Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase C
Potencia
193CV
Par
280Nm
Consumo
9.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.1s
Vel. Máx.
223km/h
Peso
1500kg
Precio
38,862€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
5 / 5 puertas
464 L
62 L
142 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz C 230 K Classic Familiar Aut. · 193 CV (2000-2001)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase C familiar de 1997, en su versión C 230 K Classic Familiar Aut., es una joya de la ingeniería alemana que combina la elegancia atemporal con una funcionalidad excepcional. Este modelo, con su motor de gasolina de 193 CV y transmisión automática de 5 velocidades, representa la cúspide del lujo y la practicidad de su época, ofreciendo una experiencia de conducción refinada y un espacio interior generoso para toda la familia.
Experiencia de conducción
Al volante de este Clase C familiar, la sensación es de solidez y confort. La suspensión absorbe las irregularidades del camino con maestría, mientras que el motor de 2.3 litros, sobrealimentado por compresor, entrega una potencia suave pero contundente. La aceleración de 0 a 100 km/h en 9.1 segundos es más que respetable para un familiar de su tamaño, y la velocidad máxima de 223 km/h asegura viajes largos sin esfuerzo. La dirección, aunque no es la más comunicativa, ofrece una precisión adecuada para un coche de su categoría, y los frenos de disco ventilados en el eje delantero proporcionan una detención segura y eficaz. Es un coche que invita a devorar kilómetros con una sensación de seguridad y bienestar inigualables.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase C familiar de 1997 es un testimonio de la filosofía de Mercedes-Benz: elegancia discreta y funcionalidad. Sus líneas clásicas y proporcionadas, con una silueta alargada que enfatiza su capacidad de carga, le otorgan una presencia distinguida en la carretera. Los faros delanteros, con su diseño característico, y la parrilla frontal con la estrella de tres puntas, son elementos icónicos que refuerzan su identidad de marca. El interior, aunque sobrio, está construido con materiales de alta calidad y un ajuste impecable, creando un ambiente acogedor y lujoso. Cada detalle, desde los asientos hasta los paneles de las puertas, irradia una sensación de durabilidad y buen gusto.
Tecnología y características
A pesar de ser un modelo de finales de los 90, el Mercedes-Benz Clase C 230 K Classic Familiar Aut. incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. Su motor de 2.3 litros con compresor e intercooler ofrecía una combinación de potencia y eficiencia. La transmisión automática de 5 velocidades garantizaba cambios suaves y una experiencia de conducción relajada. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco en ambos ejes, siendo ventilados los delanteros, y estabilizadores en ambos trenes para una mayor estabilidad. Aunque carecía de las pantallas táctiles y los sistemas de asistencia a la conducción modernos, su tecnología se centraba en la fiabilidad mecánica y el confort de marcha, elementos que Mercedes-Benz dominaba a la perfección.
Competencia
En su época, el Mercedes-Benz Clase C familiar competía con modelos de prestigio como el BMW Serie 3 Touring, el Audi A4 Avant y el Volvo V70. Frente a ellos, el Clase C destacaba por su equilibrio entre confort, calidad de construcción y una imagen de marca inconfundible. Mientras que el BMW ofrecía una experiencia de conducción más deportiva, y el Audi se inclinaba por un diseño más moderno, el Mercedes-Benz se posicionaba como la opción más clásica y refinada, ideal para aquellos que valoraban la tradición y la comodidad por encima de todo.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase C 230 K Classic Familiar Aut. de 1997 es mucho más que un simple coche; es una declaración de intenciones. Representa la época dorada de la ingeniería alemana, donde la calidad, la durabilidad y el confort eran las máximas prioridades. Su combinación de un motor potente y suave, una transmisión automática eficiente y un diseño atemporal lo convierten en un clásico moderno. Es un vehículo que, incluso hoy, sigue ofreciendo una experiencia de conducción gratificante y un nivel de lujo que pocos pueden igualar. Para aquellos que buscan un familiar con historia, carácter y una fiabilidad probada, este Clase C es una elección excepcional.