Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase C
Potencia
136CV
Par
190Nm
Consumo
9.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
12.1s
Vel. Máx.
197km/h
Peso
1420kg
Precio
34,414€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
5 / 5 puertas
464 L
62 L
100 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz C 200 Classic Familiar Aut. · 136 CV (2000-2001)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase C 200 Classic Familiar Aut. de 1997 es un vehículo que encarna la esencia de la marca alemana en su segmento familiar. Con una estética sobria y elegante, este modelo se presentaba como una opción ideal para quienes buscaban combinar el lujo y la comodidad de Mercedes-Benz con la versatilidad de un coche familiar. Su motor de gasolina de 136 CV, acoplado a una transmisión automática de 5 velocidades, prometía una conducción suave y refinada, característica de la época y del fabricante.
Experiencia de conducción
Al volante de este Clase C familiar, la sensación predominante es de aplomo y confort. La suspensión, aunque no excesivamente blanda, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, ofreciendo un viaje placentero tanto en ciudad como en carretera. El motor de 136 CV, sin ser un prodigio de potencia, cumple con solvencia para mover el conjunto, especialmente en un uso tranquilo y familiar. La dirección, precisa y con la asistencia justa, contribuye a una experiencia de conducción relajada. La caja de cambios automática, suave en sus transiciones, añade un plus de comodidad, haciendo que los trayectos largos sean menos fatigantes. Es un coche que invita a disfrutar del camino sin prisas, con una insonorización que aísla bien del exterior, creando un ambiente sereno en el habitáculo.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase C familiar de 1997 es un reflejo de la filosofía de la marca en aquella época: líneas clásicas, elegantes y atemporales. La carrocería familiar se integra armoniosamente con el diseño general del Clase C, sin sacrificar la estética en favor de la funcionalidad. Los faros delanteros, de formas suaves y redondeadas, se combinan con una parrilla frontal prominente que exhibe la estrella de Mercedes-Benz. La silueta lateral es equilibrada, con una línea de cintura que asciende ligeramente hacia la zaga, y unas ventanillas amplias que aportan luminosidad al interior. En la parte trasera, los pilotos verticales y el portón de generosas dimensiones subrayan su carácter práctico. Es un diseño que, a pesar de los años, mantiene una dignidad y una presencia que pocos vehículos de su época pueden igualar.
Tecnología y características
En 1997, el Mercedes-Benz Clase C 200 Classic Familiar Aut. incorporaba una tecnología que, si bien hoy puede parecer básica, era avanzada para su tiempo. El motor de gasolina de 1998 cc con inyección indirecta y 4 válvulas por cilindro ofrecía una buena eficiencia y suavidad de funcionamiento. La transmisión automática de 5 velocidades era un elemento de confort significativo, proporcionando cambios de marcha fluidos. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, así como estabilizadoras en ambos ejes, lo que contribuía a un comportamiento dinámico seguro. Aunque carecía de las pantallas táctiles y los sistemas de asistencia a la conducción actuales, su tecnología se centraba en la fiabilidad mecánica y en ofrecer una experiencia de conducción refinada y segura.
Competencia
En su segmento, el Mercedes-Benz Clase C 200 Classic Familiar Aut. de 1997 se enfrentaba a competidores de peso como el BMW Serie 3 Touring, el Audi A4 Avant y el Volvo V70. Cada uno ofrecía su propia interpretación del familiar premium, pero el Mercedes-Benz destacaba por su equilibrio entre confort, calidad de construcción y una imagen de marca consolidada. Mientras que el BMW podía ofrecer una experiencia de conducción más deportiva, y el Audi un diseño más moderno, el Clase C se posicionaba como la opción más clásica y orientada al confort, con una reputación de durabilidad que pocos podían igualar.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase C 200 Classic Familiar Aut. de 1997 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un testimonio de la ingeniería y el diseño de Mercedes-Benz. Ofrece una combinación de elegancia, confort y practicidad que lo convierte en una opción interesante para quienes buscan un clásico moderno con un toque de distinción. Su fiabilidad mecánica y la calidad de sus acabados aseguran que, con un mantenimiento adecuado, este vehículo puede seguir ofreciendo muchas satisfacciones. Es un coche para disfrutar de la carretera con tranquilidad, un compañero fiel para el día a día y para los viajes en familia, que evoca una época donde la calidad y la durabilidad eran pilares fundamentales en la construcción automotriz.