Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLK
Potencia
224CV
Par
510Nm
Consumo
7.4l/100
Emisiones
197g/km
0-100 km/h
6.9s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1680kg
Precio
50,801€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 7v
RWD
4 / 2 puertas
435 L
62 L
165 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz CLK 320 CDI Coupé Aut. · 224 CV (2005-2008)
Descripción general
El Mercedes-Benz CLK 320 CDI Coupé Aut. de 2005 es una joya de la ingeniería alemana, un coupé que combina elegancia, potencia y el inconfundible lujo de Mercedes. Este modelo, con su motor diésel de 224 CV, se posicionó como una opción muy atractiva para quienes buscaban un coche deportivo pero con la eficiencia y el refinamiento de un diésel de alta gama. Su presencia en la carretera es imponente, prometiendo una experiencia de conducción que va más allá de lo ordinario.
Experiencia de conducción
Al volante del CLK 320 CDI, la sensación es de control absoluto y confort sublime. El motor V6 diésel, con sus 224 CV y un par motor de 510 Nm disponible desde las 1600 rpm, ofrece una respuesta contundente y una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 6.9 segundos, lo que es impresionante para un diésel de su época. La transmisión automática de 7 velocidades gestiona la potencia con suavidad y precisión, haciendo que cada cambio sea casi imperceptible. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra las irregularidades del asfalto con maestría, proporcionando un viaje sereno y aplomado. La dirección asistida eléctrica y sensible a la velocidad contribuye a una experiencia de conducción ágil y conectada, mientras que los frenos de disco ventilados delanteros de 330 mm garantizan una detención segura y eficaz. Es un coche que invita a devorar kilómetros con una sonrisa, sintiendo la carretera pero sin sufrir sus imperfecciones.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz CLK Coupé de 2005 es atemporal y sofisticado. Sus líneas fluidas y elegantes, con una silueta coupé distintiva, irradian una belleza clásica que no pasa de moda. Los faros dobles, característicos de Mercedes en esa época, le otorgan una mirada penetrante y reconocible. La parrilla frontal, con la estrella de tres puntas en el centro, es un símbolo de prestigio. Las proporciones son equilibradas, con una longitud de 4652 mm y una anchura de 1740 mm, que le confieren una presencia robusta pero estilizada. Las llantas de 17 pulgadas, con neumáticos 225/45 R17 delante y 245/40 R17 detrás, no solo complementan su estética deportiva, sino que también contribuyen a su excelente agarre. El interior, con capacidad para cuatro ocupantes, es un santuario de lujo y ergonomía, donde cada detalle está pensado para el confort y la funcionalidad.
Tecnología y características
En 2005, el CLK 320 CDI Coupé incorporaba tecnología de vanguardia. Su motor diésel de 2987 cc, con inyección directa por conducto común, admisión variable, turbo de geometría variable e intercooler, era un prodigio de eficiencia y rendimiento. La construcción del motor, con bloque y culata de aluminio, contribuía a un peso contenido y una mejor disipación del calor. La transmisión automática de 7 velocidades era una de las más avanzadas de su tiempo, ofreciendo una experiencia de conducción suave y eficiente. Aunque no contaba con Start/Stop, su consumo combinado de 7.4 l/100km era muy competitivo para un coche de su potencia y tamaño. La dirección asistida eléctrica sensible a la velocidad y el sistema de frenos de alto rendimiento eran ejemplos de la atención de Mercedes a la seguridad y el dinamismo. El habitáculo, aunque no se detalla en los datos, seguramente ofrecía un sistema de infoentretenimiento y climatización avanzados para la época, garantizando una experiencia de viaje placentera.
Competencia
En el segmento de los coupés diésel de lujo, el Mercedes-Benz CLK 320 CDI Coupé se enfrentaba a duros competidores. Entre ellos, destacaban el BMW Serie 3 Coupé (E46 o el recién llegado E92), que ofrecía una dinámica de conducción más deportiva, y el Audi A5 Coupé, que aunque llegó un poco más tarde, se posicionaría como un rival directo con su sofisticado diseño y tracción quattro. Otros posibles contendientes podrían haber sido el Lexus SC 430, aunque con una filosofía más orientada al confort y motores de gasolina, o incluso coupés de marcas premium americanas, aunque con menor presencia en el mercado europeo. El CLK se distinguía por su equilibrio entre confort, lujo y un motor diésel potente y eficiente, ofreciendo una alternativa muy atractiva a sus rivales de gasolina y a los diésel de menor potencia.
Conclusión
El Mercedes-Benz CLK 320 CDI Coupé Aut. de 2005 es un testimonio de la excelencia automotriz. Es un coche que no solo te lleva de un punto A a un punto B, sino que te envuelve en una experiencia de lujo y rendimiento. Su diseño atemporal, su potente y eficiente motor diésel, y su confort de marcha lo convierten en un clásico moderno. Es la elección perfecta para aquellos que buscan un coupé elegante, potente y con la fiabilidad que solo Mercedes-Benz puede ofrecer. Un coche que, incluso hoy, sigue siendo un placer conducir y admirar, un verdadero icono de la ingeniería alemana que combina la pasión por la conducción con la practicidad de un diésel.