Mercedes-Benz G 55 AMG L · 507 CV (2010-2011)

2008
Gasolina
AWD
Automático 5v
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Mercedes-Benz Clase G - Vista 3
Mercedes-Benz Clase G - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase G

Potencia

507CV

Par

700Nm

Consumo

15.9l/100

Emisiones

378g/km

0-100 km/h

5.5s

Vel. Máx.

210km/h

Peso

2550kg

Precio

141,938

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

480 L

Depósito

96 L

Potencia

373 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima507 CV / 373 kW
Par máximo700 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito96 L
Maletero480 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz G 55 AMG L · 507 CV (2010-2011)

Descripción general

El Mercedes-Benz Clase G 55 AMG L de 2008 es una declaración de intenciones, un vehículo que desafía las convenciones y se erige como un icono de lujo y potencia. Con su motor de gasolina de 5.4 litros y 507 CV, este todoterreno no es solo un medio de transporte, sino una experiencia en sí misma. Su precio de 141.938 € en 2011 lo posicionaba en la cúspide del segmento, ofreciendo exclusividad y un rendimiento que pocos pueden igualar. Es un coche para aquellos que buscan la máxima expresión de la ingeniería alemana, combinando la robustez de un todoterreno con el refinamiento y la potencia de un deportivo de lujo.

Experiencia de conducción

Conducir el Clase G 55 AMG L es una experiencia visceral. El rugido de su motor V8 sobrealimentado es una sinfonía para los amantes de la gasolina, y la aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5.5 segundos es sorprendente para un vehículo de su tamaño y peso. A pesar de su naturaleza todoterreno, la suspensión y la dirección ofrecen una sensación de control y estabilidad, aunque no se puede negar su herencia de vehículo robusto. La sensación de seguridad y dominio de la carretera es inigualable, y cada viaje se convierte en una aventura, ya sea en la ciudad o fuera del asfalto. Es un coche que te hace sentir poderoso, imponente y conectado con la carretera.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz Clase G 55 AMG L es atemporal y distintivo. Sus líneas cuadradas y robustas, que apenas han cambiado desde su concepción, le otorgan una presencia inconfundible. Es un diseño que evoca fuerza y durabilidad, pero que en esta versión AMG se realza con detalles deportivos que le confieren un aire de exclusividad. Las llantas de 19 pulgadas y los detalles cromados añaden un toque de sofisticación a su apariencia ruda. En el interior, el lujo se hace patente con materiales de alta calidad y un acabado impecable, combinando la funcionalidad de un todoterreno con el confort de una berlina de lujo. Es un diseño que no pasa de moda y que sigue atrayendo miradas allá donde va.

Tecnología y características

A pesar de su diseño clásico, el Clase G 55 AMG L incorpora tecnología de vanguardia para su época. Su motor V8 de 507 CV con inyección indirecta, compresor e intercooler es una obra maestra de la ingeniería. La transmisión automática de 5 velocidades, aunque no es la más moderna, ofrece un rendimiento suave y eficiente. La tracción integral permanente (AWD) y los ejes rígidos en ambos trenes garantizan una capacidad todoterreno excepcional. En el interior, aunque no cuenta con las pantallas táctiles de los modelos actuales, ofrece un sistema de infoentretenimiento completo y un equipamiento de confort que asegura una experiencia de viaje placentera. Es una combinación perfecta de tradición y tecnología, donde la robustez mecánica se une a la sofisticación electrónica.

Competencia

En su segmento, el Mercedes-Benz Clase G 55 AMG L se enfrentaba a rivales de la talla del Range Rover Sport Supercharged o el Porsche Cayenne Turbo. Sin embargo, el Clase G siempre ha tenido un carácter único que lo diferencia. Mientras que sus competidores se inclinaban más hacia el lujo y el rendimiento en carretera, el Clase G mantenía su esencia de todoterreno puro, ofreciendo una capacidad off-road superior sin renunciar al lujo y la potencia. Su exclusividad y su diseño icónico lo situaban en una liga propia, atrayendo a un público que buscaba algo más que un simple SUV de lujo.

Conclusión

El Mercedes-Benz Clase G 55 AMG L de 2008 es un vehículo que trasciende la categoría de simple automóvil. Es una leyenda sobre ruedas, una máquina que combina la potencia bruta con el lujo más exquisito y una capacidad todoterreno inigualable. Su precio elevado y su consumo de combustible son el peaje a pagar por poseer una pieza de ingeniería tan especial. Es un coche para aquellos que no se conforman con lo convencional, que buscan emociones fuertes y que valoran la exclusividad y la tradición. Un verdadero icono que sigue cautivando a los entusiastas del motor.