CV (2015-2018)

2016
Gasolina
AWD
Automático 7v
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Mercedes-Benz Clase GLE - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase GLE

Potencia

585CV

Par

760Nm

Consumo

11.8l/100

Emisiones

276g/km

0-100 km/h

4.2s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

2345kg

Precio

142,500

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 7v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

690 L

Depósito

93 L

Potencia

430 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima585 CV / 430 kW
Par máximo760 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 7v

Capacidades

Depósito93 L
Maletero690 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC · 585 CV (2015-2018)

Descripción general

El Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC de 2016 es una declaración de intenciones, un SUV que desafía las leyes de la física con su potencia desmedida y su lujo inconfundible. No es solo un coche, es una experiencia, una máquina diseñada para aquellos que buscan la máxima expresión de deportividad y exclusividad en un formato familiar.

Experiencia de conducción

Al volante de este AMG GLE 63 S, las sensaciones son puramente adictivas. El motor V8 de 5.5 litros, con sus 585 CV, ruge con una melodía embriagadora que te eriza la piel. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 4.2 segundos te pega al asiento, mientras que la tracción integral 4MATIC te mantiene pegado al asfalto, transmitiendo una confianza inquebrantable. A pesar de su tamaño y peso, la dirección es precisa y la suspensión, aunque firme, absorbe las irregularidades con maestría, ofreciendo un equilibrio sorprendente entre deportividad y confort. Cada curva es una invitación a exprimir su potencial, y cada recta, una oportunidad para sentir la adrenalina correr por tus venas.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC es una fusión perfecta de elegancia y agresividad. Sus líneas musculosas y su imponente parrilla frontal con el distintivo AMG no dejan lugar a dudas sobre su carácter deportivo. Las llantas de 21 pulgadas, los pasos de rueda ensanchados y los cuatro escapes traseros cromados refuerzan su imagen atlética. En el interior, el lujo y la calidad son palpables en cada detalle. Los asientos deportivos de cuero, el volante AMG y los acabados en fibra de carbono o madera noble crean un ambiente sofisticado y tecnológico, donde cada elemento está pensado para el disfrute del conductor y sus acompañantes.

Tecnología y características

Este GLE 63 S incorpora una avanzada tecnología que mejora tanto el rendimiento como la seguridad y el confort. El motor V8 biturbo es una obra de ingeniería, con inyección directa y admisión variable para optimizar la entrega de potencia. La transmisión automática de 7 velocidades, con su rapidez y suavidad, se adapta a cualquier estilo de conducción. El sistema de tracción integral 4MATIC garantiza una adherencia excepcional en todo momento. Además, cuenta con un completo arsenal de sistemas de asistencia a la conducción, como el control de crucero adaptativo, el asistente de mantenimiento de carril y el sistema de frenada de emergencia, que velan por la seguridad de los ocupantes. La conectividad y el infoentretenimiento también están a la altura, con una pantalla central de alta resolución y un sistema de sonido premium que transforman cada viaje en una experiencia multimedia.

Competencia

En el exclusivo segmento de los SUV de altas prestaciones, el Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC se enfrenta a rivales de la talla del BMW X5 M, el Porsche Cayenne Turbo y el Audi RS Q8. Cada uno de ellos ofrece una propuesta única, pero el GLE 63 S destaca por su combinación de lujo, potencia bruta y un carácter AMG inconfundible que lo hace sobresalir entre la multitud.

Conclusión

El Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4MATIC de 2016 es un SUV que no hace concesiones. Es un vehículo para aquellos que buscan la máxima expresión de lujo, potencia y deportividad, sin renunciar a la versatilidad de un SUV. Su precio de 142.500 euros lo sitúa en la cúspide del segmento, pero cada euro invertido se traduce en una experiencia de conducción inigualable y en la satisfacción de poseer una máquina excepcional. Es un coche que te hace sentir especial, que te emociona en cada trayecto y que te recuerda que la ingeniería automotriz puede ser una verdadera obra de arte.