Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLK
Potencia
218CV
Par
310Nm
Consumo
10.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
8.3s
Vel. Máx.
236km/h
Peso
1695kg
Precio
53,791€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
4 / 2 puertas
350 L
62 L
160 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz CLK 320 Cabrio Avantgarde · 218 CV (2000-2001)
Descripción general
El Mercedes-Benz CLK 320 Cabrio Avantgarde de 1996 es una joya atemporal que encarna la elegancia y el lujo de la marca alemana. Este descapotable de dos puertas y cuatro plazas, con su motor de gasolina de 3.2 litros y 218 CV, promete una experiencia de conducción sofisticada y emocionante. Lanzado en un momento donde la ingeniería automotriz alcanzaba nuevas cotas, este modelo se posicionó como un referente en su segmento, ofreciendo un equilibrio perfecto entre rendimiento y confort.
Experiencia de conducción
Conducir el CLK 320 Cabrio es una experiencia que deleita los sentidos. El motor V6 de 218 CV, acoplado a una transmisión automática de 5 velocidades, ofrece una respuesta suave y potente, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8.3 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 236 km/h. La suspensión, aunque no es la más deportiva, proporciona un confort excepcional, absorbiendo las irregularidades del camino con maestría. La dirección, precisa y comunicativa, permite sentir la carretera, mientras que los frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros garantizan una detención segura. Con la capota bajada, el viento en el cabello y el sonido del motor, cada viaje se convierte en una aventura inolvidable, una invitación a disfrutar de la libertad y el placer de conducir.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz CLK 320 Cabrio Avantgarde es un testimonio de la elegancia clásica de Mercedes. Sus líneas fluidas y armoniosas, combinadas con una silueta atemporal, le otorgan una presencia imponente y sofisticada. Los faros dobles, característicos de la época, le confieren una mirada distintiva, mientras que la parrilla frontal, con la estrella de tres puntas, reafirma su linaje. El interior, con sus acabados de alta calidad y su diseño ergonómico, invita a la comodidad y al lujo. Los asientos de cuero, el salpicadero bien organizado y los detalles en madera o aluminio crean un ambiente refinado y acogedor. La capota de lona, cuando está plegada, se integra perfectamente en la carrocería, manteniendo la estética limpia y elegante del vehículo.
Tecnología y características
A pesar de ser un modelo de 1996, el CLK 320 Cabrio Avantgarde incorporaba tecnología avanzada para su época. Su motor de gasolina de 3.2 litros, con inyección indirecta y culata y bloque de aluminio, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La transmisión automática de 5 velocidades, una característica de lujo en aquel entonces, ofrecía cambios suaves y precisos. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos ABS y airbags, elementos que no eran estándar en todos los vehículos de la época. Aunque no disponía de las pantallas táctiles o los sistemas de asistencia a la conducción actuales, su tecnología se centraba en la fiabilidad mecánica y el confort de marcha, ofreciendo una experiencia de conducción placentera y segura.
Competencia
En su momento, el Mercedes-Benz CLK 320 Cabrio Avantgarde se enfrentaba a rivales de la talla del BMW Serie 3 Cabrio y el Audi A4 Cabrio. El BMW ofrecía una experiencia de conducción más deportiva y ágil, mientras que el Audi destacaba por su tracción integral y su diseño más moderno. Sin embargo, el CLK se distinguía por su elegancia atemporal, su confort superior y la reputación de fiabilidad de Mercedes-Benz. Era la elección perfecta para aquellos que buscaban un descapotable que combinara lujo, rendimiento y un toque de distinción, sin sacrificar la comodidad en los viajes largos.
Conclusión
El Mercedes-Benz CLK 320 Cabrio Avantgarde de 1996 es más que un coche; es una declaración de estilo y una invitación a disfrutar de la vida. Su combinación de diseño elegante, rendimiento suave y un interior lujoso lo convierte en un clásico instantáneo. Es un vehículo que evoca emociones, que te hace sentir especial cada vez que te pones al volante. Para los amantes de los descapotables y de la marca de la estrella, este CLK es una pieza de colección que sigue ofreciendo una experiencia de conducción gratificante y sofisticada, un verdadero icono de la ingeniería alemana que ha sabido envejecer con gracia.